Este joven de 25 años ingresa más de 300.000 euros al año vendiendo cartas Pokémon: así puedes comenzar a invertir en cartas coleccionables

Nathan Rennolds,
Leo Ginsburg
| Traducido por: 
Thomas Kovacs, el dueño de Amazing Toys.
Thomas Kovacs, el dueño de Amazing Toys.

Thomas Kovacs/ Getty Images / Yvonne Hemsey / Angela Weiss / acilo / Collage: Dominik Schmitt

Durante la pandemia, el precio de las tarjetas Pokémonaumentó alrededor de un 500%, impulsado por celebridades como el youtuber Logan Paul, el DJ Steve Aoki o el rapero Logic que compraron cromos y abrieron paquetes en streaming.

El año pasado, Paul compró una tarjeta Pokémon por alrededor de 5,2 millones de dólares, la más cara de la historia, y Logic pagó 220.000 dólares por una primera edición de Charizard en 2020.

Thomas Kovacs, de 25 años, es el propietario de la tienda online Amazing Toys. Kovacs vive en Zúrich y su tienda vende cartas de Pokémon, cartas de Yu-Gi-Oh y todo tipo cómics.

El año pasado ganó unos 340.000 francos suizos, o unos 329.000 euros, en ingresos a través de su tienda online, según ha podido comprobar Business Insider al revisar su documentación financiera. También tiene una tienda física, por lo que en un año la cifra de ingresos asciende a casi 600.000 euros en un año, revela a Business Insider

¿Lo mejor de todo? Kovacs comparte algunos trucos y consejos para invertir en cartas Pokémon o similares. 

"La mayoría de las tarjetas vale entre 1 y 50 euros", explica Kovacs en una entrevista con Business Insider, y agrega que solo una fracción de las cartas tiene un valor alto.

Es fundamental tener interés en los cromos si quieres invertir en ellos, matiza Kovacs. "Es el mismo principio que coleccionar coches clásicos, cromos, cómics o arte. Tienes que estar interesado en eso", afirma.

Si no tienes ninguna conexión con este mercado, no sabrás por qué una carta en particular es tan popular, añade. 

Es una inversión especulativa, por lo que los rendimientos y el crecimiento del valor son extremadamente difíciles de predecir, agrega. Por eso es importante que disfrutes de los cromos y que esté familiarizado con la industria, añade.

Kovacs también desaconseja considerar estas tarjetas como inversiones puras. No hay datos que fijen el precio: se trata de saber cuánto creen que valen los inversores individuales. 

"No importa qué cromo compres, es una hoja de papel que está impresa", apunta Kovacs.

"Cuando estás empezando, no invertiría en tarjetas costosas porque no sabes lo que estás haciendo y no puedes evaluar el mercado", explica. 

También es clave diversificar, matiza. Al comprar tarjetas, puede optar por comprar un display o un booster, según Kovacs. Hay 10 tarjetas en un booster y un display contiene varios boosters, revela.

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Comprar un solo cromo "no tiene absolutamente ningún sentido", sentencia Kovacs. "Es como empezar a invertir en bolsa y comprar únicamente una acción por 1.000 euros".

"Me gastaría los 1.000 euros en algo menos costoso, como displays".

Es importante comprar tarjetas que estén vigentes, idealmente de los últimos uno o dos años, añade Kovacs.

"Las mejores cartas son siempre las más recientes", puntualiza.

Cada conjunto trae nuevas cartas, lo que significa que "de repente, una buena carta puede convertirse en una mala solo dos meses después", agrega.

Esto se debe a que el precio también depende de cómo de jugable sea una carta: "Esa jugabilidad cambia con cada nuevo conjunto".

En la tienda de Kovacs, un display oscila entre los 137 y 2.990 francos suizos (131/2800 euros). 

Si decide invertir en tarjetas Pokémon, el almacenamiento es "muy importante", revela Kovacs.

Debes vigilar la humedad y la temperatura, señala. ¿Lo mejor? Una temperatura ambiente es la forma ideal de almacenar las tarjetas, asegura. 

"Idealmente, deberían almacenarse en las mismas condiciones en que viven los humanos", apostilla.

En estas condiciones no le pasará nada ni al papel ni al plástico, asegura. También debes evitar que le dé la luz del sol, ya que puede hacer que el color se desvanezca o que la tarjeta se doble por el calor, añade. 

Si tiene tarjetas caras, Kovacs recomienda guardarlas en una caja fuerte en un banco.

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