Las increíbles copias de China que son difíciles de distinguir de los originales: desde móviles, hasta ciudades

Las copias de objetos de marca de lujo —como la ropa o las joyas—, dispositivos, e incluso coches, a veces, son difíciles de distinguir de los originales.

Pero elevar eso a replicar monumentos, atracciones turísticas e incluso ciudades, es otro nivel.

En China, un país que tiene más de 1.390 millones de habitantes repartidos en 22 provincias, te encontrarás mínimo 10 ciudades que son una copia fiel a rincones inconfundibles del mundo: desde la Torre Eiffel hasta el Golden Gate Bridge. Incluida una réplica de la Gran Muralla China a 1.500 kilómetros de la original. 

"Por lo general, si quieres ver edificios extranjeros, tienes que ir al extranjero. Pero si los importamos a China, las personas pueden ahorrar dinero mientras experimentan una arquitectura de estilo extranjero", explicaba a BBC una residente, Zhang Li. 

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De hecho, en 2011 estaban levantando una ciudad española en Shanghái que tenía que tener todos los edificios tejas rojas —referencia arquitectónica de España para China—, según una entrevista a Javier Pioz, miembro del estudio de arquitectura Cervera&Pioz, responsables de su construcción.

Esta formaba parte de un proyecto conocido como: One City, Nine Towns —Una ciudad, nueve pueblos en su traducción al castellano—. Sin embargo, la gran mayoría de ellas se acabaron convirtiendo en pueblos fantasmas.

No obstante, algunos dispositivos sí que han sido un auténtico éxito en el mundo entero, no sólo en China. Y, al menos en las imágenes, algunos son indiscutiblemente parecidos a los originales. 

Tianducheng, la réplica de París en China, con una Torre Eiffel de casi 108 metros de altura, esperaba albergar 10.000 residentes y ahora está prácticamente vacía

Lo mismo sucedió con North Europe Town, inspirada en Suecia, que actualmente ha quedado sólo como un pueblo fantasma

Pero lo mejor es que existe una réplica de la Gran Muralla China dentro de China

A1.500 kilómetros de la Gran Muralla China se encuentra su réplica en la ciudad Nanchang, en la provincia oriental de Jiangxi, de 4 kilómetros de largo, recoge South China Morning Post.

Algo que sólo se explica entendiendo su apreciación por algunas imitaciones. 

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Según Bianca Bosker, autora de Original Copies: Architectural Mimicry in Contemporary China, el país tiene una cultura hacia la copia diferente a la del mundo occidental. 

"La cultura de la copia en China es muy diferente de la que encontramos en Occidente, donde existe la sensación de que copiar es algo increíblemente tabú y debe evitarse a toda costa", explica a BBC, añadiendo que lo ven como una forma de dominio.

Sin embargo, el éxito sí que ha quedado para aquellos objetos cotidianos que se confunden con facilidad con los originales. Por ejemplo, el Clon iPhone XS Max

Según Smmart, la copia china del iPhone XS, conocido como Goophone XS Max cuesta unos 130 euros al cambio. Y, como puedes observar en la imagen —compartida por una usuaria de Flickr—, las diferencias son prácticamente imperceptibles. 

O bien el modelo Youxia X frente al Tesla Model S

El coche de la derecha, es un Youxia X, de la compañía china Youxia Motors que, como podrás imaginar, no tiene ningún vínculo con la de Elon Musk. Si bien tampoco comparten la misma tecnología o características técnicas, es bastante parecido al Tesla Model S.

Mientras, otras imitaciones han sido fruto de una sustitución de productos como Goojje, que apareció justo cuando Google anunció que abandonaba China

Fuente: BBC

O Renren, en su traducción al castellano, el 'Facebook chino'. Antes era conocido como Xiaonei Network —red en el campus—, ya que era muy popular entre los estudiantes universitarios

Fuente: Forbes