Las 9 formas más inteligentes de invertir en inteligencia artificial ahora mismo, según Bank of America, Morgan Stanley y UBS

Algunas personas en Wall Street temen que los inversores se estén dejando llevar por la exageración en torno a la inteligencia artificial, pero tres de las principales firmas de inversión confían cada vez más en que la IA esté a la altura de sus elevadas expectativas.

Bank of America, Morgan Stanley y UBS son más optimistas respecto a los valores de IA después de que cada una de ellas expresara sus dudas a principios de año, cuando las acciones de las empresas vinculadas a la tecnología se dispararon. En notas separadas de finales de julio, las empresas han explicado por qué ahora se sienten más cómodas con la inteligencia artificial.

"No creemos que la IA sea una burbuja, dados los claros casos de uso y la sólida visibilidad a largo plazo", escribe Solita Marcelli, directora de inversiones para América de la división de gestión de patrimonios globales de UBS, en una nota del 25 de julio.

Ese voto de confianza se produce exactamente dos meses después de que Art Cashin, colega de Marcelli, comparara el crecimiento de la IA con una "miniversión" de la burbuja de las puntocom.

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Sin embargo, UBS espera ahora que la demanda mundial de IA se multiplique por más de diez, pasando de 28.000 millones de dólares (unos 25.500 millones de euros, al cambio actual) en 2022 a 300.000 millones (273.500 millones de euros) en 2027, según Marcelli. 

Aunque en un principio la empresa preveía que la tasa de crecimiento anual compuesto de la demanda de IA aumentaría un 20% entre 2020 y 2025, UBS proyecta ahora una explosiva tasa de crecimiento anual compuesto del 61% entre 2022 y 2027.

Bank of America es aún más optimista sobre la IA y predijo en marzo que la tecnología sería un mercado global de 900.000 millones de dólares (más de 820.000 millones de euros) en 2026. 

Pero, al igual que UBS, no todo el mundo cree en ella. El jefe de estrategia de inversión de Bank of America, Michael Hartnett, afirmó en mayo que la IA estaba en una "burbuja infantil", aunque gran parte de su preocupación se centraba en las subidas de los tipos de interés, que deberían terminar pronto.

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Por el contrario, Morgan Stanley ha descartado que las acciones de inteligencia artificial se encuentren en una burbuja.

"Inevitablemente, el mercado comparará la IA con el boom de las puntocom", escribe Shawn Kim, analista de Morgan Stanley, en un informe de julio. 

"Sin embargo, las principales empresas de IA de hoy están bien establecidas con buenas características de flujo de caja (en su mayor parte), a diferencia de muchas de las empresas más pequeñas aniquiladas durante el colapso de las puntocom, que carecían de un caso de negocio viable", añade.

En cambio, la cautela de la empresa sobre la inteligencia artificial estaba relacionada con su influencia a corto plazo en los beneficios, especialmente si el crecimiento económico se ralentizaba. Aunque la inversión en IA está aumentando, una encuesta de Morgan Stanley revela que solo el 4% de los directores de información afirman estar gastando mucho dinero en nuevos proyectos de IA generativa.

"Aunque compartimos ese entusiasmo, también creemos que es prematuro extrapolar tales beneficios a toda la economía y a los beneficios de las empresas para este año, sobre todo teniendo en cuenta que aún nos enfrentamos a un riesgo creciente de vientos en contra cíclicos, ya que los datos sugieren que el ciclo económico corre cada vez más riesgo de desaceleración", escribe Mike Wilson, jefe de estrategia de renta variable estadounidense de Morgan Stanley, en una nota del 24 de julio.

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Los inversores que también estén convencidos de que la IA es mucho más que una moda pasajera deberían considerar nueve inversiones señaladas por Bank of America, Morgan Stanley y UBS en sus notas recientes.

Bank of America enumera seis empresas relacionadas con los semiconductores que serán las principales beneficiarias de la IA: Nvidia (NVDA), Marvell Technology (MRVL), Broadcom (AVGO), Synopsys (SNPS), Cadence Design Systems (CDNS) y Camtek (CAMT).

Sin embargo, la empresa afirma que el aumento de las inversiones en IA podría simplemente compensar el descenso del gasto en informática tradicional. Se espera que el gasto de capital en computación en nube caiga por debajo del 10% anual hasta 2024, según Bank of America. En este sentido, los gigantes tecnológicos Alphabet y Meta Platforms informaron cada uno de un gasto de capital inferior al previsto el pasado trimestre.

"Seguimos viendo beneficios para los semiconductores a medida que aumenta la inversión en IA, pero será prudente que los hiperescaladores muestren la rentabilidad de los proyectos de IA, lo que podría conducir a patrones cautelosos de gasto de capital en centros de datos", apuntaban el pasado jueves en una nota los analistas de investigación dirigidos por Vivek Arya.

Entre las acciones de IA seleccionadas por Bank of America, destaca claramente Nvidia, que es el valor de mayor rendimiento del S&P 500 este año. El fabricante de chips californiano (EEUU) está a la vanguardia del auge y tiene alianzas con empresas como ServiceNow, Accenture, Snowflake y Microsoft.

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Tanto Nvidia como Microsoft (MSFT) son destacadas por Morgan Stanley como las "claras ganadoras" de la revolución de la IA. 

El gigante del software ha sido uno de los primeros inversores en OpenAI, pionero en este ámbito gracias a herramientas revolucionarias como ChatGPT y el generador de imágenes DALL-E. Microsoft aprovecha ahora esa relación para integrar funciones de IA en productos de software como Microsoft Office.

En cuanto a los fabricantes de chips, Morgan Stanley coincide con Bank of America en que el camino a seguir está bifurcado. Según Wilson, aunque la demanda de chips de inteligencia artificial es alta, solo está sustituyendo parcialmente la fuerte caída de las ventas de chips no relacionados con la inteligencia artificial en la empresa líder Taiwan Semiconductor Manufacturing Co.

Las empresas centradas en el consumidor pueden disfrutar de ahorros significativos en los costes laborales con la IA y la automatización, aunque Wilson cree que puede ser demasiado pronto para comprar empresas únicamente por esa razón, explica. Del mismo modo, la adopción de la IA en las empresas está en su infancia y puede que no se traduzca en ingresos hasta el próximo año.

UBS también recomienda adoptar un enfoque selectivo a la hora de invertir en IA tras el enorme repunte de este año. "Dadas las elevadas valoraciones, estamos esperando un retroceso para volver a ser positivos en este segmento", señala Marcelli.

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Sin embargo, la compañía observa ventajas en las empresas de ciclo medio, entre las que se incluyen las empresas de internet y las del sector del software, y excluye a los fabricantes de hardware, como las empresas de semiconductores.

"Esperamos que el mercado de la IA se amplíe desde el estrato de los semiconductores y las infraestructuras centradas en el hardware al estrato del software, las aplicaciones basadas en internet y los modelos de datos", escribe Marcelli.

Mientras que las acciones de infraestructura de inteligencia artificial ya tienen un fuerte crecimiento descontado, UBS cree que las empresas de software tienen una atractiva relación riesgo-recompensa a medida que se dispara la demanda de IA y continúa su integración en los productos cotidianos.

De hecho, UBS ha predicho que el segmento de aplicaciones de IA y modelos de datos aportaría 170.000 millones de dólares (155.000 millones de euros) en 2027, frente a los 130.000 millones (cerca de 120.000 millones de euros) de su homólogo de infraestructura de hardware. Para ponerse al día, el sector tendrá que crecer a un ritmo anual más de tres veces superior, lo que impulsará las acciones vinculadas a él.