Los ricos se vuelven más ricos que nunca en plena la pandemia: las grandes fortunas del mundo alcanzan un máximo histórico de 10.000 billones de dólares

Una de las notas disonantes de esta pandemia de coronavirus que tanta desgracia ha traído consigo es el papel que han jugado las grandes empresas tecnológicas y las mayores fortunas del mundo, que han demostrado estar a prueba de cualquier crisis. Algunos han podido hasta aprovecharlas para volverse todavía más ricos.

En este caso, los grandes multimillonarios han aumentado sus fortunas hasta un máximo histórico de 10.200 billones de dólares (8.700 billones de euros), según apunta el último informe del banco suizo UBS en colaboración con PwC. El estudio, adelantado este miércoles por The Guardian, revela que estos milmillonarios habrían aumentado su riqueza en más de una cuarta parte (27,5%) entre los meses de abril a junio mientras, en la otra cara de la moneda, millones de personas luchaban por salir adelante con una economía quebrada y sus empleos paralizados debido a la pandemia.

El informe concluye que los multimillonarios se habrían beneficiado principalmente de recuperar el valor de los mercados bursátiles cuando se encontraban en su punto más bajo— durante los confinamientos de marzo y abril—. Al relanzarse los mercados, sus fortunas acumuladas no tardaron en superar el máximo anterior (8.900 millones), alcanzado a finales de 2017; tampoco en aumentar el número de milmillonarios en el mundo, de 2.158 entonces a los 2.189 de a día de hoy.

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Josef Stadler, jefe del departamento de UBS que trata directamente con las personas más ricas del mundo, asegura que estos grandes millonarios pudieron beneficiarse de la crisis porque tuvieron "el estómago" (y el dinero suficiente) para comprar más acciones cuando los mercados de valores de todo el mundo se estaban derrumbando. Desde entonces, los mercados bursátiles mundiales han repuntado, compensando gran parte de las pérdidas y alzando a la estratosfera los valores de las grandes tecnológicas (todas propiedad de multimillonarios).

En contra de esta visión positiva Luke Hilyard, director ejecutivo del High Pay Centre, asegura a preguntas de The Guardian que "la concentración extrema de riqueza es un fenómeno feo desde el punto de vista moral, pero también es económica y socialmente destructivo".

"La riqueza multimillonaria equivale a una fortuna casi imposible de gastar en múltiples vidas de lujo absoluto", precisa. "Cualquiera que acumule riquezas a esta escala podría fácilmente permitirse aumentar el salario de los empleados que generan su riqueza, o contribuir mucho más en impuestos para apoyar los servicios públicos vitales, al tiempo que sigue siendo muy bien recompensado por cualquier éxito que haya logrado. Que se estén volviendo más ricos es una señal de que el capitalismo no está funcionando como debería".

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Stadler, por su parte, cree que esta acumulación podría señalarles por parte de la sociedad y la política debido a la brecha cada día más evidente con las élites. "Estamos en un punto de inflexión. La concentración de riqueza es tan alta como en 1905, y esto es algo que preocupa a los multimillonarios", asegura. 

Aunque el informe de la UBS no clasifica las fortunas de los grandes ricos, es bien sabido que el mayor millonario del planeta es Jeff Bezos, fundador y CEO de Amazon, con 189.000 millones de dólares entre líquido y capital bursátil. En lo que va de año, casi se ha duplicado. Por su parte, una de las pocas mujeres es la empresaria Kylie Jenner.

Otro gran privilegiado de la pandemia es el fundador de Tesla, Elon Musk, que ha aumentado su fortuna de 76.000 millones de dólares hasta los 103.000 millones que atesora en la actualidad.