La molécula presente en el aceite de pescado que te dará más longevidad

Frutas, verduras... y pescado. En ninguna dieta saludable faltan estos alimentos, siempre recomendados por médicos y nutricionistas. Pero concretando más, se siguen estudiando los beneficios de cada uno, en este caso del aceite de pescado, y qué elementos son los mayores responsables. En este caso se estudió una molécula llamada resolvina, que reduce la inflamación y por ende te da mayor longevidad. 

La búsqueda de una vida larga y saludable es tan antigua como la humanidad misma, pero actualmente es casi una obsesión, con dietas y rutinas de ejercicio para lograrlo. 

La ciencia también lo está y en las últimas décadas ha hecho avances significativos en entender cómo se puede extender la esperanza de vida, no solo viviendo más años, sino mejorando la calidad de estos. Uno de los descubrimientos más prometedores en este ámbito proviene del aceite de pescado, específicamente esta molécula, que podría ser clave en la lucha por una longevidad saludable.

El enemigo silencioso: la inflamación

La inflamación es un proceso biológico fundamental en la respuesta del cuerpo a las lesiones y las infecciones. Sin embargo, cuando se vuelve crónica, puede acelerar el proceso de envejecimiento y aumentar el riesgo de numerosas enfermedades relacionadas con la edad. 

La inflamación crónica está detrás de condiciones tan variadas como las enfermedades cardiovasculares, neurodegenerativas o diabetes. Es aquí donde entra en juego el papel crucial de ciertas moléculas presentes en el aceite de pescado.

Resolvinas: las directoras de orquesta en la resolución de la inflamación

Las resolvinas son moléculas lipídicas derivadas de los ácidos grasos omega-3, específicamente del EPA y DHA, encontrados abundantemente en el aceite de pescado. 

Estas moléculas juegan un papel crucial en el proceso natural de resolución de la inflamación, promoviendo la curación de tejidos dañados y la eliminación de células muertas, sin suprimir el sistema inmunitario.

La existencia de las resolvinas fue descubierta gracias a la investigación liderada por científicos de la Universidad de Harvard. 

Estas investigaciones han demostrado que las resolvinas no solo detienen la inflamación, sino que también promueven procesos que restauran los tejidos a su estado normal, algo crucial para prevenir los efectos negativos de la inflamación crónica.

La importancia del aceite de pescado

El aceite de pescado es una fuente rica en precursores de las resolvinas. El consumo regular de aceite de pescado, ya sea a través de la dieta o complementos alimenticios, puede aumentar la producción natural de estas moléculas en el organismo, ofreciendo una protección contra los procesos inflamatorios que aceleran el envejecimiento y contribuyen al desarrollo de enfermedades crónicas.

Los avances científicos y las aplicaciones

La investigación en torno a las resolvinas ha avanzado significativamente desde su descubrimiento. Más de mil publicaciones científicas respaldan su eficacia en una amplia gama de patologías, subrayando su potencial como herramienta terapéutica en la medicina moderna, especialmente en el ámbito de la longevidad.

El papel de las resolvinas y el aceite de pescado en la promoción de una vida más larga y saludable es indudable a tenor de estudios como el realizado por un equipo de científicos de la Universidad de Harvard liderado por Charles N. Serhan. 

A medida que la ciencia avanza, la integración de estrategias dietéticas y suplementos basados en estos descubrimientos podría ser clave para combatir la inflamación crónica y sus efectos perjudiciales, abriendo las puertas a una era de longevidad sin precedentes.

Más estudios al respecto

Un estudio publicado en el International Journal of Molecular Sciences en 2022, por Chang Liu y sus
colaboradores, destaca también el papel de las resolvinas en la respuesta inflamatoria crónica. Las resolvinas inhiben la infiltración de leucocitos, aumentan la fagocitosis por macrófagos, regulan las citocinas y alivian el dolor inflamatorio. 

Su capacidad para promover la resolución de la inflamación las convierte en un objetivo terapéutico potencial para enfermedades inflamatorias crónicas como la artritis, la neuroinflamación, la inflamación vascular y la inflamación de tejidos 

El aceite de pescado, con su riqueza en moléculas como las resolvinas, emerge como un componente esencial en esta batalla contra el tiempo y la enfermedad. Al incorporar este "oro líquido" en tu dieta, no solo nutres tu cuerpo, sino que inviertes en un futuro más saludable y, potencialmente, más largo.