Cuando te vas a poner a dieta, seguro que el pan es uno de esos alimentos que te restringirán, y tú mismo lo harás si decides cambiar tu alimentación. Pero hay panes y panes, y al ser un alimento tan vital para nosotros, más vale tener opciones sanas y que no engorden para no sufrir su ausencia. Pues los hay, y mejor aún, avalado por los dietistas, que se quedan con dos tipos de panes. 

El pan es un alimento básico en muchas culturas y cadietas, pero su consumo a menudo se ve afectado por la preocupación de aumentar de peso, pero como aseguran estos expertos, no todos los panes son iguales, y algunos pueden ser incluidos en una dieta saludable sin temor a ganar peso, con lo que tendrás lo mejor de los mundos. 

Según los expertos en nutrición Lisa Richards, creadora de The Candia Diet, y Christine VanDoren, nutricionista y entrenadora personal, para descubrir dos tipos de pan que puedes disfrutar a diario sin preocuparte por tu peso: el pan de masa madre y el pan de centeno.

El pan de masa madre, el aliado perfecto

Un pan delicioso, que no engordan y más sano. Es ideal ¿no? Pues tendrás que pedir panes de masa madre, conocidos por su sabor distintivo y textura masticable. Este tipo de pan se diferencia de otros más convencionales, ya que se fermenta con un iniciador natural, compuesto generalmente de harina y agua. Cada vez más panaderías y reposterías lo ofrecen o están especializadas en ello, incluso vendiendo solo este tipo de productos, aunque hay que estar seguros de que es verdaderamente masa madre. 

Los beneficios del pan de masa madre

Según Richards, el proceso de fermentación natural descompone los carbohidratos complejos en azúcares más simples, favoreciendo una digestión más lenta y una liberación gradual de glucosa en el torrente sanguíneo. Esto ayuda a estabilizar los niveles de azúcar en la sangre y evita los picos que pueden llevar a antojos y comer en exceso.

Además, este pan suele tener menos aditivos y conservantes en comparación con los panes producidos comercialmente, lo que lo convierte en una opción más saludable y rica en nutrientes; por otro lado, la textura densa y el sabor sustancial del pan de masa madre pueden promover una sensación de plenitud con porciones más pequeñas, reduciendo así el deseo de ingerir snacks o aderezos adicionales ricos en calorías. Todo ventajas. Pero hay otra opción más. 

El pan de centeno, rico en fibra y bajo en calorías

El pan de centeno es famoso por su sabor abundante y textura densa. Su ingrediente principal, la harina de centeno, contiene una mayor proporción de fibra y nutrientes en comparación con la harina de trigo refinada. Es la otra opción para apuntarte si quieres adelgazar o no ganar peso, y seguir una dieta saludable sin prescindir del pan. 

Las ventajas del pan de centeno

La primera es su alto contenido de fibra. La fibra soluble presente en el pan de centeno contribuye a una mayor sensación de saciedad y puede ayudar a regular el apetito, lo que es esencial para el control del peso.

Por otro lado, es bajo en calorías. Van Doren señala que una rebanada de pan de centeno contiene solo alrededor de 65 calorías, lo que lo convierte en una opción excelente para quienes buscan controlar su ingesta calórica; y es rico en nutrientes esenciales, aportando nutrientes valiosos como selenio, tiamina, manganeso, potasio y fibra.

Con estos dos panes anulas la creencia popular de que el pan debe ser eliminado por completo de una dieta saludable. Tanto el pan de masa madre como el de centeno ofrecen alternativas nutritivas y satisfactorias que no solo enriquecen tu alimentación, sino que también te ayudan a mantener un peso saludable y sin renunciar a algo que para muchos es irrenunciable.