Este método para cocinar el arroz elimina gran parte del arsénico pero conserva los nutrientes esenciales

El arroz es uno de los alimentos que más se consumen en el mundo, pero también es de los que más cantidad de arsénico contiene. 

La exposición prologada a este elemento, que se dan sobre todo por consumo de agua contaminada, comida preparada con esta y cultivos alimentarios regados también con ella puede causar intoxicación crónica, en forma normalmente de lesiones cutáneas y cáncer de piel, según alerta la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Las aguas subterráneas contaminadas son una de las mayores amenazas para la salud pública en cuanto a exposición al arsénico, según advierteScience Alert, por su uso para el riego de arroz.

Algunos países tienen legislación para disminuir la exposición al arsénico inorgánico de su población, pero muchos asiáticos carecen de estas. Pero incluso en los que sí cuentan con directrices específicas en este sentido puede haber riesgos, sobre todo para los niños más pequeños y susceptibles.

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A lo largo de los años se ha conseguido disminuir la cantidad de arsénico de distintas maneras, lavando o enjuagando el arroz y con métodos distintos de preparación, pero esto puede reducir los nutrientes del alimento.

Ahora, un nuevo estudio de la Universidad de Sheffield (Reino Unido) ha averiguado la forma de eliminar gran parte de ese arsénico preservando los nutrientes del arroz. Los investigadores han probado cuatro métodos para ver cuál era la mejor forma de cocinarlo: con arroz sin lavar, lavado, a remojo o vaporizado.

Este último ha resultado ser la mejor opción para reducir la mayor cantidad de arsénico posible preservando los nutrientes. De acuerdo con los investigadores, esta técnica elimina un 54% del componente en el arroz integral y un 73% en el blanco, en tanto que mantiene la mayor cantidad de nutrientes como fósforo, potasio, magnesio, zinc y manganeso.

La manera de cocinarlo es la siguiente:

1. Hierve 4 tazas de agua en una olla.
2. Añade el arroz y déjalo hervir durante 5 minutos.
3. Quita el agua con arsénico y añade agua fresca (el doble de la cantidad de arroz que estés cocinando).
4. Deja que el arroz se termine de hacer a fuego lento o medio.

"Este método es capaz de reducir la exposición de arsénico sin eliminar los nutrientes", explica Manoj Menon, investigador de este estudio, en declaraciones recogidas por la web de la Institución. "Recomendamos esta forma para preparar el arroz a niños pequeños, más vulnerables a la exposición de arsénico".

Además de eliminar el arsénico, este método gasta menos agua, energía y tiempo en la cocina que otros utilizados con el mismo fin. 

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El estudio va a ser repetido en diferentes ecosistemas y usando diferentes tipos de arroces y de calidades de agua, de acuerdo con Science Alert.