Las flexiones son uno de los ejercicios más eficientes y versátiles para fortalecer el cuerpo. Puedes ver vídeos de transformación increíbles solo realizando a diario flexiones, comenzando por lo más básico y terminando por lo más complejo. Y es que otra ventaja es que hay mil y una forma de hacer flexiones y que te llevan a tener un cuerpo de diez. 

Además, no requieren equipo especial y se pueden realizar en casi cualquier lugar y circunstancia, sin ni siquiera una esterilla, puesto que no lo haces boca arriba y, por tanto, no molesta el suelo. Además, existen múltiples variantes como verás, que pueden ayudarte a enfocarte en diferentes grupos musculares. Te mostraré algunas de ellas, las más usadas y eficaces, adaptándolas a tu nivel de forma física y objetivos específicos.

Flexiones para principiantes

Si nunca has hecho flexiones o hace mucho que no haces, puedes empezar por las variantes para principiantes, mucho menos exigentes e ideales para tonificar el cuerpo. Al usar tu propio peso, como verás simplemente ayudándote o no de otras partes del cuerpo o variando el ángulo, tendrás una amplia gama de dificultad para ir esculpiéndolo. 

Flexiones desde las rodillas

Si recién comienzas, prueba a hacer flexiones apoyando las rodillas en lugar de los pies. Esto reduce el peso que debes levantar, permitiéndote construir fuerza gradualmente. Sería la primera flexión básica para empezar tu camino. 

Flexiones sobre una pendiente

Otra opción para principiantes es realizar flexiones con las manos elevadas en una superficie más alta que los pies. Puedes usar una colina o incluso un mueble resistente. Esta variante reduce la intensidad del ejercicio. A menos altura, más dificultad, y así vas bajando gradualmente hasta llegar a la típica flexión de suelo para comenzar ya digamos el nivel intermedio. 

La flexión estándar

Serían las típicas flexiones de pecho que más ves en los vídeos o que seguro que tú mismo has hecho alguna vez. Para realizar una flexión de pecho estándar, lo primero que tienes que hacer es acostarte boca abajo con los pies juntos; coloca las manos en el suelo a la altura de los hombros, eleva tu cuerpo formando una línea recta desde la cabeza hasta los talones, baja el torso hasta que tus codos formen un ángulo de 90 grados y luego empuja hacia arriba. Así de sencillo y complicado o duro a medida que vas pasando repeticiones. 

Variantes avanzadas

Flexiones de diamante

Esta variante avanzada de las flexiones se enfoca en los músculos del pecho y abdominales. Coloca tus manos debajo del pecho formando un diamante con los dedos índice y pulgar. Baja el cuerpo hacia el suelo y luego empújate hacia arriba.

Flexiones con palmadas

Esta variante también la habrás visto con personas de un nivel alto de fuerza, con total dominio de la flexión normal y donde pueden realizar muchísimas repeticiones; así que añaden dificultad, en este caso con un elemento pliométrico, empujándote con suficiente fuerza para aplaudir mientras estás en el aire. Queda espectacular a la vista, pero lo importante es su eficacia para aumentar tu fuerza y resistencia física. 

Flexiones escorpión

Otra variante avanzada. Levanta una pierna del suelo y dobla la rodilla hacia un lado mientras realizas una flexión.

Flexiones tipo Spiderman

Levanta una pierna del suelo y saca tu rodilla hacia el lado intentando alcanzar el hombro durante la flexión.

Flexiones con un solo brazo

Cómo olvidar las escenas de entrenamiento de Rocky realizándolas. Realiza la flexión utilizando un solo brazo, con el otro brazo colocado detrás de tu espalda.

Flexiones con nudillos

Tan sencillo como hacer una flexión normal pero apoyándote sobre tus puños en lugar de las palmas de las manos. Esta variante fortalece los brazos y las muñecas.

Flexiones con las piernas levantadas hasta llegar al pino

Eleva los pies sobre una superficie más alta para aumentar la dificultad de las flexiones. Al contrario que los básicos, que ibas de casi hacerlas de pie e ir bajando hasta hacerlas en el suelo, el nivel va subiendo al revés: ir subiendo las piernas hasta llegar a la máxima dificultad, que es hacer flexiones haciendo el pino. 

Consejos para mejorar tus flexiones

Utiliza un espejo: observa tu forma al realizar las flexiones para asegurarte de que estás ejecutando el ejercicio correctamente.

Enfócate en los músculos del pecho: aprende a activar y contraer tus músculos pectorales durante las flexiones para maximizar los beneficios.

Calienta adecuadamente: realiza estiramientos y movimientos de calentamiento para preparar tus músculos y evitar lesiones.

Progresión gradual: comienza con variaciones más fáciles y aumenta la dificultad gradualmente a medida que ganas fuerza y confianza.

Como ves, las flexiones son un ejercicio fantástico y altamente adaptable que puede ayudarte a construir un cuerpo fuerte y atlético sin echar mano de otros y sin usar absolutamente nada, salvo algún mueble o la pared. Al incorporar estas variaciones en tu rutina, no solo mejorarás tu fuerza y resistencia, sino que también mantendrás tus entrenamientos interesantes y desafiantes, al ser un ejercicio con mil variantes que aumentan la dificultad y exigencia.