Esta freidora de aire de Cosori ha cambiado mi día a día por completo, ya que me ha ayudado a cocinar platos de todo tipo con un denominador común: estaban todos riquísimos

Me gusta mucho cocinar y cuando tengo tiempo me paso bastantes horas en la cocina preparando cualquier cosa.

Ahora bien, el tiempo libre que tengo durante mi día a día no es que sea demasiado y, al final, para comer o cenar, recurro a un sandwich —para seguir trabajando frente al ordenador— o bien un filete simple —con un vuelta y vuelta y un par de minutos ya lo tienes servido en el plato—, por poner un par de ejemplos rápidos. 

El tiempo y la atención son dos elementos clave cuando estás entre olla y sartén y, por tanto, esos platos más preparados siempre quedan relegados al fin de semana o a momentos especiales. Para ser más claros: acabo comiendo mal y pillo cualquier cosa que pueda hacer rápidamente.

Hace ya unas cuantas semanas me dieron la oportunidad de probar la freidora de aire Cosori, con capacidad para 4,7L y lo cierto es que tras un tiempo usándola se ha convertido en una aliada absolutamente indispensable y tengo claro que ya no puedo vivir sin ella. 

¿Sus principales credenciales? Una facilidad de uso pasmosa, 9 modos diferentes para adecuarse a varios tipos de alimentos y un precio absolutamente ideal: 109,98 euros. 

Un diseño compacto, moderno y muy bonito que cabe en cualquier parte de tu cocina. 

Lo primero que llama la atención de esta freidora de aire de Cosori es su tamaño compacto de tan solo 27,18 x 27,43 x 30,23 cm y más teniendo en cuenta que tiene una capacidad de 4,7L. Es decir, puedes preparar platos para 4 comensales. 

Gracias a estas dimensiones, es un electrodoméstico que puede encajar en cualquier parte de tu cocina, ya sea grande o pequeña, y que puedes guardar sin problemas en el armario y sacarla cuando la necesites, puesto que sus 5,44 kilogramos hacen que sea fácil de mover de un lado a otro. 

En cuanto al diseño, cuenta con un panel táctil en donde se despliegan los diferentes programas de cocina, de los que hablaré un poco más adelante, enmarcados en una superficie de un negro brillante similar al de la vitrocerámica a la que solo le puedo poner una pega: deja alguna huella que otra.

Por lo demás, cuenta con una salida de aire caliente en la parte trasera —debes dejar un hueco entre el electrodoméstico y cualquier superficie para no crear problemas— así como la cesta en donde vas a poner los alimentos.

Y para cerrar, un par de cosas que no me han convencido. 

Primero, el botón para abrir la freidora estaba algo duro y tenía que apoyarme en la freidora para extraerlo más fácilmente, algo que con el uso se ha ido solucionando, eso sí. 

Segundo, la placa antiadherente tiene rejillas muy amplias, por lo que algún alimento se puede caer en la parte inferior. Sí, puedes usar papel de cocina, pero la marca recomienda cocinar los alimentos directamente en la cesta para que el calor se reparta de manera uniforme. 

Un recetario amplio y variado que solo es la punta del iceberg: en tu imaginación está el límite.

Uno de los puntos fuertes de la freidora es que en el interior del paquete viene un recetario con 33 platos diferentes con los que ir acostumbrándote a usar el electrodoméstico. 

Creo que uno de los grandes miedos que circulan en el aire, nunca mejor dicho, es, ¿Se pueden hacer más cosas además de patatas fritas o congelados? Pues el recetario así lo demuestra, ya que vienen platos como pollo asado, chuletas de cordero, brócoli asado, pescado frito, mini pizzas o incluso tartas de manzana, por citar algunos ejemplos. 

¿Lo mejor? Que viene un paso a paso para que puedas ir experimentando y perder el miedo. Al final, prácticamente puedes hacer casi cualquier cosa y el límite lo marca tu imaginación. 

En mi caso personal he de decir que me leí el recetario, pero lo dejé de lado rápidamente y me puse a investigar por TikTok donde con solo las palabras clave "Cosori", "recetas" y "Freidora de aire" te salen cientos de opciones de todo tipo. 

