El mercado de las réplicas de relojes es cada vez más sofisticado, y aproximadamente la mitad del mercado está compuesto por falsificaciones de Rolex, según el CEO de Watchfinder & Co, empresa de venta de segunda mano.

En una entrevista de Bloomberg, el director ejecutivo, Arjen van de Vall, afirmó que hasta el 10% de los relojes que recibieron de vendedores el año pasado eran falsificaciones, siendo los Rolex los más frecuentes. 

La empresa, que compra y vende relojes de segunda mano desde 2002, insite: "Rolex es la marca de relojes de lujo a la que más se aspira y la más demandada, de ahí que sea la más imitada".

Antes, Watchfinder, propiedad de la empresa suiza de lujo Richemont, era capaz de identificar aproximadamente el 80% de las falsificaciones de una vista, explica van de Vall. Ahora, sin embargo, esa proporción se ha reducido a solo el 20%, ya que las réplicas son cada vez más convincentes.

Pero no solo Rolex aparece en el mercado de imitaciones.

"Se ven réplicas o clones de relojes —de muy, muy alta calidad— de prácticamente todas las grandes marcas de lujo", asegura Vall a Bloomberg. 

El mercado de relojes de lujo en general se ha desplomado en el último año a medida que la economía mundial se ralentiza y los compradores ricos se aprietan el cinturón. El Subdial Watch Index de Bloomberg, que analiza los 50 relojes de segunda mano más negociados, ha caído casi un 20% desde el pasado mes de junio. 

Por ejemplo, un Audemars Piguet Royal Oak Jumbo Ultra Thin de segunda mano ha bajado más de un 35% en el último año, y ahora se vende por una media de 71.692 dólares.

El Presidente Joe Biden ha declarado en múltiples ocasiones que no prevé una recesión, pero los analistas de Wall Street no están tan seguros. Los estrategas de JPMorgan ven un 23% de posibilidades de que Estados Unidos eluda una recesión, mientras que el principal economista de Bank of America, Michael Gapen, prevé una recesión para finales de año.