Soy un doble que ha salido en 'Batman: el Caballero Oscuro' y 'Star Wars': así es trabajar con las estrellas de Hollywood mientras te prenden fuego

Este artículo se basa en una conversación con Steen Young sobre sus experiencias como doble de acción en Hollywood. El siguiente texto ha sido editado por motivos de extensión y claridad.

Soy de origen escocés. Siempre quise ser actor, pero en la escuela me querían convertir en un mecánico. No me dejaban ser actor, así que empecé a practicar artes marciales. Luego me metí a actor, antes de hacer audiciones para universidades en Inglaterra.

Y eso fue todo. Me largué.

A lo largo de los años actué en varios musicales del West End y, con ese dinero, me pagué la formación para entrar en el registro de dobles y hacer unos cuantos cursos más.

Como en cualquier negocio, se empieza desde abajo. Por mucha experiencia que tengas, tienes que abrirte camino y conseguir la confianza de los coordinadores para que te llamen. Lleva años conseguirlo.

Luego hay que contar con que muchos actores y actrices tienden a querer hacer todas sus escenas porque tienen mucha experiencia y saben lo que hacen. He tenido algunos a los que incluso he tenido parar, lo cual, por otra parte, es mucho mejor que el hecho de que no quieran hacer nada.

Algunos no quieren hacer acrobacias, lo cual es comprensible. Es duro física y mentalmente estar metido en el personaje mientras se dan volteretas.

Luego también hay momentos divertidos. En Batman Begins, jugué al ping-pong con el doble de Christian Bale, que llevaba el bat-traje mientras yo llevaba un disfraz negro de ninja. Estábamos al pie de un rascacielos y Gary Oldman subía para hacer su escena. Miré por encima de su hombro, y Gary miró a Batman y luego me miró a mí, estaba incrédulo.

También fue increíble trabajar con Christian Bale. Bajó después de estar horas con el traje puesto y se hizo fotos con todo el mundo.

El Caballero Oscuro es probablemente una de las mejores películas que he hecho como actor. Todo es real. "Queremos volcar un camión. ¿Podemos hacerlo?" "¡Sí!" Lo hicieron ante nuestras narices. A continuación, ocho personas salieron despedidas de un rascacielos de casi 60 metros de altura. Fue increíble.

También hice de doble para el villano de la mafia, Lau (Chin Han), así que tuve la suerte de estar en la escena en la que Batman va a Hong Kong a secuestrarlo. Llega volando, vuela las ventanas, me agarra, lanza un globo que atrapa un avión y nos alza a los dos al cielo. Lo hicimos de verdad, así que Batman y yo nos tiramos desde un rascacielos de 30 metros.

Hacer acrobacias puede parecer divertido, pero requiere mucho papeleo

Lo que la gente no sabe es la cantidad de papeleo que conllevan estas acrobacias. Como coordinador, empiezo a prepararlas mes antes que los especialistas. 

Me encargo del papeleo, las llamadas telefónicas y la organización. Tengo mi iPad pegado a mí para hacer evaluaciones de riesgos para la semana siguiente porque aparte de ser actor también tengo cinco negocios que dirijo dentro de la industria. La burocracia es incesante.

Luego el doble solo tiene que llegar y hacer lo que tenga que hacer. En cambio, como coordinador me paso el día anterior repasando la escena tanto yo solo como con el actor. Finalmente, durante la noche preparo todo para el día siguiente. Es todo un reto.

La aparición de famosos en el set

En Star Wars: Los últimos Jedi, yo estaba de pie en una trinchera junto con el director, sosteniendo una pistola láser y disparando a los cazas TIE y a los malos. Simplemente genial.

Incluso aparecieron famosos para ponerse los trajes y los cascos de los soldados imperiales. Te dabas la vuelta en plan, "¡Oh, Beckham! ¿Cómo estás, colega?". Es un tipo guapísimo y encantador. Hacía cola con todo el mundo para tomar un café y hablaba con todo el mundo. He trabajado con David Beckham unas cuantas veces, estuvimos también juntos en King Arthur de Guy Ritchie.

Por cierto, en King Arthur, creo que me prendieron fuego 15 veces en un día. Para una toma, tuve que correr 200 metros hasta el castillo antes de caer a un foso donde me apagaban. Pero en una de las primeras tomas, gritaron "¡Corten!" y cientos de extras se pararon mientras yo corría y les gritaba que se apartaran. Por eso es importante ensayar.

Además de actuar, ahora entreno a otros dobles para que hagan su trabajo bien y de forma segura. A algunos en el sector esto no les parece bien: "No les enseñes demasiado o nos quitarán el trabajo", me dicen.

Yo les digo que tenemos que formar a la gente, enseñarles cómo tirarse por las escaleras. O cómo sostener un arco y una flecha. La mayoría de los coordinadores no tienen tiempo ni dinero para formar a nadie en una producción. Esperan que ya estés entrenado.

Por eso, en mi empresa, Stunt Courses, preparamos y formamos a los actores en diversas técnicas, como el trabajo con cables, el combate, las caídas y las armas de fuego.

Tenemos el único curso del Reino Unido que enseña a los artistas a utilizar armas de fogueo con la aprobación del Ministerio del Interior y de la policía. Lo enseñamos como es debido. Es importante y merece la pena.