7 modos diferentes para adecuar temperatura y tiempo a cada alimento para que nunca se pasen o se quemen.

Más allá del diseño o las recetas, que al final son cosas menos importantes en un producto de estas características, la clave está, principalmente, en los diferentes modos que esconde en su interior. 

En este sentido va muy bien servido: 7 modos de empleo entre los que se encuentran Pollo, Pescado, Vegetales, Carne, Bacon, Congelado y Fritos. Un abanico francamente completo, la verdad. 

Lo mejor es que dependiendo del botón que pulses se establece un tiempo de cocción, así como una temperatura, que puede ir desde los 75º hasta los 230º. 

Como supondrás, también puedes subir o bajar la temperatura o aumentar o recortar el tiempo de cocción a tu gusto con solo pulsar un botón, aunque si te digo la verdad, es algo que no he tocado en absoluto, ya que lo que he cocinado siempre estaba en su punto. 

A esto suma 2 botones extra. Uno que responde al nombre de Shake que te avisa cuando se ha pasado la mitad del tiempo para que saques la cesta y sacudas el interior y así se cocine todo de forma homogénea y la estrella de la corona: Keep Warm. Sí, un botón para mantener la comida caliente en su interior sin que siga cocinándose. 

Por decir algo negativo, ha habido determinados alimentos que, al no tener un modo propio, andas algo perdido en cuanto a tiempos de cocción. Esto se soluciona mirando lo que tarda en internet en hacerse y en ir abriendo la cesta cada cierto tiempo para ver cuánto le queda. 

Durante la prueba he cocinado de todo. Desde salmón, nuggets de pollo, patatas fritas, mazorcas de maíz, salchichas, judías verdes, revuelto de espárragos con gambas... y todos los platos tenían un denominador común: estaban riquísimos y solo con un poco de sal y unas gotas de aceite.

Todo esto está muy bien, pero queda lo más importante: ¿Qué tal sabe la comida? Pues lo cierto es que me he quedado francamente asombrado, ya que prácticamente todo lo que he cocinado en la Cosori estaba buenísimo.

Y no, no me he roto la cabeza en la preparación. Me hice un salmón, por ejemplo, al que solo le puse unas gotas de aceite y algo de sal. En 9 minutos lo tenía en el plato y con un sabor excelente, mucho mejor que el del horno, tengo que decirlo. 

También me preparé unas mazorcas de maíz, sin tener ni idea del tiempo de cocción o la temperatura, pero internet dio en el clavo y tras 15 minutos, servido en el plato y con un sabor riquísimo. 

Otro día me hice un revuelto de gambas, una de las clásicas bolsas congeladas de Mercadona que tiene espárragos, judías y algo más. Con la opción Vegetales lo tuve listo en solo 10 minutos. 

En estos días también me he hecho unas salchichas con patatas fritas: me encantaron las primeras, pero las segundas no me gustaron tanto. A estas sí que se les nota que les hace falta aceite en mayor cantidad. 

Y no te voy a mentir, he aprovechado también para hacerme nuggets de pollo y varitas de pescado y los resultados son excelentes dentro de lo que es este tipo de comida. ¿Lo más llamativo? Menos tiempo que en el horno y mucho más sabrosos. 

Al final es ir experimentando. No digo que todo te vaya a salir a la perfección, todo puede fallar, pero lo cierto es que en este mes que llevo probando la freidora de Cosori no me ha dejado tirado nunca. 

La freidora de aire Cosori de 4,7L se ha convertido en un aliado imprescindible de mi cocina y ya no puedo vivir sin ella.

Creo que si me has seguido hasta aquí sabes muy bien lo que te voy decir: no dudes en hacerte con ella. 

Te va a ahorrar mucho tiempo, puedes crear un montón de platos diferentes de manera muy simple y lo cierto es que prácticamente todo lo que he cocinado en su interior estaba riquísimo.

Esos 109,98 euros que supone la compra van a estar muy bien invertidos. Te lo aseguro.