Samsung Galaxy Watch 6 Classic es un reloj de gama alta que me encanta por su bisel giratorio y sus sensores pero tiene algo que no me convence

No es un mal momento para ser fabricante de relojes inteligentes, ya que pese al momento terrorífico que viven productos como los móviles o los ordenadores, son de los pocos que crecen en ventas.

Las ventas de smartwatch se incrementaron un 11% en el segundo trimestre de 2023, un periodo en el que el mercado volvió al crecimiento después de 2 trimestres consecutivos de descensos, como reflejan los datos del analista Counterpoint Research.

Apple se mantiene como la líder de este mercado, con el 22% del total de cuota copada por sus Apple Watch, seguida de Huawei y de Noise, ambos con un 10%. Samsung era segunda el año pasado, pero los buenos resultados de Huawei (China) y Noise (India) le han hecho salir del top 3 mundial.

Es un buen momento para el smartwatch: el mercado vuelve al crecimiento y solo un país es el responsable

Con el objetivo de volver al top 3 en el segundo semestre del año, Samsung se ha puesto las pilas y ha lanzado en el mercado español su nuevo buque insignia dentro de la categoría de relojes: el Galaxy Watch 6, que presentó junto a sus plegables Galaxy Z Fold 5 y Flip 5.

El Galaxy Watch 6 es un reloj para las masas, pero su gama alta se encuadra bien en un contexto general del mercado en el que los fabricantes cada vez apuestan más por relojes más avanzados, sobre todo a base de funciones para deportes extremos.

He podido probar el dispositivo durante las últimas 2 semanas en su variante más cara, Galaxy Watch 6 Classic (448,99 euros) y te cuento mi experiencia con el reloj de gama más alta de Samsung en 2023.

Su diseño es elegante, premium y cómodo para su gran tamaño pero puede no ser para todas las muñecas.

Samsung Galaxy Watch 6 Classic tiene uno de los diseños más avanzados y elegantes que puedes encontrar en el panorama actual de smartwatches en España, algo que se nota incluso en la versión en color negro que he probado para este artículo.

Aunque el Galaxy Watch 6 estándar tiene colores que pueden resultar más llamativos y un diseño moderno, en esta variante Classic lo premium prevalece por encima del resto, dentro de un aspecto general muy similar al de un reloj tradicional que se puede llevar con cualquier look, por arreglado que sea.

Su gran esfera redonda es sin duda la protagonista, pero el bisel con los minutos marcados en su interior, su sólido material metálico y sus dos botones en el lado derecho (puedes llevarlo del otro lado también), uno negro y otro con detalles rojos, hacen ver que estamos ante un producto con personalidad, diseñado con mimo y apuntando a competir con los mejores.

Eso sí, no es un reloj precisamente compacto. Su grosor es de 10,9 milímetros, mientras que sus 47 milímetros de ancho hacen que no sea apto para todas las muñecas.

A mí personalmente me ha resultado sorprendentemente cómodo, sobre todo gracias a su peso de 59 gramos, aunque al principio tenía mis dudas porque lo sentía algo grande de más cuando lo llevaba puesto por encima del hueso (la posición recomendada) y acabé llevándolo casi todo el tiempo por debajo del hueso, aunque no sea lo ideal. 

Si estás pensando comprarlo, quizá deberías probarlo antes en persona para evitar sorpresas, porque también puedes elegir su variante de 43 mm, aunque tampoco es que sea precisamente pequeña.

Su correa no decepciona gracias a su aspecto de cuero, pero es resistente y muy fácil de acoplar.

Aunque Samsung te permite comprar aparte otras correas si quieres personalizar más tu apariencia, Galaxy Watch 6 Classic se vende acompañado por una correa negra que encaja a la perfección con su estética clásica pero al mismo tiempo elegante.

No estamos ante una correa simple de silicona como la de relojes de gamas más asequibles, sino que el aspecto que da es el de una pulsera de cuero y de hecho tiene un cierto relieve que la hace mucho más agradable al tacto. Puedes encontrar incluso el trampantojo de las costuras de hilo que simulan el cuero.

Pero en realidad, Galaxy Watch 6 Classic es un reloj ultraresistente y su pulsera incluida no se queda atrás, ya que en realidad es de un material de silicona sumamente cómodo, que transpira bastante bien en verano y que responde bien al sudor y al agua.

