Santander revisará su plan estratégico por el coronavirus y calcula que la supresión del dividendo le dará 90.000 millones de colchón para afrontar la crisis

Santander revisará su plan estratégico para analizar el impacto de la crisis del coronavirus sobre la entidad. Ana Botín, presidenta de Santander, ha apuntado que estamos ante una "crisis sanitaria global que está derivando en una crisis económica y social sin precedentes". Lo ha dicho en la junta de accionistas de la entidad, que por primera vez se realiza de forma telemática por la crisis del COVID-19. 

La clave será cuánto durará esta crisis para poder medir el impacto final. Botín ha señalado que es "demasiado pronto para entender y cuantificar cuál será el impacto total" en las economías donde funciona el grupo. Aunque sí que ha apuntado que el corto plazo será "muy relevante". 

Esta incertidumbre es la que lleva a la entidad a revisar los objetivos que se había marcado Santander para los próximos meses. "Dada la incertidumbre y la falta de visibilidad que existe sobre la evolución de las economías en el corto plazo, revisaremos nuestros objetivos a medio plazo una vez se estabilice la situación", ha dicho Botín. 

El plan estratégico presentado el año pasado recogía un objetivo de retorno sobre el capital tangible (RoTE) ordinario de entre el 13% al 15% a medio plazo. Además, se fijó la meta de mejorar su ratio de eficiencia hasta la horquilla de entre el 42% y el 45%, mantener una ratio de capital CET1 fully loaded de entre el 11% y el 12% y aumentar el payout hasta el 40% y el 50%. 

La supresión del dividendo: 90.000 millones más para crédito 

Otra de las medidas que ha tomado la entidad para hacer frente a la crisis del coronavirus es la supresión del segundo dividendo de 2019 y el de 2020. Estaba previsto que en esta junta de accionistas se diera luz verde a la aprobación de una retribución al accionista de 0,13 euros por acción. Sin embargo, Santander ha decidido suspenderlo siguiendo las recomendaciones del Banco Central Europeo. 

“Soy consciente de que, para muchos miles de personas que valoran de manera especial el dividendo, esto no es una buena noticia y puede suponer mayor presión financiera en un momento ya de por sí malo. El consejo y yo misma tenemos que considerar, al tomar este tipo de decisiones, el interés general de todos los accionistas, pero también de la sociedad en su conjunto, y actuar velando por la sostenibilidad del grupo y las indicaciones del supervisor”, ha explicado.

La cancelación del dividendo complementario de 2019 permitirá al banco contar con 1.600 millones de euros de capital, con los que podrá ofrecer 30.000 millones de euros más en créditos a empresas, pymes y familias.

Además, la supresión de dividendos 2020 le sirve para poder contar con otros 60.000 millones de euros adicionales, lo que en total suma 90.000 millones de euros de colchón adicional disponible para que la entidad pudiera hacer frente a la crisis del coronavirus y pudiera dar créditos. 

Una respuesta global y coordinada

La presidenta de Santander ha recalcado que para la salida de esta crisis se necesita una respuesta "global y coordinada" para dar a las empresas y hogares la liquidez para aguantar el confinamiento mientras que se planifica “cuanto antes” la vuelta de los más jóvenes y los inmunizados al trabajo mientras que los vulnerables siguen confinados

"Esta crisis no es una crisis financiera como la de 2008”, pero podemos extraer lecciones de lo que ocurrió entonces. Botín ha recalcado en la fortaleza del sistema financiero, “estamos preparados para afrontar desafíos globales como el coronavirus”, y ha subrayado también el papel que Banco Santander está desempeñando para ayudar a combatir esta crisis y apoyar a sus empleados, clientes, accionistas y las comunidades donde opera.