Con la pandemia se puso de moda hacer tu propio pan en casa, además de otras manualidades culinarias o no. Se abrió de paso el debate entre pan normal y el hecho con masa madre. El resultado es que cada vez más panaderías, pastelerías y supermercados ofrecen esta opción, incluso como únicos productos disponibles. 

Se busca la alimentación más natural y sana posible, y qué mejor forma de comenzar que por el alimento por excelencia, que el español medio toma cada día. Por ello hay que empezar a cuidar tu alimentación por lo que tomas a diario. Pero, ¿qué diferencia hay entre el pan normal y el hecho con masa madre, es tan bueno el segundo frente al primero? 

Qué es la masa madre

La masa madre es un cultivo que se realiza mezclando harina y agua y dejando que las levaduras salvajes, como la Saccharomyces cerevisiae, y las bacterias y microorganismos presentes en el aire realicen una fermentación en el mismo tras consumir los azúcares presentes en la harina, después de transcurrir un tiempo. 

Esto sirve después para la fermentación de masas de pan, sustituyendo o en compañía de las levaduras frescas de panadero, aportando al pan más sabor, más cuerpo, cierta acidez y un carácter tradicional y artesano que hace que sea muy apreciado. Además, el pan de masa madre suele durar más tiempo fresco y crujiente.

Cómo hacer el pan con masa madre

El procedimiento para realizar el pan de masa madre puede tardar unos cinco días, aunque lo único que hay que realizar es la mezcla, el control de la temperatura y verificar la cantidad de líquido que te ayude a obtener una elaboración con grandes burbujas. 

Por tanto, se obtendrá una elaboración con determinadas burbujas que exponen que el proceso ha sido satisfactorio y se ha logrado la fermentación buscada. Esto, lógicamente, parece incompatible con una panadería industrial, rápida y masificada para cubrir la demanda. 

Por qué es mejor la masa madre que el pan normal

Normal entre comillas, porque realmente el natural debería ser el de masa madre. Para empezar, en el primero el proceso de fermentación es natural, y en el segundo se emplea levadura química para acelerar el proceso. 

El resultado de lo natural, el de masa madre, es un pan menos ácido y más fácil de digerir, con lo que es perfecto para personas que digieren mal el trigo y el gluten. La masa madre hace disminuir la existencia de citoquinas pro inflamatorias.

La masa madre para tu mejor digestión

Nutricionalmente, es mejor el pan de masa madre que de uno de harina integral o de grano entero. También influye positivamente en la microbiota intestinal, pero no contiene diferencias relevantes en el proceso de saciedad o el llamado metabolismo de glucosa, esto en lo que se refiere al pan normal.

En cuanto a la conservación, la masa madre es fuente indispensable de lactobacilos, que se caracterizan por tener una incidencia favorable en la conservación del pan, aspecto que influye para que el pan de masa madre se deteriore de una forma más lenta que el normal. En efecto, es un pan que pude ser conservado durante más tiempo en la nevera.

Anímate a hacerlo en casa

Tienes la oportunidad de preparar pan de masa madre con gran facilidad en casa, condición imprescindible para que no acudas a la levadura comercial. 

Ya sabes que además, tras la pandemia se popularizó la compra de panificadoras para hacer pan en casa, con más razón ahora también con la inflación y subida de precios. Es tiempo de ser cada vez más autosuficientes.