La variante británica del coronavirus puede ser hasta un 70% más letal que la cepa original, según apuntan fuentes científicas

La variante del coronavirus que se originó en el Reino Unido podría ser más letal que la cepa original, según una nueva investigación publicada el pasado viernes por científicos del gobierno británico.

En dicho informe, los investigadores estimaron que la cepa, conocida como B.1.1.7, podría ser entre un 30% y un 70% más letal que el virus original.

Los estudios previos ya habían demostraron que la cepa británica es más transmisible, a los que se sumaron las palabras del primer ministro Boris Johnson, que anunció el mes pasado que también podría estar "asociada con un mayor grado de mortalidad".

La investigación confirmó esa preocupación, aunque los investigadores puntualizaron que aún sería necesario realizar más estudios. 

Esta variante, considerada la más contagiosa, ha estado circulando por todo el mundo. Según The New York Times,se ha detectado, al menos, en 82 países. 

De hecho, un estudio publicado a principios de mes señaló que esta cepa se estaba extendiendo tan rápido por Estados Unidos que el recuento de casos relacionados con ella se duplicaba casi cada 10 días. 

Cuántas cepas diferentes de coronavirus hay circulando por España

"Estos hallazgos demuestran que la B.1.1.7 probablemente se convertirá en la variante dominante en muchos estados de EEUU para marzo de 2021, lo que provocará aumentos repentinos del COVID-19 en el país, a menos que se implementen de inmediato esfuerzos urgentes de mitigación", advirtió el documento.

Asimismo, el estudio también señaló que la variante del Reino Unido es entre un 35% y un 45% más transmisible que otras cepas que se propagan en territorio estadounidense. Los científicos han expresado su preocupación relacionada con que pudiese desarrollar una mutación que evadiese las vacunas.

Aún no está claro por qué la variante del Reino Unido podría tener una tasa de mortalidad más alta. Los investigadores han explicado que una posible razón es que las personas que se infectan con ella podrían tener una carga viral más alta, lo que está relacionado con un COVID-19 más grave.