Móviles resistentes al agua: ¿realmente puedes bucear con ellos o meterlos en la piscina?

¿Te has comprado un móvil resistente al agua? ¿Quiere decir esto que no importa si se te cae en la piscina o que puedes sumergirlo en la orilla del mar? La respuesta es no: los smartphones no son dispositivos a prueba de agua, un aspecto especificado en la letra pequeña del producto. Averigua  qué quiere decir esto. 

La principal diferencia entre resistencia al agua y a prueba de aguaes que, en el caso de a prueba de agua, serían totalmente sumergibles. En el caso de los teléfonos resistentes al agua, IP significa la calificación de "protección contra la penetración" que, además de agua, abarca otros factores como polvo, suciedad y otros sólidos.

Diseñan un fascinante nanomaterial imposible de mojar: permanece seco incluso después de horas bajo el agua

Desde Android Authoritybrindan una completa explicación de esta diferencia, advirtiendo de que no deberías tratar a tu teléfono inteligente como un dispositivo waterproof. Si solo es resistente al agua, el líquido llegará al interior del dispositivo si ejerces suficiente presión, que a su vez aumenta con la profundidad. 

De hecho, una ola, un chorro de agua o una fuerte salpicadura pueden aumentar la presión por encima del umbral de resistencia del aparato, que podría manifestar el daño tiempo después. 

Incluso con la misma clasificación de IP, los fabricantes de móviles anuncian diferentes niveles de supervivencia para tu teléfono

En teoría, el nivel más alto de resistencia al agua permite una inmersión completa en agua a una profundidad de un metro durante 30 minutos. Pero hay letra pequeña. 

No todos los teléfonos IP68 tienen el mismo nivel de resistencia al agua, determinado por el mencionado índice IP, que señala la Protección de entrada. En concreto, la clasificación IP68 de teléfonos como Galaxy S22, iPhone 13 Pro o Pixel 6 Pro ofrece el nivel más alto de resistencia al agua que puedes tener en un dispositivo de consumo, pero hay diferencias entre ellos.

La serie iPhone 13, por ejemplo, se anuncia como "resistente a salpicaduras, agua y polvo [...] con una clasificación de IP68 según el estándar IEC 60529, lo que indica una profundidad máxima de 6 metros hasta 30 minutos. 

La serie Galaxy S22 también cuenta con clasificación IP68, pero especifica que solamente puede resistir la inmersión en hasta 1,5 metros de agua. Mientras, Google Pixel 6 también comparte la clasificación, pero no detalla a qué profundidad se han probado sus smartphones. 

La prueba de las marcas para medir la resistencia al agua implica colocar el producto en un tanque de agua dulce y dejarlo reposar durante 30 minutos. Si luego no se detecta agua en su interior, el teléfono obtiene el sello de aprobación IP68.

Aunque muchas personas entienden la diferencia entre la resistencia al agua y la impermeabilidad y lo que significa aproximadamente IP68, la mayor parte no son conscientes de que esta garantía prácticamente solo perdura en los primeros días de uso. Tras un varias de jornadas de uso normal, el aparato queda desprotegido. 

Estos son los consejos de los expertos que debes seguir si se te moja el móvil

Los propios fabricantes indican qué cosas reducen la resistencia al agua. Para Apple, directamente "el uso normal". Para Google,  "desgaste normal, reparación, desmontaje o daño del dispositivo", así como "dejar caer su dispositivo" y "astillas o grietas en el cuerpo o la pantalla de su teléfono". Huawei u OPPO también señalan el "uso normal" y Samsung, "el uso en la playa o la piscina". 

Por ello, ninguno de los grandes fabricantes ofrece ningún tipo de garantía relacionada con daños por agua. Lo que sucede es que el dispositivo se monta lo más apretado posible, reduciendo la cantidad de puntos de entrada por los que podría acceder el agua. Se consiguen conexiones herméticas con pegamento, juntas, silicona o caucho. 

Estos materiales se secan, agrietan, encogen o degradan naturalmente con el paso del tiempo, la exposición al calor, a los químicos del medio ambiente o al estrés mecánico, de modo que solamente puedes tener la seguridad de que este estándar se cumple cuando tu móvil está nuevo. 

Por supuesto, además del uso cotidiano, otros factores obvios deterioran la resistencia al agua: pequeñas grietas en la pantalla, inmersiones, exposición al agua con cloro o al agua salada, el contacto con la arena, los golpes o caídas, sentarte en tu teléfono o la exposición a cosméticos, alimentos o alcohol. 

Utiliza esta app para saber si tu móvil todavía es resistente al agua

Con Water Resistance Tester, del desarrollador Raymond Wang y descubierta por los usuarios de Reddit, puedes medir la resistencia al agua de tu móvil. 

Funciona usando el barómetro incorporado del teléfono para medir si la presión dentro del teléfono cambia cuando aplicas fuerza a la pantalla. Como indican desde ComputerHoy, es compatible con una gran variedad de terminales Android. Puedes descargarla aquí. 

De todos modos, es una app no oficial, por lo que su juicio no sirve para resolver problemas con la garantía o reparación. 

Un momento de apuro o una caída del móvil a la piscina podría no ser para tanto pero, por ahora, lo de bucear con smartphone está bastante lejos. 

Pese a ello, el año pasado Xiaomi afirmaba que el Mi 11 Ultra podía usarse en las profundidades marinas. Y, este verano, Samsung pagó una multa de casi 10 millones de dólares (9,82 millones de euros) en Australia por sugerir en anuncios que sus teléfonos podían usarse en piscinas y agua de mar. Mejor, cuida tu teléfono.