En la nube, está la IA (que está de moda) y todo lo demás (que no lo está)

Alistair Barr
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Sam Altman, CEO de OpenAI (izquierda), junto a Satya Nadella, director ejecutivo de Microsoft.
Sam Altman, CEO de OpenAI (izquierda), junto a Satya Nadella, director ejecutivo de Microsoft.

Justin Sullivan/Getty

  • Los inversores están entusiasmados con la idea de la "nube de inteligencia artificial".
  • Está el negocio de la "nube 1.0", que Amazon (AWS) ha dominado durante años, y la "nube de IA", que representa un futuro en el que Microsoft parece estar comiéndose la tostada.

El sector de la computación en la nube se está dividiendo en dos partes bien diferenciadas.

Está el futuro de la "nube de inteligencia artificial", en el que las tarjetas gráficas —GPU, por sus siglas en inglés— de Nvidia y los grandes modelos lingüísticos —LLM— forman la base de los nuevos servicios de IA generativa que se venden y alquilan a través de internet; que está de moda y en el que Microsoft, con la ayuda de OpenAI, va en cabeza (aunque Google Cloud también lo está intentando).

Y está el negocio actual de la "nube 1.0", en el que los microprocesadores —CPU— y los servidores más tradicionales dan soporte a aplicaciones, páginas web y otros servicios de software; que ya no está tan de moda, a ojos de muchos inversores, y en el que Amazon Web Services (AWS) ha sido líder durante más de una década.

Los resultados trimestrales presentados por Microsoft a principios de esta semana han avivado la inquietud por el mercado de la nube 1.0, según los analistas. 

"Existe la preocupación de que las cargas de trabajo en la nube no relacionadas con la inteligencia artificial sigan ralentizándose en todo el sector", aseguraba Mark Schilsky, especialista en ventas TMT de Bernstein Research, en un informe reciente a los inversores. 

Azure, el negocio en la nube de Microsoft, ha registrado un incremento de la facturación del 28% en su último trimestre (el segundo de su año fiscal, el cuarto del año natural). Sin embargo, seis puntos porcentuales de ese crecimiento se debieron a nuevas cargas de trabajo de IA. Eso, en teoría, deja el antiguo negocio en la nube con un crecimiento del 22%. 

"Por lo tanto, se podría argumentar que el negocio de Azure que no tiene que ver con la inteligencia artificial se está desacelerando, lo que es un mal presagio para otras empresas de cloud computing como Amazon, etc.", apostaba Schilsky. "Puede ser un poco precipitado, pero vamos a averiguar MUCHO más este jueves cuando Amazon presente sus resultados del cuarto trimestre".

Andy Jassy, CEO de Amazon Web Services y sucesor de Jeff Bezos como CEO de Amazon

Los analistas de Goldman Sachs han señalado lo mismo esta semana, después de la presentación de resultados de Microsoft. 

"La rápida aceleración de los ingresos de IA —que ha representado seis puntos del crecimiento de Azure— abre interrogantes en torno a la fortaleza del gasto más amplio en computación en la nube", han expresado en una nota para sus clientes.

Amazon ha presentado sus resultados a última hora de este jueves. Wall Street esperaba que los ingresos de AWS en el cuarto trimestre creciesen entre un 13% y un 14% interanual y, aunque la división de computación en la nube ha cumplido con un 13%, los resultados han acabado decepcionando al mercado.

Para el primer trimestre de 2024, los inversores esperan que las ventas de AWS aumenten alrededor del 15% interanual, según Bernstein.

"¿Cómo de entusiasmados van a estar los inversores si Amazon Web Services registra ahora un crecimiento de mediados de década en lugar de un crecimiento de entre el 10% y el 20%? ¿Con Microsoft siguiéndole quitando cuota?", se preguntaba Schilsky.

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