El truco para hacer castañas asadas en casa en 3 minutos, sin horno, sin sartén y sin que se dispare la factura de la luz

Cada año, con la llegada del otoño, empiezan a aparecer los clásicos puestos que venden castañas asadas en la calle. Primero llega el atractivo olor desde un lugar indefinido, luego surgen a la vista y ya de cerca se siente el calor que emana.

Con esos elementos sumados a su característico sabor y textura, son varias las personas que, sintiendo el antojo crecer dentro de ellas, se acercan y piden un cucurucho.

Sin embargo, hay muchos otros motivos por los que comer castañas en otoño, ya que se trata de un alimento que presenta numerosos beneficios para la salud. En primer lugar, las castañas tienen menos calorías y grasa que otros frutos secos, así como más agua y nutrientes reguladores como folatos y potasio.

Además, aportan un alto valor nutricional, ya que son una buena fuente de aminoácidos, ácidos grasos monoinsaturados, antioxidantes, fenoles y vitamina C, además de contener cobre, fibra y carbohidratos complejos.

Todo eso supone beneficios tan variados como la absorción y almacenamiento de hierro, reducir la posibilidad de padecer accidentes cardiovasculares y enfermedades del corazón, facilitar las digestiones, ayudar a equilibrar el azúcar en sangre y proporcionar una fuente de energía extra, por lo que son especialmente adecuadas para deportistas.

Finalmente, comer castañas también ayuda a dormir mejor por su contenido en melatonina, la hormona responsable de regular los ciclos circadianos del sueño.

En cuanto a cómo se deben comer las castañas, hay muchas opciones y ninguna mala, pero una mejor que el resto: si bien se pueden consumir crudas, cocidas o asadas, las castañas asadas son más beneficiosas, pues de esta forma multiplican su fibra y contienen más aminoácidos.

Cómo hacer castañas asadas en casa fácil y rápidamente: el truco del microondas

Las castañas se pueden encontrar en los puestos callejeros ya mencionados, pero también en supermercados como Mercadona, que ha lanzado hace poco, entre sus nuevos "sabores de otoño", un paquete de 100 g de castañas tostadas y peladas de Hacendado, con un precio de 1,35 euros.

Sin embargo, también se pueden preparar castañas asadas en casa, y de distintas formas: en la sartén, en el horno y en el microondas. 

El primer método supone el obstáculo de que se necesita una sartén de hierro, que algunos fuegos no las calientan del todo bien y que implica un proceso lento y de atención constante, mientras que el uso del horno significa no solo tiempo, sino también un importante consumo energético.

Frente a estos, hacer castañas asadas en el microondas reduce tanto el tiempo como el gasto en la factura de la luz, que ha acumulado varios récords en los últimos meses.

Así puedes asar castañas en el microondas de tu casa en solo 3 minutos o menos, según informa Hobby Consolas:

• Elimina las castañas que tengan un agujero, ya que probablemente tendrán un gusano.
• Realiza un corte en todas las castañas, de forma que atraviese la piel gruesa y la fina y llegue hasta la carne, para que luego no exploten cuando las calientes.
• Pon en torno a una decena de castañas en un plato, cuenco o recipiente apto para microondas. El medio recomienda no meter más de 10 o 12 unidades en cada tanda, para evitar que se genere demasiado vapor. Un buen truco es poner una tapa de plástico sobre el plato de castañas, con el objetivo de que este se condense, señala.
• Ajusta la potencia y el tiempo. Puedes hacer castañas asadas en el microondas en unos 3 minutos a una potencia de 600 W; serán 2 minutos y medio aproximadamente con una potencia de 800 W, y apenas 2 minutos si tu electrodoméstico se puede ajustar a 1.000 W.

Por supuesto, los tiempos son orientativos, dependerán de las castañas que introduzcas y sabrás ajustarlos mejor después de cada intento, hasta que consigas dominar el truco de asar castañas en tu casa con el microondas, de forma fácil y rápida.