El truco definitivo para aprovechar el aguacate incluso cuando está muy maduro

Aguacate

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  • El aguacate se sitúa, últimamente, entre las piezas de fruta más populares, multiplicándose las recetas que lo incluyen como ingrediente. 
  • Uno de los problemas que entraña este alimento es que, una vez abierto, su duración se reduce considerablemente.
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El aguacate se ha situado como una de las piezas de fruta más populares en los últimos años. La cantidad de recetas que lo incluyen entre sus ingredientes no ha parado de crecer y, actualmente, parece un must en las tostadas del desayuno.

Según explica el periódico El Español, este fruto tropical es originario de México, Colombia y Venezuela y, las temperaturas cálidas que requiere para su correcto desarrollo, hace que no se cultive en exceso fuera de estas regiones. 

En España, la zona de mayor producción se sitúa en Málaga, en la comarca de Axarquía, aunque no deja de ser complementaria a la ingente importación que se produce desde Latinoamérica durante todo el año. 

Uno de los trucos que explica este medio para distinguir un aguacate maduro de uno que aún está verde es abrirlo por la mitad y observar el color del fruto. Si está de color marrón, está pasado, mientras que si la tonalidad es amarilla, está perfecto. 

Sin embargo, el mayor problema a la hora de abrir un aguacate es que este dura un periodo bastante limitado de tiempo. Si se quiere consumir más adelante, hay algunos consejos que se pueden seguir para evitar que se tiren a la basura y, por tanto, queden desaprovechados. 

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El Español recoge un truco que ha dado a conocer Too good to go, la aplicación que quiere evitar el desperdicio masivo de comida y pone en contacto a restaurantes o establecimientos alimenticios con usuarios para que estos puedan conseguir platos a precios menores y conseguir que no terminen en el contenedor. 

El truco mencionado consiste en triturar el fruto y añadir un poco de zumo de limón que, como antioxidante, permitirá ralentizar el proceso de ennegrecimiento del producto. Después, al congelador. 

Cuando se quiera reutilizar, bastará con descongelarlo 30 minutos antes a temperatura ambiente. La textura no será exactamente la misma, pero estará perfecto para utilizarlo en salsas como el guacamole. 

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