La versión de Netflix con publicidad llegará a España el 10 de noviembre y costará 5,49 euros al mes

El Netflix con publicidad ya es una realidad. El lanzamiento en España de este nuevo plan AVOD, denominado Básico con anuncios, tendrá lugar el 10 de noviembre a las cinco de la tarde y costará 5,49 euros al mes (6,99 dólares en Estados Unidos, situándose muy por debajo de las tarifas de competidores directos como Hulu). Esta modalidad de contratación se sumará a los planes ya existentes sin publicidad (básico, estándar y premium) ampliando las alternativas al alcance de los usuarios.

España será el último de los doce países que primero contarán con el plan básico con anuncios, en un desembarco escalonado que comenzará en Canadá y México (1 de noviembre) seguido de Australia, Brasil, Francia, Alemania, Italia, Japón, Corea del Sur, Reino Unido y Estados unidos (3 de noviembre). En la selección de países, según representantes de la compañía, se ha tomado en consideración tanto el volumen de reproducciones totales en la plataforma como la madurez de sus respectivos mercados publicitarios.

El anuncio de este nuevo plan llega tan solo seis meses después de que Netflix lo anunciase por sorpresa durante la presentación de resultados del primer trimestre de 2022. La caída de suscriptores obligaba a realizar un cambio en el modelo económico de la compañía, que por primera vez en su historia se mostraba dispuesta a abrazar algo que siempre había rechazado: la publicidad en su servicio. 

Ahora queda por ver si esta medida conseguirá frenar la caída de suscripciones colocando la versión con publicidad como una alternativa a la cancelación o si podría erosionar los planes más caros sin publicidad. La compañía, de momento, no ha compartido sus proyecciones, aunque en el actual momento económico un downgrade parece un riesgo asumible si la alternativa es la baja en el servicio.

«Un precio y un plan para cada fan»

El nuevo plan, que permitirá ver solo en un dispositivo compatible a la vez, introduce algunos cambios con respecto a las modalidades sin anuncios. No permitirá acceder a determinados contenidos (entre un 5-10% del catálogo dependiendo del país) para los que Netflix todavía no dispone de licencia AVOD, aunque aseguran estar trabajando para reducir su número al mínimo. Tampoco permitirá la descarga de contenidos offline.

El plan básico con anuncios contará con la misma calidad de vídeo que el plan básico (720p/HD) y contendrá una carga de publicidad ligera, con una media de 4-5 minutos de anuncios por hora de contenido, situándose en el estándar de los modelos AVOD del mercado.

Los ya usuarios no verán alterada su tarifa actual a menos que decidan hacer un cambio al plan básico con anuncios. 

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Una oportunidad para los anunciantes 

Este nuevo plan básico con publicidad ofrece, según Netflix, «una oportunidad magnífica para a los anunciantes», que tendrán acceso a un público diverso y muy fidelizado, especialmente los jóvenes, principal activo de la plataforma y uno de los targets menos afín al consumo televisivo tradicional. El formato publicitario estándar disponible en el momento del lanzamiento será el spot de 20 segundos en alta resolución, que se verá al principio, al final y durante la reproducción.

Netflix pondrá a disposición de los anunciante opciones de segmentación por países, géneros e, incluso, en base a la popularidad del contenido. También ofrecerán la posibilidad de excluir su publicidad de contenidos que pudieran resultar incompatibles con la marca. En cuanto al modelo de tarifa se seguirá, al menos en esta primera fase, un sistema de precio fijo. El CPM ofrecido a los anunciantes no se ha hecho público.

El sistema, además, contará con herramientas de verificación del nivel de visualización y la validez del tráfico de los anuncios a partir del primer trimestre de 2023 gracias a los acuerdos firmados con las compañías DoubleVerify e Integral AdScience.

Netflix asegura que centenares de anunciantes de todo el mundo ya han depositado su confianza en su nuevo plan básico con anuncios, y confía en que el trabajo conjunto entre ambas partes les permita avanzar en un modelo de afinidad publicitaria lo menos intrusivo posible. Los datos de los usuarios empleados para la gestión publicitaria en ningún caso se venderán a terceros.


El AVOD de Netflix, que se desarrollará en colaboración con Microsoft, viene al rescate de una compañía debilitada ante la presión de la competencia. La publicidad, de entrada, pone sobre la mesa dos beneficios directos. De un lado, una nueva fuente de ingresos con gran potencial dada su cuota de mercado y el profundo conocimiento de los hábitos de sus clientes. 

De otro, la posibilidad de ser flexible con el precio, uno de los aspectos en los que Netflix, hasta ahora, tenía menos cintura. Sus tarifas no han parado de crecer en los últimos años, mientras que las plataformas de lanzamiento más reciente han basado su estrategia de captación en una política de precios muy competitivos y unas ofertas con descuento.  


El AVOD es tan solo la punta del iceberg de un montón de cambios que están transformando el modelo económico que la compañía ha sostenido durante 15 años. Queda por ver si será capaz de preservar la magia que rodea a la marca cuando el clímax del maratón quede momentáneamente interrumpido por un puñado de anuncios.