El Samsung Galaxy Z Flip 3 es el primer flexible democrático: el móvil más 'cool' de los próximos meses sorprende y engancha, pero tiene 2 características que no me terminan de convencer

He de reconocerlo: me encanta el concepto de Galaxy Z Flip desde que Samsung lanzó su primera versión. 

Este dispositivo —pensado, en parte, para evocar cierta nostalgia a todos los millennials debido a su formato concha— no solo llama la atención, también ofrece la posibilidad abre la puerta a la democratización de los plegables. 

Y es que, además de por sus características, este smartphone llama la atención por su precio: cuesta un 30% menos que la anterior generación, pasando de los inalcanzables 1.500 euros a los 1.059 euros. Sí, es una cifra que sigue siendo alta, pero se sitúa a la par que los Galaxy S21 (1.099 euros), los iPhone 12 (1.159 euros) o el Xiaomi Mi 11 ultra (1.199 euros).

Eso sí, aunque tiene muchas ventajas —la flexibilidad o el rendimiento, como es evidente—, también perderás en otras si los comparas con estos dispositivos que acabo de nombrar —autonomía o cámara, por ejemplo—.

El Samsung Galaxy Z Fold 3 5G ahora es compatible con S-Pen: un gran acierto para su enorme pantalla con cámara bajo el panel, aunque sigue al alcance de pocos

En este sentido, dentro de las 2 opciones que ofrece la compañía en su catálogo de plegables (no hay que olvidar el Galaxy Fold 3), esta es la que, a priori, encajaría más para la mayoría de usuarios.

Si quieres saber por qué, sigue leyendo este análisis del Samsung Galaxy Z Flip 3:

El Samsung Galaxy Z Flip 3 es de esos móviles que llaman la atención. Llevo más de 2 semanas probándolo y, cada vez que lo sacaba (y lo doblaba), alguien soltaba un 'wow' o me pedía verlo de cerca.

Definitivamente, ese efecto wow que tenían las anteriores generaciones no ha desaparecido.

Aquí puedes verlo en acción.

Su caja no viene con cargador, al igual que otros móviles de Samsung, pero sí incluye un cable con USB Tipo c a Tipo-C y un pincho para sacar la tarjeta.

Y, por lo que parece, no volveremos a ver cargadores en la caja, así que deberías ir acostumbrándote.

Su diseño ha cambiado ligeramente: ahora cuenta con una parte de un color distinto en la zona de las cámaras.

He estado analizando el color crema —después del violeta, es el que más me gusta—, pero puedes optar por otros 5 colores adicionales (negro, verde, rosa, gris y blanco).

El Galaxy Z Flip 3 es mucho más resistente: Samsung se ha puesto las pilas en esta materia y ahora es más difícil que sufra desperfectos.

Las mejoras en el apartado de protección y resistencia son las siguientes:

• El Samsung Galaxy Z Flip tiene un certificado de resistencia IPX8, por lo que podrás sumergirlo a 1,5 metros durante 30 minutos y seguirá funcionando, según Samsung.
• Además, los bordes están fabricados con Armor Aluminium, un material que es un 10% más resistente que el aluminio normal. De esta forma, si se da un golpe en uno de los laterales, será más difícil que sufra desperfectos.
• Su carcasa está protegida con Corning Gorilla Glass Victus, la mejor protección de la firma hasta la fecha.
• Finalmente, su protector de pantalla, es un 80% más resistente que en la generación anterior, algo realmente necesario contra los arañazos.

Estas mejoras harán que todos aquellos que tengan manos de mantequilla estén más tranquilos llevando un móvil de más de 1.000 euros en su bolsillo.

¿Y la bisagra? Lo cierto es que Samsung no ha dicho cuántas aperturas puede soportar, pero sí ha asegurado que será duradera. De hecho, basta con utilizarlo un par de semanas para darte cuenta de que resulta resistente.

Sus dimensiones se han reducido, pero no tanto al doblarse.

Una de las grandes mejoras que ha hecho la compañía con respecto a la generación anterior ha sido la reducción de sus dimensiones. A pesar de ello, sigue siendo ancho cuando se encuentra doblado, y tampoco resulta especialmente ligero.

Concretamente, su grosor ha pasado de 6,9 mm a 6,4 mm, y su peso se ha reducido 11 gramos, quedando en 128g.

