¿Lo que tú ves azul es lo mismo que lo que veo yo? Por qué tu percepción del mundo puede ser diferente de la de los demás

Imagina que tú y yo estamos caminando juntos en un día bañado por el sol, y ambos nos detenemos para contemplar el profundo azul del cielo. Es bonito pero, ¿estamos teniendo la misma experiencia? ¿El azul que ves es el mismo que yo veo?

Anil Seth, profesor de neurociencia en la Universidad de Sussex (Reino Unido) ha escrito un artículo en The Guardian sobre la percepción del mundo en el que plantea estas mismas cuestiones.

Como explica, si bien sería normal responder que sí, — ese color parecer ser una propiedad del cielo y ambos usamos el término "azul" para describirlo— sin embargo, como ya habrás intuido, no está del todo tan claro que tu azul y el mio sean lo mismo.

La ciencia de la percepción, adelanta el autor, sobre "cómo el cerebro interpreta la información sensorial para generar objetos, personas y lugares, sugiere lo contrario". Aunque parezca que el mundo entra tal cual es directamente a través de tus sentidos, la percepción no funciona del todo así. 

¿Este vestido es blanco y dorado o negro y azul?

A pesar de la sensación de estabilidad que experimentas, el mundo está visualmente en constante cambio. Pero tu cerebro tiene mecanismos para evitar que colapses.

La luz que un objeto refleja al ojo es una combinación del color del objeto (constantes) y del espectro de la fuente de luz (que es variable). El cerebro es capaz de desentrañar estas dos cosas y decidir de qué color es el objeto. 

O dicho de otra forma, los objetos parecen del mismo color incluso si cambia la luz que los ilumina, un concepto conocido como constancia de color. De no ser así todo a tu alrededor cambiaría de manera similar a como lo hace la Catedral de Rouen desde la visión de Monet. 

Entonces, ¿cómo mantiene el cerebro los colores constantes? Se cree que toma las señales sensoriales y las combina con experiencias previas que acumula sobre el mundo.

"Desde este punto de vista, el cerebro continuamente hace predicciones sobre las causas de la información sensorial que recibe y usa esa información para actualizar sus predicciones. En otras palabras, vivimos en una 'alucinación controlada' que permanece ligada a la realidad por una danza de predicción y corrección, pero que nunca es idéntica a esa realidad", enfatiza Seth.

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Marie Rogers estudiante de doctorado en el Sussex Color Group, lo evidencia de forma evidente.

"Supongamos que tu taza es blanca, pero la luz que refleja es ligeramente roja. El cerebro puede descartar una cierta cantidad de tinte rojo del resto de la escena que estás viendo. Pueden entrar en juego otros conocimientos contextuales, por ejemplo, estás tomando café junto a la ventana al amanecer. Tiene sentido que la luz esté teñida de rojo ya que la fuente de iluminación es el amanecer". 

Es lo que se conoce como procesamiento de arriba hacia abajo. Todas nuestras experiencias perceptivas están informadas por este tipo de procesamiento, que resulta del contexto y el conocimiento previo. Lo que explicapor qué para unos el vestido era negro y azul mientras que para otros es blanco y dorado.

Cómo ves el mundo y cómo lo ven los demás

Una consecuencia que se desprende de esto es que, al tener cerebros diferentes, que hacen conjeturas ligeramente diferentes, "todos tendremos experiencias perceptivas diferentes también, incluso si nos enfrentamos a la misma realidad externa objetiva", postula Seth.

Para confirmar la posibilidad de que cada persona vea el mundo a su manera el neurocientífico se ha embarcado en Perception Census, un proyecto desarrollado por un equipo que incluye científicos, filósofos y artistas, destinado a mapear el paisaje oculto de la diversidad perceptual.

Consiste en juegos online e ilusiones interactivas que se pueden completar desde el ordenador. Las temáticas engloban desde la percepción visual, a la explorando del sonido, las emociones y cómo se experimenta el paso del tiempo.

Las respuestas ayudarán a arrojar luz sobre las diferentes formas en que cada uno de nosotros nos encontramos con el mundo, cómo esto da forma a nuestras vidas y quiénes somos, resume la web del proyecto. Cualquier persona mayor de 18 años puede participar y los primeros resultados se darán a conocer a finales de año.