Sí, puedes cometer errores haciendo un huevo frito y estos son los 5 más comunes

¿Sabes cuando una persona persona quiere decir que otra tiene muy poca experiencia en cosas cotidianas y que aún no sabe valerse por sí mismo? y dice: "Este no sabe ni hacerse un huevo frito".

Bien, es porque, de primeras, hacer un huevo frito es lo más sencillo del mundo. Pones aceite a calentar en una sartén, echas el huevo y lo dejas hacerse. No hay más misterio. 

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¡Pues no! Hacer un huevo frito rico de verdad tiene su aquel y, seguramente, estés cometiendo algunos errores que ni te imaginabas. 

Estos son 5 errores que cometes al hacer huevos fritos:

1. Usas aceite de mala calidad

Siempre se suele decir lo mismo, pero si se recuerda con tanta frecuencia es porque realmente importa: los ingredientes y su calidad tienen el mayor peso de la receta. 

No puedes freír un huevo en cualquier tipo de aceite. Usa siempre aceite de oliva virgen extra nuevo, específico para preparar ese huevo frito, además no es necesario que pongas cantidades industriales, con medio dedo bastará, palabra de Dabiz Muñoz.

Por supuesto, los huevos cuanto más frescos, mejor.

2. Rompes mal el huevo

Los expertos de El Personalista advierten de que si siempre te sale mal, es mejor que evites romper el huevo directamente sobre la sartén.

Hazlo primero en un vaso y una vez que el aceite esté muy caliente, ya puedes echarlo. Recuerda que cuanto más cerca esté el huevo del sartén, menos probabilidades hay de que se rompa la yema.

3. No consigues puntillita

La cantidad de aceite debe ser suficiente para que la zona inferior del huevo y una parte muy fina de sus extremos se quede crujiente.

Además, es muy importante que la sartén esté muy caliente en el momento de echar el huevo, evita las prisas y añadirlo antes de tiempo, porque la puntillita de tu huevo depende de eso. 

4. Dejas la clara cruda

La verdad, no es agradable ir a comer un huevo frito y ver que hay unababilla cruda sobre éste en la parte de la clara. 

Para evitarlo, unos segundos después de poner el huevo en la sartén, con la propia espumadera, pon un poco de aceite sobre la clara y como está tan caliente, te asegurarás de que se cocina.

5. No le pones sal

¡No puede ser! Si no se te olvida echarle sal a ninguna comida, ¿cómo se te va a olvidar echársela al huevo? Coge una pizca y ponla sobre la yema, después espolvorea un pelín sobre la clara para potenciar el sabor.

¡Huevos fritos perfectos listos!