Es de agradecer que el sistema de cierre sea de hebilla, al igual que los cinturones o los relojes de toda la vida, porque en mi opinión no solo es lo más bonito sino también lo más eficaz y fácil de ajustar, en comparación con los sistemas de cierre en que la correa se mete por dentro y puede que te apriete más.

Como punto negativo, su diseño en negro deja ver con bastante facilidad el polvo y la suciedad, que se acumulan en la hebilla y en los bordes de la esfera y la pulsera y que tendrás que limpiar con relativa frecuencia.

La pantalla es una delicia por tamaño y calidad, y además puedes personalizarla con esferas muy diferentes que van de lo deportivo a lo clásico.

La gran protagonista del Samsung Galaxy Watch6 Classic es en realidad su enorme pantalla de 47 milímetros de grosor, lo que se traduce en 1,5 pulgadas de superficie para su panel AMOLED de 480x480 píxeles.

Aunque las diferencia de superficie entre las pantallas de los relojes parecen muy pequeñas, puedo decirte que se nota que es una de las pantallas más grandes y con mayor calidad que he usado hasta ahora en un smartwatch.

Gracias a su panel AMOLED, puedes usar funciones que me parecen esenciales en un reloj inteligente como es la pantalla siempre encendida. Además su cristal de zafiro le da una capa más de resistencia y solidez para que no se sienta nada endeble.

El bisel giratorio es su joya secreta: te permite acceder te forma rápida y diferente a sus funciones principales.

Pero sin duda lo que primero me viene a la cabeza si pienso en lo más positivo de este Galaxy Watch 6 Classic es su discreto pero adictivo bisel rotatorio.

Las pequeñas hendiduras que dan relieve a su exterior nos dan pistas de que su bisel o marco no es fijo sino que se puede mover, y te aseguro que va a ser tu forma preferida de interactuar tu reloj por lo sencilla, intuitiva y a la vez única y diferente que resulta.

Al girar el bisel vas pasando entre las distintas ventanas, que puedes configurar para adaptarlas mejor a tu uso habitual. La principal es la del reloj, pero luego tienes otra para la actividad física, otra para seleccionar entrenamiento, otra para el sueño, para la medición de la tensión arterial y el electrocardiograma (ECG), para saber la batería que te queda en el reloj y el móvil... La transición es rápida así que puedes elegir muchas sin que llegue a ser engorroso.

Me ha encantado lo mucho que simplifica ver información en un solo vistazo si por ejemplo tienes las manos empapadas de sudor y tocar la pantalla no es una opción fiable. Y el sonido mecánico y la solidez que tiene me parece que evidencian una buena ingeniería por parte de Samsung que se funde con la artesanía.

Es uno de los relojes más completos en cuanto a mediciones biométricas y tiene IP68 para nadar sin preocupaciones.

Galaxy Watch 6 Classic es el reloj de gama más alta de Samsung en 2023 y lo demuestra a nivel de mediciones biométricas muy completas e intuititivas.

Sí, tienes todo lo básico de cualquier reloj como la frecuencia cardiaca, la distancia recorrida, la saturación de oxígeno en sangre y el seguimiento del sueño, y como no podía ser de otra manera en mi experiencia ha funcionado todo a la perfección y de forma realmente intuitiva.

Pero además se añade una capa adicional de mediciones biométricas que solo puedes encontrar en los relojes de las gamas más altas: puedes medir tu tensión arterial, hacerte electrocardiogramas o medir tu masa muscular y grasa corporal.

Si eres de los aficionados a la natación, además tienes uno de los diseños más resistentes dentro de los relojes generalistas, con IP68 para soportar agua y polvo con la mayor fiabilidad, por lo que puede competir con la oleada de relojes de deportes extremos actuales como el Apple Watch Ultra, el Huawei Watch Ultimate o los Garmin Fenix.

Y esto va acompañado por una potencia interna bastante alta también para tratarse de un reloj inteligente, ya que su chip Exynos W930 y sus 2GB de RAM garantizan un rendimiento muy fluido en el que navegar y realizar mediciones es realmente rápido.

La batería te alcanza para acabar el día y a veces hasta para 2, pero está lejos de ser su mayor virtud por su carga.

La batería es uno de los aspectos críticos de cualquier reloj inteligente. Nadie quiere que su reloj se apague en mitad del día o en plena sesión de entrenamiento cuando hace más falta. Galaxy Watch 6 Classic no falla pero tampoco destaca en cuanto a batería.

