Así responde el dueño de este bar a las reseñas negativas que deja su clientela en Google: "Hay una sala al fondo donde torturamos a la gente"

Las reseñas online son una forma rápida de conocer lo que opinan otros clientes sobre diversos restaurantes, gimnasios, discotecas, hoteles, etc. Cada vez son más las personas que buscan estos comentarios antes de decidirse por un sitio.

Es habitual encontrar de vez en cuando malas reseñas de personas que han quedado insatisfechas con los servicios de un local. Algunas están escritas desde el más profundo enfado, otras desde el respeto con el objetivo de incitar cambios, pero muchas reseñas se hacen virales por las respuestas tan ingeniosas que reciben.

Varios clientes de El Chapataz, un club nocturno que ofrece cócteles en la capital, dejaron su descontento con el trato que recibieron al acudir una noche al local. Lo que probablemente no se esperaban eran las contestaciones que el propietario del bar ha dejado en la plataforma.

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"Cada día un garito más decadente, de esos que conservan su encanto porque cada vez que vas te acuerdas de por qué no quieres volver", ha escrito un cliente en las reseñas de Google.

El propietario del local no se ha quedado callado ante semejantes palabras y, con un poco de humor encima, le ha respondido: "Te queremos igualmente, Álvaro. Un día desayunamos en Pozuelo juntos".

Y este no ha sido el único caso de reseña negativa que ha recibido el local. Otro cliente descontento con el servicio ha puesto: "Doy una estrella porque no puedo dar cero. El Chapandaz me creó un poco de estrés postraumático a la hora de ir de fiesta".

Una vez más, el propietario volvió a sacar las garras para defender su local, y lo hizo con una respuesta que puede haber hecho reír a más de uno. "Hola Kim. Gracias por tu reseña. Nos encantan las reseñas que son constructivas. La tuya no lo es", ha respondido el dueño.

"Para empezar, la cola que se forma en la entrada es de más de una hora de espera... El portero alto y calvo trata a la gente como si le perdonara la vida", ha escrito otro cliente insatisfecho que se suma a la lista de personas que dejan su opinión en Google.

Este comentario tampoco se ha ganado el favor del propietario. "Hola, Sergio, además hay una sala al fondo donde torturamos a la gente que no se porta bien. La usamos también para todos los que nos ponen una estrella diciendo sandeces", ha defendido este utilizando el sarcasmo una vez más.