La próstata es una glándula masculina del tamaño aproximado de una nuez. Se encuentra debajo de la vejiga, produce líquido que forma parte del semen y puede verse afectadas por varias enfermedades. Entre ellas el cáncer.

A la sombra de órganos más famosos donde puede desarrollarse un tumor, como el colon, mama o los pulmones, muchas veces  sin embargo el cáncer de páncreas pasa desapercibido. A fin de cuentas "se encuentra entre los mejores de todos los cánceres" que se puede padecer. 

En parte se debe a que cuando se localiza en fase temprana tiene un buen pronóstico. A esto ha contribuido el uso generalizado de la determinación en sangre del PSA (Prostate Specific Antigen = Antígeno Prostático Específico). 

Consiste en una prueba que mide la presencia de antígenos específicos de la próstata en la sangre que pueden ser indicativos de cáncer.  Lo ideal es una puntuación inferior a 4, según el Instituto Estadounidense del Cáncer. Sin embargo, advierte también el centro, algunas personas con niveles de PSA inferiores a esos valores tienen cáncer de próstata y muchas con niveles de PSA más altos, entre 4 y 10 ng/ml, no. 

No obstante conocer la existencia de esta prueba es el camino para comprar si hay razones o no para alarmarse.

A medida que los hombres envejecen, la próstata puede agrandarse y bloquear la uretra o la vejiga, produciendo dificultad para orinar o problemas en la función sexual. Este problema se conoce como hiperplasia benigna de próstata y no conlleva riesgo alguno. De ahí que en una revisión pueda detectarse y considerarse "que para la edad está bien". 

Pero en algunos casos puede evolucionar a un tumor. Y contando con que este cáncer es más que silencioso en sus inicios, cabe tener en cuenta algunos datos para no subestimar la enfermedad. Y considerar las revisiones y pruebas llegada cierta edad.

Uno de cada 8 hombres lo padecerá

En España, el cáncer de próstata es el tumor más frecuente en hombres y la tercera causa de muerte por cáncer en varones, por detrás del cáncer de pulmón y de colon, informa la Sociedad Española de Oncología Médica. 

Se estima que 1 de cada 8 hombres será diagnosticado con esta enfermedad que en 2024 afectará a 30.316 hombres. La mayoría de los casos ocurren en edad avanzada, siendo el 90% de los pacientes mayores de 65 años.

Puede diseminarse silenciosamente a otras partes, como los huesos

La próstata pueden funcionar mal sin ningún síntoma obvio. El cáncer puede aparecer sin ser detectado y, con el tiempo expandirse a otras zonas del cuerpo, con una predilección por los huesos. 

La tasa de supervivencia relativa a 5 años — la probabilidad de sobrevivir a los 5 años del diagnóstico —para la mayoría de las personas con cáncer de próstata local es casi del 100%. Para las personas diagnosticadas con cáncer de próstata que se ha diseminado a otras partes del cuerpo, esta se reduce al 32%.

Síntomas que tienden a pasarse por alto

 Ed Manning, directivo de medios y sobreviviente de cáncer de próstata relata cómo fue su diagnóstico. Tras revisiones de próstata en la que todo parecía ir bien cambios en sus orina le llevaron a preguntar al médico, animado por su pareja.

“Los cambios en la forma de orinar es algo que debería haberle dicho a su médico anterior. ¿Por qué no lo hiciste? preguntó mi médico, añadiendo una reprimenda al final de sus malas noticias", escribe en CNN." '¿Y por qué no te hiciste una prueba de PSA antes? Podrías haberlo detectado temprano'”.

Levantarte constantemente por la noche para orinar puede esconder diabetes o una vejiga hiperoactiva. En el peor de los casos podría ser un signo de cáncer de próstata. Otros cambios en los hábitos urinarios relacionados con este tumor incluyen

• Una necesidad más urgente de orinar.
• Dificultad para empezar a orinar, aunque sienta la necesidad de hacerlo.
• Necesidad de esforzarse para orinar
• Un goteo débil al orinar.
• Luchar por vaciar completamente la vejiga al ir al baño
• Sangre en la orina o el semen.

“Es importante que los hombres que luchan contra un problema de dolor, de orina tardía o frecuente consulten a su médico de cabecera lo antes posible", aconsejó Caroline Moore, uróloga consultora en el Hospital King Edward VI.

"Si bien los médicos me aseguran que 'probablemente moriré de otra cosa' desearía que además del superficial 'se ve bien' que había escuchado a lo largo de los años, me hubieran brindado detalles destacados sobre mi próstata, señales de advertencia y opciones de pruebas", reconoce Manning.

"Si bien es demasiado tarde para detectar mi propio cáncer a tiempo, animo a cualquier persona que tenga próstata o a cualquiera que ame a una persona que la tenga a que hable con un médico. Conozca las opciones de pruebas y la importancia de la nutrición y mantenerse activo. Comprenda los síntomas de advertencia".