Los diamantes negros no sirven para fabricar joyas, pero son un material codiciado por la ciencia

Los diamantes son uno de los elementos más codiciados en el mundo de la joyería y uno de los materiales más duros del planeta. Su extracción de las minas no es barata y los científicos están invirtiendo durante décadas en opciones para desarrollar una alternativa sintética.

Una investigación en la que han participado Reino Unido, Alemania y Suecia ha conseguido crear un diamante sintético con propiedades similares, según HuffPost. Este diamante es tan duro que ya puede competir con los originales, aunque tiene una diferencia: es negro.

Los diamantes negros son extremadamente raros de encontrar gracias a su composición. Este material está formado por osbonita, que no existe en la Tierra y solo está presente en los meteoritos que caen desde el espacio exterior. La osbonita le confiere ese color oscuro por el que los millonarios pagarían toda una fortuna.

Producción de diamantes negros en masa

Las Universidades de Edimburgo (Reino Unido), Bayreuth (Alemania) y Linköping (Suecia) han descubierto una manera de crear diamantes negros en la Tierra. El proceso consiste en producir nitruros de carbono recreando unas condiciones similares a las que propician la formación de los diamantes.

Desarrollan un color aún más oscuro que el Ventablack capaz de hacer desaparecer diamantes.

Las condiciones que se crean en los laboratorios de fabricación son extremas con presiones increíblemente altas entre 70 y 135 gigapascales (GPa), la presión atmosférica es de 100 GPa. Luego los calientan por encima de 2.000 kelvin (K), 1.726 grados celsius, y los introducen en celdas con forma de diamante, ha explicado HuffPost.

El diamante negro es un material codiciado por la ciencia

Los diamantes blancos ocupan el primer lugar en el ranking de materiales más duros del planeta, los diamantes negros ocupan la segunda posición. Estas propiedades han llamado la atención de la industria tecnológica y científica gracias a su abanico de posibilidades a un coste menor que el de un diamante original.

Los diamantes negros son tan resistentes que se podrían utilizar en el revestimiento de naves espaciales y vehículos. La industria energética también se podría beneficiar de ellos para desarrollar fotodetectores y paneles solares más eficientes, según HuffPost. 

Pero sin duda la ciencia será una de las áreas que más se beneficiarán de la producción de diamantes negros. Este material se podrá implementar en la óptica, la electrónica y la ciencia de materiales.