Los problemas de sueño son devastadores. No dormir lo suficiente está asociado con un mayor riesgo de padecer ciertos tipos de cáncer, daños en el corazón, en la piel, la memoria o la salud mental. 

Dormir mal también puede resultar muy peligroso si tienes que utilizar el coche habitualmente. Estar al volante sin haber descansado lo suficiente es un riesgo para ti y para el resto de ocupantes de la vía, ya que se relaciona con un aumento en las opciones de sufrir un accidente de tráfico.

La apnea de sueño es uno de los achaques más comunes en este sentido, y perjudica el descanso aunque aquel que la padece no se percate. Además, según explica la Dirección General de Tráfico (DGT) este tipo de problemas han aumentado un 30% por la pandemia de coronavirus, debido al aumento de los niveles de ansiedad y depresión. 

No hay que perder estos datos de vista, ya que la DGT también señala que los conductores con apnea del sueño tienen 6,3 veces más posibilidades de sufrir un accidente: sus efectos son similares a los del alcohol. 

La apnea se caracteriza por episodios de dejar de respirar durante el sueño, ronquidos más fuertes de lo normal, jadeos o dolor de cabeza por la mañana. Si al despertar sueles notar un cansancio excesivo es posible que padezcas apnea. 

Este último motivo es el que convierte a la apnea de sueño en un peligroso acompañante al conducir. Si duermes poco y mal los reflejos se reducen y la capacidad se resiente, haciendo que no se responda correctamente a los estímulos que se presentan en carretera y causando fallos al volante que pueden ser fatales.

Según la DGT, la apnea es muy preocupante en los conductores profesionales, quienes trabajan en turnos muy prolongados y en aquellos que duermen menos de 6 horas al día. 

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Las personas que sufren apnea del sueño deben ponerse en manos de un profesional médico. En ocasiones las causas no son fáciles de identificar, por lo que se hace necesario visitar a profesionales de diferentes especialidades hasta recibir un tratamiento por parte de la Unidad de Sueño. 

En la Directiva Europea que regula las aptitudes psicofísicas de los conductores para obtener o prorrogar el permiso de conducción se hace referencia a la apnea. De hecho, las personas que sufren este trastorno deben presentar un informe de la Unidad del Sueño que les trata, en el que se detalle que la enfermedad está controlada y el tratamiento que siguen. 

En el caso de que todo resulte positivo se les renueve el permiso por un año si son conductores profesionales, y por 3 años a los que no lo son.