Calviño es elegida nueva presidenta del BEI y abandonará el Ministerio de Economía

La vicepresidenta primera y ministra de Economía, Nadia Calviño, ha logrado este viernes los apoyos necesarios para ser la nueva presidenta del Banco Europeo de Inversiones (BEI). Pero su marcha al BEI abre un auténtico roto en el Gobierno, ya que deberá abandonar el Ministerio de Economía en un momento crucial.

Calviño ha sido elegida hoy por los ministros de Finanzas europeos en el Consejo de Asuntos Económicos y Financieros (Ecofin). El mismo Consejo en el que se esperaba llegaran a un Pacto sobre las reglas fiscales. Un acuerdo que, finalmente, se ha visto aplazado hasta la próxima cumbre, a mediados de mes.

"El apoyo de los ministros de finanzas a nuestra candidatura es una muy buena noticia", ha destacado  Calviño, tras conocerse la noticia. 

La titular de Economía se convertirá en la primera mujer que ostenta este cargo en el principal banco público de la UE, que se creó en 1958. La elección ha sido un proceso bastante más largo de lo esperado en un principio (Calviño hizo públicas sus aspiraciones en agosto, hace ya 4 meses) y, aunque había llegado como gran favorita a la última reunión del Ecofin, la decisión de Francia se ha hecho esperar.

Calviño, que sucederá a Werner Hoyer durante los próximos seis años, se disputaba el puesto con la danesa Margrethe Vestager, la polaca Teresa Czerwinska, el italiano Daniele Franco y el sueco Thomas Östros.

El candidato ganador debía reunir el apoyo del 68% del capital del banco y de al menos 18 Estados miembro. La participación de cada país depende de su peso económico en la UE (España contribuye con el 9,66% del PIB), por lo que el apoyo de las principales potencias económicas es necesario. 

El BEI, ha explicado Calviño, "es el brazo de la UE para financiar políticas europeas que tendrán un papel aún más importante en el futuro para financiar la transición verde, la reconstrucción de Ucrania, o para reforzar el papel de Europa en el mundo".

Como presidenta del BEI, Calviño percibirá el mismo salario mensual que el presidente de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen: 375.000 euros anuales.

El hueco que deja Calviño

Con su marcha al BEI, Calviño tendrá que abandonar el ministerio de Economía, dejando así un auténtico roto en el Gobierno en un momento crucial. No será fácil encontrar un relevo a la altura de los desafíos económicos que se vienen, con la gestión de los fondos europeos o el retorno de las reglas fiscales europeas. 

Por el momento, se especula sobre quién podría sustituir a Calviño, aunque muchas voces asumen que la cartera de Escrivá al frente de Transformación Digital se reunificará con Economía. Sin duda, no será algo fácil ahora que España tiene grandes retos por delante, como el de elaborar un plan fiscal de ingresos y gastos creíble a medio y largo plazo. 

Con una deuda en el 111,2% del PIB y un déficit que supera el 3,5%, la economía española será una de las que más ajuste tendrá que aplicar para ceñirse a los deberes fiscales de Bruselas, sean cuales sean (todavía se están negociando). Ahora mismo, el impulso de los fondos europeos puede amortiguar la magnitud del ajuste, pero no es más que un espejismo temporal. 

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Sin acuerdo sobre las reglas fiscales europeas

Calviño, que se reunía anoche con los ministros de Economía y Finanzas de la Unión Europea en el Consejo de Asuntos Económicos y Financieros (Ecofin), ha descartado poder cerrar este viernes la reforma de las reglas fiscales de la UE.

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A las 3 de la mañana, después de 8 horas de intenso debate, el Ecofin optó por darse un descanso. Fuentes diplomáticas aseguran que se ha avanzado "bastante" y que el acuerdo está "cerca", según informa Europa Press, pero no está claro que ese cerca vaya a ser hoy, y podría incluso haber una reunión extraordinaria antes de que acabe el año.