Los candidatos deben hacer preguntas en las entrevistas de trabajo (pero hasta un límite)

Una entrevista de trabajo sirve para que los reclutadores ahonden en los candidatos con el fin de ver si encajan con el perfil que busca cubrir la empresa. Durante este proceso es normal que se hagan preguntas sobre la experiencia, los estudios y los valores del entrevistado.

Y aunque como candidato previamente hayas tenido que practicar sus respuestas, también tienes otras tareas previas que hacer, como conocer en profundidad la oferta de empleo a la que estás aplicando. Probablemente en esa fase de análisis te salten ciertas dudas que tendrás que preguntar en la entrevista.

"Es válido y necesario que como candidato hagas preguntas inteligentes para que todo esté bien sobre la mesa", ha dicho Gerardo Macías, socio de DHR Global, según ha recogido El Economista. "Eso ayuda a que, en lugar de ser una entrevista en la que sólo te preguntan y tú respondes, se vuelva una conversación donde se empiecen a conocer".

Por ejemplo, una pregunta brillante que puedes hacer durante la entrevista es: '¿Qué tendría que hacer un nuevo empleado para sorprenderte?' De esta manera mostrarás desde ambición por conseguir el puesto hasta interés por adaptarte a la empresa. Obviamente pregunta cosas que no aparezcan en la oferta ya explicadas porque sino el efecto será el contrario.

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Lo que debes preguntar en una entrevista

No vale cualquier cosa. Las preguntas que hagas mostrarán a la empresa un poco más sobre ti. Hay cuestiones que son básicas, te dejarán en una buena posición y tienen como objetivo conocer más sobre el funcionamiento de la empresa. Es mejor guiar las preguntas a cosas que no puedas acceder: cómo es un día normal trabajando, cómo es la vacante o qué se siente al trabajar ahí.

Para mostrar tu intención de crecer en ese lugar puedes hacer preguntas relacionadas con el rendimiento, los logros que puedes alcanzar o las posibilidades de ascender profesionalmente. Quieres que el reclutador que te entrevista se lleve una imagen positiva de ti hasta el punto de querer ficharte.

Las respuestas que puedan darte son también muy importantes porque te ayudarán a conocer hasta qué punto compartes los valores de la empresa a la que aspiras entrar. De hecho, podría darse el caso de que las expectativas de esa oportunidad no sean lo que esperabas y debas rechazar continuar.

Sobre el momento perfecto para hacer estas preguntas, los expertos aconsejan hacerlas al final, ya que de esta manera no interrumpes al reclutador. Normalmente en estos procesos se suele dejar un tiempo antes de terminar para que el candidato haga las preguntas pertinentes con intención de resolver sus dudas.

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