El mejor libro para acabar con todos los hábitos mentales que te impiden progresar, según Bill Gates

Es un libro sobre tenis pero también sobre mucho más. Por eso es de los pocos que Bill Gates ha releído varias veces a lo largo de su vida.

El propio multimillonario así lo ha reconocido en su blog, donde comparte con asiduidad las lecturas que le han interesado por diversas razones. Recientemente Gates compartió sus recomendaciones para el verano, añadiendo por primera vez una serie de televisión y una lista de reproducción de Spotify.

En una de sus entradas, el cofundador de Microsoft asegura que el libro de Timothy Gallwey, El juego interior del tenis (The Inner Game of Tennis) es mucho más que un manual deportivo, elogiándolo como "la mejor guía para salirse del camino marcado por uno mismo".

"Es el mejor libro sobre tenis que he leído, y sus profundos consejos se aplican a muchas otras facetas de la vida. Todavía hoy se lo doy a mis amigos", escribe Gates. 

El juego interior del rendimiento

Inner Game se publicó en 1974 convirtiéndose en un gran éxito. En él, el famoso entrenador de tenis  introdujo la idea de que el tenis se compone de 2 juegos distintos. 

El primero se juega contra oponentes y conlleva la parte técnica; cómo se sujeta la raqueta, cómo se mantiene el brazo nivelado en el revés, etcétera.

En cambio el juego interior es aquel "que tiene lugar en la mente del jugador".  "Se juega contra obstáculos como la falta de concentración, el nerviosismo, las dudas y la autocrítica", extrae Gates del libro. "Se juega para superar todos los hábitos mentales que inhiben la excelencia en el rendimiento".

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Su lectura le permitió al magnate cambiar su forma de jugar este deporte. Antes cualquier fallo le servía como refuerzo negativo que influían durante el resto del partido. "Gallwey presentó formas de dejar ir esos sentimientos negativos y salir de tu propio camino para poder pasar al siguiente punto".

Una mentalidad fácil de aplicar en otras facetas más allá del deporte. El juego interior trata realmente de tu estado de ánimo. ¿Te ayuda o te perjudica?, se pregunta Gates. "Para la mayoría de nosotros es demasiado fácil caer en la autocrítica, lo que inhibe aún más nuestro rendimiento", considera.

Por eso las ideas de Gallwey afectaron a su forma de encarar el trabajo, reconoce 

"Por ejemplo, aunque soy un gran partidario de ser crítico conmigo mismo y objetivo sobre mi propio rendimiento, intento hacerlo a la manera de Gallwey: de una forma constructiva que espero que mejore mi rendimiento. Y aunque no siempre lo hago a la perfección, intento gestionar los equipos de la misma manera".