El imperdonable error que cometías hasta ahora con el aire acondicionado

Con la llegada del verano, regresan los mosquitos, las olas de calor, las noches tropicales y... los problemas para dormir. Para hacer vida en el hogar —especialmente en las zonas más calurosas de España—, el aire acondicionado se vuelve un aparato imprescindible. Sin embargo, muchas personas lo utilizan de forma incorrecta y programan mal su temperatura. 

Uno de los principales errores se trata de poner el aire acondicionado de tu casa a 16 grados, precisamente cuando hace mucho calor, tal y como detalla la cuenta de Twitter Explícame de ciencia y otros expertos,  En perspectiva de un verano abrasador y tormentoso, anota lo que debes saber.

Por qué no debes poner el aire acondicionado de tu casa a 16 grados

Este error, además de sobrecargar el comprensor, provoca un elevadísimo consumo energético. Lo aconsejable es que la diferencia entre aire interior y exterior no sea superior a 12 grados. De hecho, lo ideal es que la diferencia no sean más de 12. Si afuera hay una temperatura de 35 o 40 grados y tú lo pones a 16, la diferencia es enorme.

Desde la OCU recomiendan que, si hace 33 °C fuera, te conformes con 25 °C en lugar de bajar la temperatura de tu habitación a 18 °C. Así evitará sel desgaste del motor, tendrás un gran nivel de confort y ahorrarás dinero. "Por cada grado más frío (o más cálido en invierno) que regules el termostato, añadirás un 10 % al coste de funcionamiento del equipo", señala la OCU.

El método egipcio, la curiosa técnica para dormir bien cuando hace mucho calor

En general, lo ideal es mantener la temperatura del aire acondicionado entre 20 y 24 grados. Tampoco trates de usar el aire acondicionado para enfriar un área más grande de para la que fue diseñado: sería como tratar de abrir la nevera para enfriar tu cocina.

Según los cálculos de la OCU realizados con datos del pasado, el aire acondicionado puede costarte al mes unos 36 euros si lo enciendes durante 4 horas al día (1 kWh * 4 h = 4 kWh de consumo * 30 días = 120 kWh * 0,30 €/kWh = 36 €).

Para controlar el gasto en aire acondicionado, adquiere un aparato del tamaño adecuado para tu casa, coloca la unidad en la mejor posición para que circule el aire, busca los modelos más rentables con la ayuda de un profesional y combínalo con una casa bien aislada.