La fruta similar a la naranja y el limón que destaca por sus propiedades relajantes

Su nombre irremediablemente te hará pensar en un aroma. Ya que la bergamota es ampliamente utilizada por su olor en perfumería. Si no sabes exactamente qué es, quizá te sorprenda saber que se trata de una fruta vinculada al mediterráneo. 

La bergamota es un cítrico que se cree surgió como cruce de naranja agria y tilo. Sea o no sea así, esa especia es clásica de la cuenca mediterránea, en concreto en el su de Italia.

"Las flores del árbol de bergamota son unas pequeñas inflorescencias blancas en forma de estrella, compuestas de 5 pétalos y que desprenden un olor dulce muy agradable. Florece en el mes de abril cuando anunciando los frutos venideros", describen desde Naranjas eco

Un cítrico poco conocido

El fruto de la bergamota parece moverse a caballo entre la naranja y el limón. Su carne es anaranjada con una cáscara verdosa que se vuelve amarilla al madurar. La bergamota es un cítrico de pulpa agria y amarga, lo que hace de este cítrico un mal candidato para la degustación en fresco, apunta los agricultures en su web. No obstante, su sabor es especialmente famoso por darle sabor al té Earl Grey y a la halva, un dulce de pasta de sésamo del Medio Oriente.

Es por ello que el interés de esta planta se suele centrar en los aromas. Sus aceites esenciales, que se obtienen raspando y presionando en frío la cáscara, se usan para la elaboración de perfumes o para aromatizar dulces en repostería o en cocina.

Un buen aliado para la ansiedad

Entre los posibles beneficios más populares de la bergamota está su capacidad para inducir un estado de calma.  Cierta evidencia apunta que el aceite esencial de bergamota tiene propiedades sedantes similares a las del diazepam.

Un estudio realizado con 41 mujeres sanas en edad universitaria demostró que la inhalación de vapor de bergamota durante 10 minutos mejoraba el estado de ánimo. También redujo la fatiga y los niveles de cortisol, la hormona del estrés. Otro ensayo sobre 57 adultos concluyó que 15 minutos de aromaterapia con bergamota mejoraban los sentimientos positivos.

Sin embargo, hasta el momento las pruebas son limitadas, dado el tamaño de los estudios, a la hora de recomendar este tratamiento para controlar la ansiedad o depresión.

Propiedades de la bergamota

Buena parte de la investigación sobre esta planta se basa en sus efectos sobre la protección del corazón.

Podría ayudar a controlar el colesterol. En adultos, la ingesta de 500 a 100 mg al día de extracto de bergamota o flavonoides de bergamota durante un máximo de 180 días redujo:

• El colesterol total hasta un 31%
• Los triglicéridos hasta un 39%.
• El colesterol de lipoproteínas de baja densidad (LDL) ("colesterol malo") hasta un 40%.

Otro ensayo clínico sobre 80 participantes analizó la eficacia del extracto de bergamota en personas con hipercolesterolemia moderada (es decir, 160 −190 mg/dl).  Tras recibir 150 mg de flavonoides de bergamota durante 6 meses mostraron una disminución en el colesterol total de 255 a 224, el colesterol LDL de 159 a 132 y los triglicéridos de 159 a 133. Se observó un aumento en el HDL con la bergamota de 50 a 54.

También se han encontrado efectos beneficiosos sobre el azúcar en sangre y ciertas bacterias nocivas.

Parte de sus beneficios provienen de las propiedades antioxidantes y antiinflamatorias de los flavonoides que contiene. SegúnVery Well Health, entre los componentes se encuentran los siguientes:

• Flavonoides, nutrientes con propiedades antioxidantes
• Limoneno y linalol, que confieren su fragancia , se han estudiado por su efecto positivo sobre la ansiedad y la depresión
• El acetato de linalilo, que tiene efectos antibióticos

¿Cómo se utiliza la bergamota?

Dependiendo de su formulación, la bergamota puede inhalarse, tomarse por vía oral o aplicarse sobre la piel.

Lo común es encontrarla en forma de aceite esencial para uso tópico o para ser inhalado mediante un difusor. Se comercializa además como suplemento en forma de comprimidos.

Por seguridad, no debe ser usado por niños, mujeres embarazadas o personas con hipoglucemia.