El escándalo de Rawvana, la youtuber vegana sorprendida comiendo pescado, destapa la irrealidad que reina en las redes sociales

Rawvana, influencer vegana
  • Yovana Mendoza Ayres, conocida en la red como Rawvana, ha llevado a la popularidad el veganismo.
  • Su imperio, con más de tres millones de seguidores repartidos entre Youtube e Instagram comenzaba en 2013, cuando en redes la joven comenzaba a compartir consejos de belleza, dietas y tratamientos detox basados en el veganismo.
  • Un vídeo en el que la influencer aparece comiendo pescado ha hecho que su popularidad se ponga en entredicho.
  • A raíz del vídeo se ha dado a conocer los múltiples problemas de salud que la influencer vegana estaba padienciendo y que le han llevado a ingerir proteínas animales.

El drama ha llegado a las redes sociales.

La influencer y youtuber veganaRawvana ha visto cómo  su imperio construido a lo largo de los años en redes sociales se venía a bajo en cuestión de segundos. Los segundos que dura el vídeo publicado por otra influencer y en el que aparece Rawvana, ídolo de la vida vegana en internet, comiendo un plato de pescado.

Lo sucedido parece más sacado de un argumento de telenovela o película del Divinity que de la vida real. Pero, quizá es precisamente por eso, porque hablar de redes sociales nada tiene que ver con la realidad.

Yovana Mendoza Ayres, conocida en la red como Rawvana, había llevado a la popularidad un estilo de vida saludable basado en el veganismo. Su imperio, con más de tres millones de seguidores repartidos entre Youtube e Instagram comenzaba en 2013, cuando la joven californiana de origen mexicano comenzaba a compartir en redes consejos de belleza, dietas y tratamientos detox basados en el veganismo.

Desde su plataforma y sus perfiles en Instagram y Youtube, Rawvana mostraba al mundo una imagen perfecta de vida saludable y silueta esbelta. "Siéntete increíble y te verás increíble"  dice en su página web, animando al mundo a seguir su estilo de vida.

Un estilo de vida ciertamente extremo, no solo se trata de vetar todo derivado animal, muchas de sus recetas están basadas en platos crudiveganos (es decir productos sin cocinar) y entre sus planes de desintoxicación y adelgazamiento se incluía un ayuno de agua de 25 días. El vídeo contando la experiencia en Youtube acumula más de un millón de visitas.

Una imagen idílica que contaba cada vez con más seguidores dispuestos a alcanzar la felicidad que parecía desprender Rawvana. Para ayudarles la joven influencer no dudaba en poner a su disposición programas con los que introducirse en su modo de vida saludable. Por 39 dólares puedes empezar a renovarte, por 99,99 dólares adquirir el kit de transformación que promete hacerte perder al menos 5 kilos gracias a su plan de 21 días de dieta crudivegana.

Leer más: Nace el primer curso de formación de influencers en España

Pero todo este idílico escenario se ha venido a bajo de la mano de otra influencer de belleza. El imperio de Rawvana se ha desplomado junto a su credibilidad cuando Paula Galindo, conocida en redes como Pautips y experta en belleza, publicaba en su cuenta de Instagram un vídeo donde se mostraba a Rawvana junto a un plato de pescado. Si el vídeo fue publicado a traición o no es algo que por el momento se desconoce, aunque Galindo posteriormente ha afirmado que se trató de un descuido.

Cierto o no lo que el "inocente vídeo" muestra es a ambas influencers en un restaurante durante un viaje a la isla de Bali. En las imágenes  Pautips graba a Rawvana junto a su plato que contiene un filete de pescado y que la influencer vegana trata con poco disimulo de ocultar.

Como era de esperar, la noticia hacía temblar las redes sociales con numerosos seguidores Rawvana decepcionados y dispuestos a dejar de seguir a la estrella del veganismo por su falta de honestidad.

Tras la publicación del vídeo, la influencer decidía hacer público otro vídeo en el que explica por qué estaba consumiendo alimentos derivados de animales.

