Este ensayo actualizado se basa en una conversación con William J. Kole, autor de The Big 100: The New World of Super-Aging (algo como Los grandes 100: el nuevo mundo del superenvejecimiento). Ha sido editado para mayor extensión y claridad.

La vida de mi abuela transcurrió en 3 siglos. Nació en 1899 y murió en 2003, poco antes de cumplir 104 años. Contó historias sobre los cambios que presenció y que me hacían temblar las rodillas. Por ejemplo, uno de sus primeros trabajos fue tocar el piano en películas mudas y, sin embargo, murió en la era de las proyecciones caseras y las películas en 3D.

Mi abuela despertó mi fascinación por la longevidad extrema. Mi curiosidad avanzó cuando trabajé para The Associated Press en París. Allí informé sobre Jeanne Calment, que vivió 122 años y 164 días, la esperanza de vida más larga documentada en la historia. Justo antes de cumplir 121 años, Calment lanzó un álbum de rap. El título se tradujo como La amante del tiempo.

Mi madre tiene 93 años y todavía vive sola en la casa en la que crecí, pero mi padre murió a los 67 años y mi hermano murió a los 59. Tengo 63, lo que significa que podría haber pasado de la media  según los estándares familiares o tener un pie en la tumba. Esa es parte de la razón por la que me propuse aprender todo lo que pudiera sobre las personas que viven hasta los 100 años o más, y cómo cambiará nuestra sociedad a medida que más y más personas alcancen los 3 dígitos. Con mis hallazgos escribí mi libro The Big 100: The New World of Super-Aging.

Esto es lo que descubrí.

Una mentalidad positiva ayuda mucho

A menudo pensamos que el ejercicio y una dieta saludable son las únicas formas comprobadas de aumentar la longevidad, por lo que me sorprendió saber que la mentalidad juega un papel muy importante. 

Un estudio encontró que las personas con una mentalidad positiva sobre el proceso de envejecimiento vivían aproximadamente 7 años y medio más que las personas con percepciones menos positivas del proceso. 

Otra investigación de 2022 también mostró que las personas que estaban satisfechas con el envejecimiento tenían un riesgo reducido de depresión y mortalidad. Tendemos a pensar que el cuerpo y la mente están separados, pero no es así.

Reducir el estrés puede ayudarte a vivir más tiempo

Me sorprendió el efecto del estrés crónico en la duración de la vida. Las investigaciones muestran que el estrés tóxico puede afectar a cada célula del cuerpo y acelerar el proceso de envejecimiento. 

Después de enterarme de eso, me inspiré para dejar mi trabajo en el ciclo de noticias 24 horas al día, 7 días a la semana y dedicarme a escribir libros, un ritmo de trabajo mucho más relajado.

La fe también puede hacerte vivir más

Un estudio encontró que las personas que practican una fe religiosa viven unos 4 años más que las que no la practican. No importa qué religión sigas. Los investigadores de la longevidad dicen que el aspecto social de asistir a servicios religiosos ayuda a aumentar la esperanza de vida.

La vida en pareja puede ser difícil, pero también podría aumentar la esperanza de vida

Cualquier cómico sabe que las frustraciones del matrimonio son buenas para reírse un poco. Si bien cualquier relación a largo plazo tiene altibajos, tener una pareja puede ayudarte a vivir más tiempo. Un estudio encontró que entre los hombres de 65 y 85 años, los que estaban casados vivían 2 años más de media que los solteros.

La longevidad no es equitativa

Hay mucho que puedes hacer como individuo para mejorar la longevidad. La sociedad también tendrá que realizar cambios sistémicos para mejorar la esperanza de vida de las personas de todas las razas y clases. 

Por ejemplo, el impacto del estrés crónico podría ayudar a explicar uno de los hallazgos más preocupantes de un análisis de 2023 sobre las disparidades raciales relacionadas con la salud. Los estadounidenses de raza negra, de media, mueren 6 años antes que sus homólogos blancos. Es mucha vida la que se están perdiendo. Además, pertenecer a un nivel socioeconómico más alto también se asocia con una esperanza de vida más larga.

Necesitamos comenzar a planificar una vida más larga

Se prevé que el número de personas que vivirán hasta los 100 años o más se multiplicará por 8 para 2050. La mitad de los niños de 5 años de hoy vivirán hasta los 100. Esto plantea una serie de preguntas sobre educación, discriminación por edad y economía: ¿Cómo ganaremos suficiente para pagar las facturas de un siglo?

Lo bueno es que nuestra esperanza de vida cada vez mayor significa que tendremos años extra (tal vez décadas) para crear y amar. Eso podría ser algo hermoso.