En mi experiencia lo he usado con pantalla siempre encendida y su autonomía es de mínimo un día, aunque en algunos casos he podido llegar a los 2 días, eso sí, in extremis. Si entrenas en días consecutivos o muy a menudo, puede que acabes cargándolo todos los días solo por si acaso, algo que tampoco es raro en la gama alta actual.

Sus 425 mAh de capacidad de batería vienen acompañados por tecnología de carga rápida, aunque me parece que este es el aspecto en el que Samsung tiene más margen de mejora. Si lo tienes al 0%, el Galaxy Watch 6 Classic tarda unas 2 horas en cargarse al completo, lo que me ha parecido algo lento.

Samsung incluye el cable de carga solamente en la caja, pero si lo quieres cargar a la corriente deberás asegurarte de tener un adaptador con puerto USB tipo C y tecnología Power Delivery para que el tiempo de carga no sea aún más alto.

El software me parece el gran punto a mejorar: podría ser más fluido, depender menos del móvil y favorece demasiado a los smartphones de Samsung.

El Samsung Galaxy Watch 6 es un reloj que puedes utilizar tengas la marca de móvil que tengas gracias a la app Galaxy Wear, con un rendimiento más que probado en varias generaciones de wearables, por lo que no tendrás dificultades para lo básico.

Sin embargo, en este aspecto en el que creo que Samsung ha fallado más con su último reloj, ya que es mucho más fácil de controlar si utilizas un móvil Samsung en muchos casos.

En primer lugar, porque la conexión se hace de forma automática simplemente con encender el reloj si tienes un móvil de Samsung cerca, algo cada vez más común entre los fabricantes y que por tanto no es demasiado grave, pero que no ocurre siempre si el smartphone es iOS o de otra marca Android, como me ha sucedido con un terminal de realme.

Segundo, y lo que más me ha molestado, es que para algunas funciones como el electrocardiagrama es necesario descargar una app adicional llamada Health Monitor, ya que no se incluye de serie en Galaxy Wear. Este proceso adicional no solo es pesado para el usuario, sino que puede ser complicado si no tienes un móvil de Samsung.

En mi experiencia, al intentar hacer un ECG desde el reloj, este me remite al teléfono, desde donde hay que descargar Health Monitor. El problema es que solo te permite hacerlo desde el navegador nativo de Samsung y Chrome, pero en este segundo caso aunque el enlace se abre, no llegó a funcionar porque no muestra el botón descargar.

Por ello, si tienes un móvil no Samsung, tendrás que perder el tiempo y descargarte un navegador nuevo –que probablemente no quieras–, además de la app Health Monitor, solo para hacerte un electrocardiograma desde el reloj. En general me ha parecido un proceso tortuoso en el que creo que Samsung peca de un desarrollo de software algo caótico y poco unificado, dada la elevada necesidad de apps que requieren dispositivos como este Galaxy Watch 6.

Y si a esto le sumas que todas las mediciones no se muestran en Galaxy Wear, sino que tienes que descargarte otra aplicación más: Samsung Health, se produce lo que para mí ha sido una fatiga de aplicaciones que penaliza la experiencia de usuario. Aunque conste que todas son apps bien diseñadas y fáciles de usar.

Samsung Galaxy Watch 6 Classic es un buque insignia elegante y sobrado de funciones de salud avanzadas que destaca, pero por un precio premium.

Samsung ha conseguido que su reloj más completo del año sea una gozada al llevarlo puesto gracias a un diseño sobrio y elegante muy parecido a los relojes tradicionales pero con materiales y funciones modernas, y además un bisel giratorio maravilloso.

A nivel de funciones biométricas estamos sin duda ante lo más potente de Samsung y uno de los relojes más completos de la industria, capaz de medir la grasa corporal y también hacerte electrocardiogramas.

Sus únicas pegas se encuentran en la batería, que pienso que podría cargar mucho más rápido, y sobre todo un software en el que se requiere que te descargues demasiadas apps y que no proporciona la experiencia unificada y sencilla que esperaba.

Tampoco es un reloj barato, ya que la versión Classic de 47 milímetros, la que he probado, parte de los 448,99 euros. Un precio de acorde con la tendencia a que los productos premium cada vez sean más caros, pero que a la vez me parece consecuente con la gran calidad del reloj en prácticamente todos los aspectos. Porque al final, lo premium se paga premium.