Bankia asegura que optó por una fusión con CaixaBank para acortar tiempos y reconoce que la salida a bolsa en 2011 "no fue una buena idea"

La salida a bolsa de Bankia en 2011, que la Audiencia Nacional sentenció a finales de septiembre que no había sido constitutiva de delito, "no fue una buena idea", según ha reconocido este miércoles el consejero delegado de la entidad, José Sevilla, en la rueda de prensa de presentación de resultados de los 9 primeros meses del año.

Sevilla ha señalado la sentencia permite a Bankia pasar página, asegurando que "estamos contentos con la sentencia, dado que es lo que defendimos desde el principio, que era una operación regulada y siguiendo los cánones regulatorios", aunque ha precisado que "hubiese sido mejor que no se hubiese hecho, pero no un delito, que era lo que se juzgaba".

Respecto a la fusión con CaixaBank, José Sevilla ha destacado que se ha convocado a los consejos para aprobarla a principios de diciembre y que falta por recibir las aprobaciones regulatorias, por lo que ha augurado que la operación "se cerrará en el primer trimestre de 2021", mientras que prevé que la integración tecnológica entre ambas entidades concluya a finales de 2021.

El consejero delegado de Bankia, que ha aclarado que su posición en la entidad fusionada todavía no ha sido definida, ha señalado además que se decantaron por CaixaBank en lugar de otras entidades porque "teníamos una propuesta sobre la mesa, con Sabadell no ha existido nunca", destacando que la fusión con CaixaBank tiene "sentido y valor" para ambas entidades.

En cuanto al formato de la operación, Sevilla ha señalado que se optó por una fusión en lugar de otras posibilidades porque "nos parecía que una OPA era más compleja, dilataba la operación en el tiempo y no era la estructura jurídica que queríamos". 

Ante la posibilidad de recuperar los 24.000 millones de euros inyectados por el Estado, José Sevilla ha asegurado que van "a trabajar todo lo intensamente posible para mejorar el valor de la participación de Bankia", aunque precisando que dependerá tanto de su gestión como del entorno económico y la situación de tipos de interés.

Además, respecto al futuro de su personal tras la fusión, el consejero delegado de Bankia ha destacado que en cuanto se formalice la fusión iniciarán "el diálogo con los sindicatos para dar respuesta a los requerimientos de la fusión", señalando que lo importante es el acuerdo con los sindicatos para acordar las salidas de la entidad.

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En cuanto a sus resultados del tercer trimestre, Sevilla ha señalado que están satisfechos dado que "se consolida la recuperación del negocio de particulares, crece el crédito a empresas, se reducen activos improductivos, el margen de intereses y de comisiones suben y se cumple el objetivo de generación de capital".

José Sevilla ha destacado la evolución favorable del consumo, destacando que el gasto con tarjeta mantiene una tendencia positiva, por encima de la del mercado, mientras el crédito al consumo ha crecido más de un 56% respecto al segundo trimestre, aunque ha reiterado que "se mantiene por debajo de los niveles previos a la pandemia".

El directivo ha señalado que mantiene una postura de "optimismo relativo", asegurando que es "una mejora desde niveles muy bajos", pero ha pedido mantener la cautela dado que "la situación de la pandemia se ha complicado y es previsible que noviembre y diciembre sean peores de lo previsto", pero la inercia es buena aunque el trimestre puede aflojar. 

Respecto a los créditos avalados por el ICO para las empresas afectadas por el coronavirus, José Sevilla ha asegurado que "la reacción del Gobierno y los bancos para evitar la crisis de liquidez en las empresas ha sido fenomenal y el ICO ha hecho un trabajo estupendo", destacando que la primera fase está culminando.

A partir de ahora, según Sevilla, "estamos en una segunda fase para las empresas en la que es previsible que la recuperación se retrase", por lo que ha augurado que parte del tejido empresarial podría encontrarse en una situación de insolvencia a pesar de ser viables, debido al aumento de su deuda por la pandemia.

Por ello, el consejero delegado de Bankia ha afirmado que el Gobierno está hablando con las autoridades europeas para favorecer la refinanciación y reestructuración de préstamos, señalando que, es necesaria una solución conjunta para evitar problemas de impagos.