El fundador de Stratechery, Ben Thompson, un reputado analista tecnológico, cree que el nuevo casco de realidad aumentada y virtual de Apple no es solo una nueva plataforma informática por derecho propio, sino que también podría ser un valioso accesorio para los ordenadores de sobremesa de la compañía. 

Presentadas el lunes en el evento anual de desarrolladores de Apple, WWDC, las Vision Pro son la esperada incursión de Apple en la realidad aumentada y virtual, o "computación espacial", como la denomina la empresa.

Vision Pro tendrán un precio de 3.499 dólares, un coste elevado que probablemente refleje el coste de fabricación de un producto complejo. Apple ha presentado un amplio conjunto de funciones para el visor, como videollamadas inmersivas a través de FaceTime, aplicaciones de juegos y la posibilidad de extender el escritorio Mac de una persona a su entorno.

Esto crea un espacio ilimitado y libera a los usuarios de las limitaciones de la típica pantalla de 13 o 15 pulgadas de los MacBook. Aunque el Vision Pro está diseñado para usarse con gestos de la mano, los usuarios pueden conectar un teclado y un ratón Bluetooth cuando quieran reflejar su escritorio.

En opinión de Thompson, la idea de Apple de que el iPad fuera un dispositivo para la productividad nunca llegó a cuajar debido a la naturaleza limitada del sistema operativo. iPadOS es engorroso, en parte porque requiere pasar por el aro para hacer las cosas. Conectar otros dispositivos, como discos duros y cámaras, nunca ha sido intuitivo. 

Los ordenadores Mac permiten a los usuarios descargar aplicaciones desde cualquier lugar o instalar accesos directos personalizados y otras herramientas que no están permitidas en iOS. La compatibilidad con el ratón no es muy buena, ya que las aplicaciones están diseñadas para la entrada táctil. 

Las Vision Pro están entre la valentía y la temeridad: Apple apuesta por la realidad mixta cuando las ventas más se desploman

Las Vision Pro serán capaces de soportar aplicaciones de productividad por sí mismas gracias a su acceso a una App Store y a una gran comunidad de desarrolladores, y las aplicaciones hechas para iPad pueden ser fácilmente portadas al Vision Pro. Pero Thompson tampoco cree que el Vision Pro vaya a sustituir al Mac, porque duda que Apple vaya a hacerlo menos restrictivo que iOS o iPadOS. 

Quienes asistieron en persona a la WWDC y pudieron probar el Vision Pro han dicho que es un producto en busca de un propósito. Ese fue un sentimiento similar al que rodeó al Apple Watch cuando se lanzó:  Apple estaba abriendo varios frentes, llenando el dispositivo de un montón de características y esperando que aterrizara en algo que la gente quisiera. 

Vision Pro se lanza con un montón de características poco sorprendentes, pero Thompson no cree que la gente deba pasar por alto la capacidad del visor para reflejar un ordenador de sobremesa.

"Creo que VisionOS es mucho más atractivo para la productividad que el iPad, gracias al lienzo infinito que permite. Si tienes que pasar por el mismo tipo de aros para hacer las cosas que haces con el iPad, bueno, esa capacidad de proyectar una pantalla de Mac en el Vision Pro va a ser esencial", como ha defendido Thompson.

Thompson señala que Apple está utilizando "conexiones de gran ancho de banda" para compartir pantallas de escritorio con el Vision Pro, lo que sugiere que podría crear una conexión WiFi directa entre los dos dispositivos para evitar retrasos. 

También existe la posibilidad de que Apple permita algún día las conexiones por cable, puesto que Vision Pro ya utiliza una conexión por cable para la batería. El Mac ya puede reflejarse en un iPad a través de la función Sidecar de Apple, y funciona con un retraso mínimo. 

En general, es interesante de pensar en Vision Pro no solo como un producto independiente sino también como una forma de aumentar la funcionalidad y utilidad de los Mac. La posibilidad de extender un ordenador de sobremesa a nuestro entorno no es una idea nueva. Meta lo ha demostrado con sus visores Quest dentro de los espacios de Workrooms. 

Por supuesto, la estrecha integración de Apple entre su ecosistema de hardware y software significa que las gafas de la compañía van a funcionar bien con soporte nativo para FaceTime, iMessage y otros servicios en los que muchos confían, lo que los convierte en una propuesta más atractiva. Puede que sea el pulido que Apple necesitaba para crear un mercado general para los visores. 

Si la función de escritorio ampliado funciona bien y el precio de las gafas baja (que seguramente lo hará), entonces esa capacidad por sí sola podría mover unidades. Ya sea en un avión o en un tren, los usuarios de Mac no estarían limitados por la pequeña y claustrofóbica pantalla de su MacBook, cambiando constantemente de aplicaciones o dividiendo 2 ventanas una al lado de la otra.