Las parejas heterosexuales tienen más probabilidades de divorciarse por un ascenso de la mujer: estos sencillos consejos pueden ayudar a evitarlo
- De a cuerdo a algunas investigaciones, las parejas heterosexuales en las que ella gana más que el marido tienen más probabilidades de evaluar de manera poco satisfactoria su matrimonio.
- Según un estudio, una mujer que es ascendida a un trabajo de alto nivel como CEO es más probable que se divorcie.
- ¿Por qué pasó esto? Se debe a una ruptura de las expectativas dentro de una relación, afirman los expertos.
- Las parejas heterosexuales pueden evitar estos problemas siguiendo algunos pasos: dejando claro las ambiciones y expectativas profesionales de cada uno desde el principio, o buscando ayuda profesional si es necesario.
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Las mujeres han logrado grandes avances en los últimos años a nivel laboral.
El 2018 fue etiquetado como "el año de la mujer" por la cantidad de ellas que en Estados Unidos lograron romper récords en lo que refiere a cargos políticos, 2019 fue testigo de los efectos del movimiento #MeToo en numerosos sectores, y 2020 comenzó con el dato de que las mujeres han superado a los hombres en mayoría en cuanto a fuerza laboral en EEUU.
Sin embargo, a pesar de estos avances, siguen persistiendo tendencias preocupantes entre las parejas heterosexuales. De hecho, los primeros estudios indican que este progreso de género —por más incómodo que parezca— podría estar ejerciendo presión sobre las relaciones.
Las investigaciones a nivel global presentan una imagen preocupante para aquellas mujeres que desean una carrera y un matrimonio de éxito
En los matrimonios donde es probable que el ingreso potencial de la mujer supere al de su marido, esta tiene menos probabilidades de formar parte de la fuerza laboral, según muestra un estudio de 2015 publicado en The Quarterly Journal of Economics.
En los matrimonios donde ella gana más que él, también es más probable que la mujer dedique más tiempo a las tareas domésticas, y es más probable que ambos reporten no estar satisfechos con su relación.
Además, las mujeres son más propensas que los maridos a comprometer el horario de trabajo o la carrera profesional cuando enfrentan problemas familiares o relativos al cuidado de los niños.
Y, según un estudio de 2016 elaborado en Suecia, —un país con un destacado porcentaje de mujeres en cargos políticos y que se enorgullece de la aceptación de la palabra feminista— el éxito profesional de una mujer a menudo se produce a expensas de su matrimonio. El ascenso de ellas a un "trabajo superior" como CEO o líder político "drásticamente" aumenta sus posibilidades de divorcio, pero lo mismo no es cierto cuando un hombre es ascendido.
La promoción de una mujer en algo que en sí mismo no es inherentemente peligroso para un matrimonio. Lo que sucedes es que este ascenso puede desafiar lo que la pareja, específicamente el hombre, esperaba en la relación.
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"Es el cambio en las expectativas", afirma a Business Insider el psicólogo clínico Ramani Durvasula. "El quebrantamiento de las expectativas y el poder financiero posterior que puede provenir de un ascenso puede perturbar un canon existente dentro de esa relación. Y puede ser difícil de equilibrar, especialmente para un compañero masculino cuyas necesidades habían estado bien cubiertas con la situación anterior."
Si bien esta investigación se ha centrado en las parejas de sexo opuesto, uno puede imaginar que los consejos para fomentar una relación sana a largo plazo también se aplican a parejas del mismo sexo.
1. No seas tímida en tus ambiciones profesionales
Las mujeres deben establecer sus expectativas desde el principio con su pareja masculina.
"No seas tímida con tus aspiraciones y ambiciones mientras estás quedando con alguien", afirma Durvasula.
"Si crees que una potencial pareja te pedirá que recojas tu cosas porque indicas que quieres perseguir una carrera o trabajar a lo largo de la vida de tus hijos, entonces puede ser mejor dejarle ir, o esto siempre será motivo de pelea en tu relación".
2. Habla acerca de tus expectativas laborales y domésticas antes de casarte
Las relaciones son más vulnerables cuando las expectativas iniciales sobre los roles de género se dan la vuelta, informa The Atlantic. Para evitar eso, es importante establecer un terreno común con respecto a los roles profesionales y domésticos, según la experta en relaciones y coach Jessica Yaffa.
"Antes de meterte en un compromiso de por vida, mantén conversaciones con tu pareja sobre las expectativas relacionadas con los roles, las finanzas y el reparto de responsabilidades", dice Yaffa.
Estas conversaciones deben establecer expectativas y dejar que cada uno discuta como las cumplirá.
Pregúntale a tu pareja: "¿Qué haríamos si me pidieran que me mudara? ¿Qué haríamos si fuera a ti a quien se le piden? ¿Quién cogerá la baja al tener niños? ¿Cómo imaginas que gestionaremos su cuidado, rutinas diarias como dejar a los niños en la escuela o recogerlos por la tarde?".
3. Comparte las tareas domésticas y las obligaciones familiares desde el principio
La investigación muestra que las parejas que dividen las tareas domésticas son más felices. Y es menos probable que tengan problemas si la mujer es ascendida, afirma Durvasula.
"No creo que una relación sana, equilibrada y satisfactoria con un buen equilibrio de roles dentro de la relación, por ejemplo, cargas compartidas con respecto a las tareas domésticas y la crianza de los hijos, se vea amenazada o termine (debido) al ascenso de la pareja femenina ", indica Durvasula.
"Supongo que las relaciones más tradicionales basadas en el género, en las que estos roles, como los quehaceres domésticos, no estaban equilibrados, serán las relaciones que recibirán el golpe".
En su nuevo libro, Fair Play, la abogada de Harvard y experta en gestión, Eve Rodsky, argumenta que equilibrar las tareas del hogar va más allá de simplemente hacer que uno aborde una serie de obligaciones y el otro haga otras. Este método tradicional depende de que una de las partes asuma el "trabajo de preocuparse" sobre las tareas del otro.
En cambio, argumenta Rodsky, las parejas deben tener una lista de tareas que poseen de principio a fin. Por ejemplo, si el marido decide recoger a los niños del colegio, él será el responsable de saber a qué hora deben ser recogidos y hacerlo. No en confiar en que su mujer se lo dirá. Del mismo modo, si ella acepta organizar fiestas familiares de cumpleaños, planeará con anticipación, comprará los globos y cocinara un pastel. No dependerá de su marido para recoger los encargos o asegurarse de que todos están en casa.
4. Deja espacio para tener este tipo de conversaciones a lo largo de tu relación o matrimonio
Las conversaciones sobre los roles profesionales y familiares deben darse periódicamente a lo largo de una relación o matrimonio.
"Debe haber espacio para redefinir roles y responsabilidades", dice Yaffa. "Pida ayuda si la necesitas, —a través de un coach o terapeuta".
Este artículo fue publicado originalmente en BI Prime.
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