Es bastante ergonómico, ya que es un móvil más estrecho de lo habitual. He de decir que me ha resultado sencillo llegar a todas las partes de la pantalla con una sola mano (algo que no puedo decir de todos los terminales que he probado en el último año).

Además, guardarlo en cualquier parte es de sus mejores cualidades: cabe en cualquier bolsillo, bolso, chaqueta o compartimento. No tendrá que "pelear" por un hueco gracias a su flexibilidad.

Su estrecha pantalla pasa de tener una tasa de refresco de 60Hz a 120 Hz, algo que agradecerás.

Personalmente —y tal y como he comentado antes— que su pantalla sea estrecha me parece de lo más útil, ya que puedo llegar a todas partes con una sola mano. 

En cuanto a sus características, se trata de una Dynamic AMOLED 2X Infinity Flex Display de 6,7 pulgadas Full HD+ (2.640 x 1.080 píxeles). En general, los contenidos se aprecian de forma correcta, pero no llega a la calidad de las "no flexibles". 

En cuanto a la tasa de refresco, la multinacional ha decidido que pase de 60Hz a 120Hz. Esto hace que la experiencia de fluidez aumente por completo, porque en vez de 60 imágenes por segundo, el panel es capaz de mostrar 120 y hace que la navegación sea mucho más rápida y fluida.

No notarás la hendidura si ves el contenido de forma frontal... 

... pero sí se aprecia si lo haces de forma lateral.

Una pantalla exterior mucho más útil y grande: sus nuevas funcionalidades han hecho que abra pocas veces el móvil, y sus dimensiones son perfectas.

La pantalla exterior del Samsung Galaxy Z Flip 3 se ha renovado. Ahora no solo permite verte reflejado cuando te estás haciendo una fotografía, sino que también te permite consultar el tiempo, activar la grabadora, ver las notificaciones, el calendario o los recordatorios (Keep). Incluso, podrás hacer pagos con Samsung Pay.

Me ha parecido de lo más útil ya que, en muchas ocasiones, he preferido desbloquear o no el terminal en función de lo que saliera en la pantalla. 

Además, puedes personalizar este panel con varios motivos —como una serie de animales en movimiento, entre otras cosas— o cambiar el color de la hora (amarillo, azul, verde...). Asimismo, si tienes uno de los nuevos Samsung Galaxy Watch4, podrás personalizar la esfera con las mismas animaciones.

En cuanto a su tamaño, ahora aumenta sus dimensiones hasta casi las 2 pulgadas.

Potencia asegurada: es un móvil que te permitirá realizar todo tipo de tareas exigentes.

Tal y como se preveía, su procesador ha estado a la altura. El Samsung Galaxy Z Flip 3 monta un Qualcomm Snapdragon 888 con 8 GB de RAM. A este le acompañan 128 o 256 GB de RAM, por lo que, elijas la opción que elijas, no tendrás problemas ni con el rendimiento ni con el almacenamiento.

Yo he realizado varias pruebas con juegos como el Asphalt 9 y no he tenido problemas de cierres o lags.

Todo lo que le puedes pedir a un móvil en 2021 en el apartado de conectividad, audio y seguridad.

Viene con 5G, bluetooth 5.0 y NFC.

En cuanto al audio, tiene 2 altavoces Dolby Atmos, lo que siempre ha sido una garantía de calidad, y no ha decepcionado.

En cuanto a la seguridad, el dispositivo cuenta con huella dactilar y reconocimiento facial. Ambas funcionalidades me ha resultado rápidas y no he tenido ningún problema.

Apps que se adaptan a su flexibilidad: clave en el salto a los flexibles gracias a One UI.

Si bien es cierto que al Samsung Galaxy Z Flip 3 le queda mucho camino por recorrer en el campo de la adaptación de las apps a la flexibilidad que proporciona, hay muchas aplicaciones que se pueden usar en modo multitarea si activas la función de Labs —desde Netflix, a la calculadora, pasando por Instagram—. 

Sin embargo, estas no te permiten tener la parte de abajo gestionándolas, como sí ocurre en otras que están adaptadas, como por ejemplo Google Duo, YouTube o su propia cámara.