El vídeo titulado Lo que está pasando y  publicado en castellano y en inglés, muestra a Rawvana dando explicaciones durante 30 minutos. En él la influencer, que continúa vendiendo paquetes crudiveganos en sus redes, afirma lamentar la forma en que el público ha tenido que enterarse de su cambio de alimentación.

Un cambio de dieta derivado, según su testimonio, de los problemas de salud que padece –desde la retirada de la regla, problemas de tiroides, anemia e incluso un exceso de bacterias en el intestino– y que llevaban a Rawvana a comenzar a ingerir proteínas animales por consejo médico. Posteriormente la influencer ofrecía una entrevista en el canal mexicano Univisión donde aseguraba que todos esos problemas de salud no tenían que ver con su veganismo.

El boom de los gurús alimenticios en redes sociales

No hay sector que no haya sido publicitado por un influencer. Marcas de entretenimiento, de tecnología, de decoración y por supuesto de moda y belleza se han rendido al poder que parecen ostentar actualmente los perfiles más seguidos en redes sociales.

Los influencers son las nuevas Top Model, que en los años 90 traspasaban las pasarelas para inundar, y transformar, la publicidad. Pero lo cierto es que de las marcas han pasado a vender incluso estilos de vida, proponiendo a sus seguidores ejercicios, tratamiento y dietas saludables que el resto de los mortales parecemos dispuestos a seguir con tal de obtener un poco de ese brillo y glamour que ostentan en sus vídeos e imágenes. El peligro es que, como era de esperar, no es oro todo lo que reluce y cierto todo lo que venden.

Lo sucedido con Rawvana vuelve a poner en debate el peligro que acarrea dejar en manos de las redes sociales elementos tan importantes para la salud como lo es nuestra dieta.  El problema es que como indican los expertos, en muchos de estos casos lo que realmente se sigue es un culto al cuerpo más que a la salud.

Leer más: La inversión en influencers se disparará hasta un 400% en 2018 en España, según una agencia especializada

En este sentido como ya advertía el preparador físico y profesor de la Universidad Internacional de la Rioja , Jorge García Bastida, en un artículo para La Vanguardia, los usuarios deberíamos ser conscientes de que en estos casos"la mayoría de las personas de éxito en las redes sociales que promueven la práctica de ejercicio físico ya gozaban de buena salud y de un buen tipo antes de abrirse una cuenta”. Lo importante es darse cuenta, como advierte Bastida, que pesar de ser buenos animadores incentivando, si "sus lecciones no se basan en el conocimiento científico aprobado, sus pautas son más peligrosas que estimulantes".

En línea con esto, un estudio de 2016 publicado en la revista International Journal of Eating Disorders analizaba el impacto en mujeres de entre 18 y 48 años que subían imágenes relacionadas con el fitness a Instagram respecto de aquellas que lo hacían con fotos de viajes. Las conclusiones mostraban que aunque ambos grupos eran proclives al ejercicio compulsivo y a los trastornos alimenticios, en el caso de las mujeres que subían imágenes etiquetadas con temas relacionados con el deporte, el riesgo de padecer anorexia o bulimia se multiplicaba por cuatro.

La radicalización que promueven las redes, desde la alimentación a la violencia o las posturas políticas comienza a ser materia de debate, impulsado ahora por el fenómeno de las fake news, desdeplataformas como Facebook o YouTube.

Leer más: Hay influencers en Instagram promocionando gafas bloqueadoras de luz azul, pero no hay evidencia científica de que funcionen

Así lo ponía de manifiesto la socióloga especializada en tecnologías, Zeynep Tufekci, en un artículo publicado el pasado año porThe New York Times . En este Tufecki ya advertía de los riesgos que plataformas de vídeo como YouTube están conllevando en la sociedad, al radicalizar a las personas hacia posturas extremas. Una práctica motivada por las visualizaciones que estos vídeos suelen generar.

"Parece como si nunca fueras lo suficientemente "duro" para el algoritmo de recomendación de YouTube" escribía Tufekci.

Y así ha sido para Rawvana. Lo que debería llevar al resto de sus seguidores a pensar que quizá no era necesario tal extremismo.

Descubre más sobre , autor/a de este artículo.

Conoce cómo trabajamos en Business Insider.