He estado en casi 40 países a pesar de mi miedo a viajar en avión: mis 7 mejores consejos para viajeros con fobia a volar

Para los que tienen miedo a volar, subir a un avión puede provocar ansiedad.

Como persona que ha visitado casi 40 países y se ha bajado de un avión por miedo a volar, he desarrollado varias técnicas para controlar mi ansiedad.

He aquí siete consejos para que el viaje en avión sea más llevadero y, tal vez, incluso más agradable.

Para los pasajeros propensos a la ansiedad, tomar café el día del vuelo probablemente empeorará las cosas.

Evite la cafeína antes de volar

Según Health.com, los estimulantes que se encuentran en el café pueden hacer que el cuerpo imite los síntomas de la ansiedad. En el caso de los pasajeros ya nerviosos, es mejor dejar el café para después de aterrizar.

Personalmente, me gusta considerarlo como un regalo para cuando aterrizo. Además, me ayuda a conciliar el sueño más fácilmente, lo que hace que el vuelo pase más rápido.

Distraerse con música o un buen programa de televisión

Me gusta realizar actividades que desvíen la atención de mis pensamientos ansiosos durante los vuelos. Suelo guardar para el avión los programas o series nuevas que me apetece ver.

También tengo un álbum que siempre escucho cuando hay turbulencias durante el vuelo: mi favorito actual es Live in Buenos Aires, de Coldplay.

Una buena distracción puede ayudar a ocupar tu mente y, muy pronto, superarás el momento de miedo.

Invierte en tu propia comodidad

Para priorizar la comodidad durante el vuelo, considera la posibilidad de cambiar a un asiento de primera clase. Si un billete de primera clase no está dentro de tu presupuesto, elige un asiento más cerca de las alas del avión, donde las turbulencias suelen ser menos perceptibles.

Me encanta sentarme en la parte trasera de un vuelo de larga distancia: por qué elegiría esa fila siempre

Personalmente, me encanta elegir un asiento de ventanilla para poder echar un vistazo a lo que ocurre durante el vuelo.

Infórmate sobre los aspectos básicos del transporte aéreo

Hay muchas maneras de desmitificar la experiencia de viajar en avión, desde leer libros hasta consultar las redes sociales. A veces, comprender los sonidos y movimientos habituales que se experimentan en un avión puede ayudar a aliviar parte de la ansiedad que lo rodea.

Para conectar con otras personas que tienen miedo a volar, recomiendo participar en comunidades en redes sociales, como el "Fear of Flying Forum" en Facebook. Este grupo proporciona un valioso apoyo y conocimientos sobre el vuelo.

Incluso hay pilotos experimentados en el grupo que ayudan a entender qué son las turbulencias, qué significan los distintos ruidos y las distintas condiciones en las que pueden volar los aviones.

Si te pones nervioso en pleno vuelo, los auxiliares de vuelo pueden explicarte lo que ocurre habitualmente durante el vuelo, como las turbulencias. Incluso me han socorrido muchas veces con toallas frías para ayudarme a calmarme.

Recuerda que los escenarios hipotéticos no se corresponden con la realidad

Es importante reconocer que la preocupación excesiva por situaciones hipotéticas no se corresponde con la realidad. Me recuerdo a mí misma que preocuparse es sufrir dos veces, y que la ansiedad se centra en el peor de los escenarios.

Sé que es mucho más fácil decirlo que hacerlo, pero cuanto más repitas estas cosas en tu mente, más las empezará a ver tu cerebro como la verdad.

Recuerda por qué vuelas

Reflexionar sobre las oportunidades y experiencias que ofrece el transporte aéreo puede ayudarte a olvidarte de las preocupaciones. Me gusta tener algo que esperar al aterrizar, ya sea una experiencia divertida en mi destino o ver a mis seres queridos en casa.

Disfrutar de la emoción de explorar y centrarse en los aspectos positivos del vuelo puede ayudar a cambiar la perspectiva y aliviar el miedo.

He descubierto que poner en práctica estas estrategias me ha ayudado a aliviar parte de mi ansiedad a la hora de volar

Poniendo en práctica estas estrategias, he podido aumentar gradualmente la confianza y reducir la ansiedad asociada a los viajes en avión.

Por supuesto, sigue habiendo dificultades, pero creo que los aspectos positivos superan a los negativos cuando se trata de viajar. Aunque superar este miedo puede requerir persistencia y paciencia, merece la pena para poder ver el mundo.