En este sentido, realizar fotos, videollamadas o ver vídeos se convierte en algo tremendamente cómodo, ya que puedes dejarlo en una mesa sin tener que apoyarlo de cualquier forma mientras haces malabarismos para que no se caiga.

Su talón de Aquiles es la autonomía: sus 3.300 mAh harán que llegues muy justo al final del día.

El Samsung Galaxy Z Flip 3 cuenta con 3.300 mAh de batería, con los que podrás llegar al final del día, pero muy justo. Imagino que la multinacional ha preferido darle prioridad a otros apartados y, por eso, en esta ocasión, han decidido que la autonomía no sea su punto fuerte. También tiene carga rápida de 15W, pero al no llevar cargador en la caja, tendrás que comprarlo si quieres hacer uso de ello.

Su cámara es la misma que en si antecesor: ofrecerá versatilidad, pero esperaba una mejor configuración. Eso sí: no sobresale nada de su trasera, por lo que el diseño e integración es mejor.

Samsung ha hecho un gran trabajo a la hora de incluir su cámara en el Z Flip 3, ya que no sobresale nada de la parte trasera.

Su configuración es la siguiente:

• Una lente gran angular de 12 megapíxeles con f/2.2, para paisajes.
• Una lente de 12 megapíxeles f/1.8 con tecnología dual pixel y OIS (estabilizador óptico de imagen), para captar la máxima luz posible.
• Una cámara frontal de 10 megapíxeles f/2.4, para selfies.

¿Te suena? Es la misma que en la generación anterior. Al igual que en la anterior ocasión, en general, los resultados que he obtenido eran buenos, pero no espectaculares. Lo cierto es que para un móvil de más de 1.000 euros esperaba unas mejores instantáneas.

Las fotos con la cámara principal son buenas, pero satura ligeramente los colores. Puedes verlo en esta foto, en los tonos verdes.

El zoom es aceptable hasta que llega a los 10X (digital), donde ya pierde demasiada calidad.

El gran angular, sin embargo, se comporta bastante bien: no deforma apenas la imagen.

En cuanto a las instantáneas de detalles, he de decir que te sorprenderán. Mira este plato de comida: casi puedes saborear este diminuto sushi. ¡Delicioso!

El modo retrato es bueno. Puedes apreciar que recorta bien (que no perfecto) zonas más complicadas como el pelo, siempre que se encuentre en condiciones favorables con mucha luz.

Las fotos nocturnas las resuelve con soltura, otorgando más luz y claridad a la imagen. Puedes apreciarlo en esta toma del edificio.

¿Y las selfes? Recorte preciso con desenfoque natural.

Este es un ejemplo sacado con la cámara principal mientras la foto se reflejaba en la pequeña pantalla que tiene en su exterior. Las imágenes se guardan en un formato más cuadrado, pero la calidad es buena.

A continuación, te dejo una galería de fotos para que compruebes por ti mismo de qué es capaz el Samsung Galaxy Z Flip 3.

El flexible más democrático y cool que podrás comprar.

El Samsung Galaxy Z Flip 3 es el primer flexible democrático que sale a la venta. Si bien sus 1.059 euros no son accesibles para todo el mundo, sí es el primero que baja de los astronómicos 1.500 euros. —y que lo hacen mucho más inalcanzable—. De hecho, como he comentado al principio del post, es comparable (e incluso más económico) que el desembolso que tendrás que hacer con otros dispositivos de gama alta, como los Galaxy S21 (1.099 euros), los iPhone 12 (1.159 euros) o el Xiaomi Mi ultra (1.199 euros).

Uno de los puntos fuertes de este dispositivo es claramente su flexibilidad. Es extremadamente cómodo usarlo y llevarlo a cualquier parte: podrás hacer videollamadas, ver un vídeo o usar su cámara sin necesidad de hacer malabarismos a la hora de colocarlo encima de una mesa o guardarlo en el bolso o pantalón. En este sentido, también es notable el esfuerzo que han hecho en materia de diseño, donde se agradece el punto extra de resistencia.

Sin embargo, no todos son luces. Sus puntos flacos son la batería y la cámara, ya que no termina de estar entre los mejores del mercado.

En cualquier caso, el Samsung Galaxy Z Flip 3 me ha encantado y estoy segura de que será el capricho de muchos durante los próximos meses.