He probado a pagar con la palma de la mano usando los escáneres futuristas de Amazon y me ha resultado aterradoramente cómodo

Este verano, Amazon anunció que iba a implantar su tecnología de pago con escáner de la palma de la mano en cada uno de sus más de 500 establecimientos de Whole Foods en Estados Unidos para finales de año. 

Amazon había estado probando el sistema de pago, llamado Amazon One, en algunas tiendas de Seattle desde 2021, pero no pensé demasiado en el asunto hasta hace poco, cuando los lectores de palma aparecieron un día en las cajas registradoras del Whole Foods de Nueva York donde compro la mayoría de mis alimentos.

Como escribo sobre temas tecnológicos, pensé que era mi deber probarlo en nombre del periodismo. 

El sistema de reconocimiento de la palma de la mano funciona vinculando la información de pago del usuario con la huella distintiva de su palma de la mano. Si eres miembro de Amazon Prime, también puedes vincularlo a tu cuenta Prime: ya no tienes que buscar a tientas el código de la tienda en la aplicación de Amazon. En los supermercados Whole Foods, solo tienes que pasar la palma de la mano por encima del lector cuando estés listo para pagar y el sistema buscará tu cuenta Prime, aplicará los descuentos y realizará el cargo en la tarjeta de crédito con la que te registraste.

Amazon One también ofrece la opción de vincular el carné de identidad a la cuenta para poder pagar compras sujetas a restricciones de edad sin tener que pagar con tarjeta. Por ahora esta opción solo está disponible en un local participante de Amazon One, Coors Field en Colorado, pero la página de la compañía dice que pronto habrá más locales.

Los escáneres están en todas las cajas registradoras.

En el supermercado Whole Foods de mi zona, los escáneres de palma están disponibles tanto en las cajas registradoras normales como en las cajas de autopago.

Yo opté por registrar mi palma de la mano en persona en la tienda habitual en la que compro de la cadena Whole Foods, propiedad de Amazon.

También puedes inscribirte en Amazon One a través de internet utilizando tu cuenta de Amazon previamente, y luego completar tu perfil escaneando tus palmas la próxima vez que estés en una tienda que disponga del dispositivo.

Después de pulsar "tocar para empezar", el dispositivo te preguntará si te has registrado previamente o no.

Después de tocar la pantalla, el dispositivo me preguntó si me había inscrito previamente por internet o si aún no lo había hecho. Hice clic en esta última opción: "Inscríbete ahora".

A continuación me pidió que introdujera una tarjeta de crédito o débito.

¡Muy fáci! A continuación, saqué la tarjeta de crédito con la que quería inscribirme y la introduje en la parte inferior del escáner de palma. No parecía haber una opción de toque inalámbrico o Apple Pay para este paso.

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Introduje la tarjeta y pasamos directamente a la parte del escáner.

El aparato me pidió que pasara la mano por encima del escáner.

Hora de escanear la palma de la mano.

Seguí las instrucciones del aparato, escaneando primero mi palma derecha y luego la izquierda, que era optativo.

El escáner me pidió que introdujera mi número de teléfono. Amazon me envió un mensaje de texto con un enlace a una página en la que se me pedía que verificara los datos de mi tarjeta con los cuatro últimos dígitos de mi número de tarjeta de crédito y la fecha de caducidad de la tarjeta. Y eso fue todo: me llevó a mi página de inicio de Amazon One, donde puedo ver mi número de teléfono vinculado, la cuenta de Amazon y el método de pago. En la parte inferior también está la opción de cancelar la inscripción en el programa y eliminar mi perfil.

La página me da la opción de vincular otras suscripciones y recompensas, como el programa de recompensas de las cafeterías Panera Bread y un identificador de AXS Mobile. También he añadido mi carné de conducir a mi perfil, lo que significa que ahora puedo pagar con la palma de la mano las compras restringidas por edad sin que me pidan la tarjeta en los establecimientos Amazon One participantes.

Ahora que está configurado, lo uso todo el tiempo.

Desde entonces, he utilizado el método de pago cada vez que he ido a Whole Foods, incluso en un establecimiento de Albany que desconocía y en el que me detuve por casualidad durante un viaje por carretera. Funciona tal y como se anuncia: escaneo toda la compra en la caja, escaneo la palma de la mano y mi cuenta Prime y el método de pago se aplican al instante.

En mi supermercado Whole Foods había un cartel que avisaba a los clientes de que allí se recogía información biométrica.

Al principio era escéptico con respecto a esta tecnología, y lo sigo siendo. Al fin y al cabo, hay algo en el hecho de entregar una imagen escaneada de una de tus partes del cuerpo que te hace sentir intrínsecamente vulnerable.

Y la tecnología ha sido criticada por algunos, sobre todo por quienes temen que los datos biométricos que recopila Amazon puedan ser mal utilizados.

Amazon, sin embargo, hace hincapié en que "nunca compartirá los datos de la palma de la mano con terceros", "incluyendo en respuesta a las demandas del Gobierno, a menos que estemos obligados a cumplir con una orden legalmente válida y vinculante". 

La compañía también afirma en su página web que la firma de la palma de la mano de Amazon One no puede ser replicada como una tarjeta de crédito o una contraseña para suplantar la identidad de los usuarios, porque no utiliza "imágenes en bruto de la palma de la mano" para la identificación del usuario, y que los escaneos son inmediatamente encriptados y protegidos por la nube de AWS.

Un portavoz de Amazon ha remitido a Business Insider a un artículo del blog de la web de la empresa en el que se señala que el escaneado de la palma de la mano es un gesto intencionado del cliente, por lo que la información biométrica no se captura de forma pasiva. La tecnología es "independiente del sexo y la raza".

"Amazon One funciona más allá del espectro normal de la luz y no puede percibir con precisión el sexo o el tono de la piel, por lo que no detecta el sexo ni la raza", dice el post.

Cuanto más utilizo esta tecnología, más me confunde lo cómoda que me resulta. ¿De verdad necesita alguien una opción de pago biométrico en el supermercado? Desde luego que no. Al fin y al cabo, ya podemos pagar fácilmente tocando una tarjeta o el teléfono.

Pero, ¿hace que pasar por la caja sea un poco más fácil? Sí. Y aunque odio admitirlo, creo que me está convenciendo.