Qué hacer antes de un examen para aumentar las probabilidades de aprobar: 7 consejos que debes poner en práctica

¿Tienes un examen importante a la vista? La fecha de la EBAU y de las pruebas finales de la universidad están muy próximas, por lo que es probable que parte de tu carrera académica esté en juego en las próximas semanas.

En cualquier caso, enfrentarte a un examen siempre es motivo de nervios y de cierta preocupación, y aunque hayas estudiado mucho es normal que surjan dudas poco antes de que llegue el momento de someterte a la prueba.

Además de preparar bien el examen, resulta muy importante lo que hagas las horas antes de la prueba. Si actúas de forma adecuada llegarás más calmado al examen y las posibilidades de aprobar o sacar buena nota aumentan.

A continuación, se recopilan 7 consejos que debes poner en práctica antes de un examen para aumentar las probabilidades de aprobar.

El día anterior debes repasar y no dedicarte a estudiar

A no ser que vayas muy apurado, estudiar el día antes del examen es una mala idea. En el libro 'Cómo aprobar exámenes en 7 días', escrito por el filósofo Mariano Veloy, se recomienda no estudiar nada la noche anterior.

"Es el momento de quedar con alguien, ir al cine y relajarte. Si tienes muchísimos nervios, lo único que recomiendo es repasar brevemente las fichas finales que te has hecho", explica el autor en una entrevista publicada por La Vanguardia.

Vete a dormir a una prudente

Si tienes entre 13 y 18 años, los expertos recomiendan que duermas un mínimo de 8 horas y un máximo de 10. Si tienes más de 18 lo recomendable es mantener entre 7 y 9 horas de sueño diarias, aunque cada cuerpo es un mundo y nadie mejor que tú para conocer estas necesidades. 

Además, es muy importante la hora a la que te marchas a dormir. Según la National Sleep Foundation, lo ideal es que te vayas a la cama entre las 20.00 horas y la medianoche. Es normal que algún día te acuestes más tarde, pero intenta no hacerlo antes de un examen. 

Algunas investigaciones sugieren que hay una relación entre los buenos hábitos de sueño y sacar mejores notas, así que no dejes pasar este consejo.

Deja todo el material preparado con antelación

Tener el material preparado con antelación siempre es una ayuda. Así no te andarás con prisas el día del examen y podrás centrarte en otras cosas. Además, si te falta algo, por ejemplo folios o un bolígrafo, tendrás tiempo para comprarlo.

El día del examen desayuna con calma y de forma saludable

Este es uno de los puntos más delicados. Escoger un buen desayuno es esencial para enfrentar el día con fuerzas y que sea una jornada productiva. 

Según Redacción Médica, un desayuno saludable y provechoso antes de un examen debe contener hidratos de carbono y proteínas y grasas de buena calidad. Un ejemplo sería tomar tostadas de pan integral con aguacate, y acompañarlas con un alimento rico en proteínas como el salmón, el huevo, la pechuga de pavo o  el queso fresco.

Relájate y busca cómo motivarte

Si estás muy nervioso puedes probar con algunos remedios para combatir el estrés, por ejemplo hacer ejercicio al aire libre, escuchar música, tomar una infusión o realizar alguna actividad que te haga reír. 

Si te falta motivación porque crees que no estás lo suficientemente preparado también puedes probar a escuchar música, pero en este caso una que te aporte energías y que te haga estar más activo. También puedes animarte leyendo frases motivadoras para estudiantes. 

Llega al lugar del examen antes de la hora indicada

Si ves que llegas tarde te vas a poner nervioso, por lo que siempre es mejor apostar por la puntualidad y aparecer en tu centro de estudios con algo más de antelación de la necesaria. Al estar antes allí te acostumbrarás al ambiente y ya no te resultará tan incómodo cuando hagas el examen. 

Lee atentamente las instrucciones y las preguntas

Este consejo puede parecer obvio, pero nada más lejos de la realidad: en una situación de nervios es posible que tu nivel de atención se vea perjudicado, por lo que se hace necesario que leas las instrucciones y cada pregunta detenidamente antes de lanzarte a responder. 

Si entiendes lo que te están preguntando, aunque no conozcas bien esa parte del temario, tendrás más opciones de responder de forma correcta. 

Otro consejo que puedes poner en práctica antes de comenzar a escribir las respuestas es dividir el tiempo del que dispones para que no te quedes con varias preguntas en blanco al final.