La construcción es mala para el planeta: la solución de esta startup española es montar edificios como si fueran muebles de Ikea

Cuando Gillis Lundgren, diseñador de muebles y empleado fundador de Ikea, no pudo meter en su coche una mesa que necesitaba, tuvo una idea genial: quitarle las patas. Ese momento definió la estrategia de Ikea y, posteriormente, la vida moderna. Lundgren no inventó los muebles planos, pero su empresa contribuyó a generalizarlos.

Ahora, una empresa española espera encabezar la adopción de los edificios planos.

La startup en cuestión, 011h, utiliza madera y técnicas de diseño sostenible para reducir las emisiones de carbono de los edificios de nueva construcción, aumentar su eficiencia energética y reducir el tiempo que tardan los inquilinos en mudarse. 

Al igual que Lundgren, Lucas Carné, cofundador y CEO de la startup con sede en Barcelona, no inventó esta forma de construir, pero apuesta por sus conocimientos tecnológicos para llevarla a escala. 

El sector de la construcción no está en vías de alcanzar los objetivos de energía neta cero para 2050, y de hecho fue responsable del 37% de las emisiones de carbono energéticas y operativas en 2021.

Es improbable que la actividad se ralentice a medida que la población mundial se acerque a los 10.000 millones de personas y exija un aumento proporcional del parque de viviendas. Ya existe una escasez mundial de viviendas; el Banco Mundial prevé que este afectará a 1.600 millones de personas en 2025.

"Si queremos luchar contra el cambio climático y la escasez de vivienda asequible, hay que fijarse en 2 cosas a la vez: construcción neta cero con capacidad fiable y economía competitiva", cuenta Carné. 

Fundada en 2020, 011h utiliza una combinación de materiales sostenibles, principios de diseño pasivo y flujos de trabajo digitales para resolver problemas de construcción como la escala, la programación y los márgenes ajustados con el objetivo final de ayudar a resolver los retos de la sociedad.

"La gente piensa en el diseño de bajo consumo energético existe desde los años 70, y en particular desde la crisis del petróleo del 73, pero el cambio climático le ha dado una relevancia real", explica a Business Insider John Brennan, catedrático de Arquitectura Sostenible de la Universidad de Edimburgo. 

El primer proyecto de 011h, Hospitalet, se construyó para Renta Corporación, un promotor residencial que cotiza en bolsa.

Diseño y materiales sostenibles 

El diseño pasivo consiste en reducir el consumo de energía al mínimo posible en lugar de compensarlo con energía solar y bombas de calor.

Eso significa crear edificios herméticos y bien aislados con ambientes internos muy controlados que sean eficientes y confortables independientemente de los sistemas de calefacción y refrigeración. Es como contar las calorías, pero por cada kilovatio que entra y sale del edificio, explica Brennan.

A medida que las normativas de construcción, cada vez más estrictas, reducen el consumo, el sector ha centrado su atención en las emisiones de los materiales y la construcción de los propios edificios, lo que se conoce como carbono incorporado. También tiene que ver con el final de la vida útil de los edificios.

011h construye teniendo en cuenta ambas cosas. La empresa utiliza principios de diseño sostenible con materiales de construcción ecológicos, incluida la madera certificada, para reducir las tasas de carbono incorporado. También afecta al final de la vida útil de los edificios y al modo en que los constructores reutilizan o reciclan los materiales, comenta Brennan.

Cuando un árbol crece, absorbe dióxido de carbono. Cuando el árbol se tala para obtener madera, el carbono permanece almacenado en la madera hasta que se quema o se descompone. Sin embargo, los ingenieros deben abastecerse de madera de forma sostenible. La sostenibilidad consiste en reducir la huella de carbono, explica Carné, pero también en preservar el medio ambiente, los recursos y la biodiversidad.

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La empresa hace un seguimiento del ciclo de vida de la madera para garantizar la trazabilidad de su pasado y su futura "circularidad" o reutilización, e incorpora esta huella de carbono a los diseños. 

La empresa no es propietaria de sus materiales, sino que trabaja con socios industriales para fabricarlos y ensamblarlos. La madera es prefabricada, es decir, los fabricantes combinan capas de material en gruesas láminas monolíticas y las cortan a medida.

A continuación, los componentes se envían para ser ensamblados in situ en el plazo exacto en que se necesitarán. Una vez montados, las tuberías, el cableado y la pintura se trabajan normalmente. Esto redujo el tiempo total de construcción de 13 meses a ocho en el único proyecto terminado de 011h, calcula Carné. Son sus edificios planos.

Un enfoque tecnológico

En el centro de los esfuerzos de 011h se encuentra una plataforma integral en la que los ingenieros pueden diseñar proyectos, gestionarlos y realizar su seguimiento. Esta refleja materiales, principios de diseño y proveedores  con la idea de que los ingenieros puedan planificar únicamente edificios respetuosos con el medio ambiente. 

También crea representaciones en 3D de los componentes y enumera características como la resistencia estructural, el aislamiento térmico, los datos sobre emisiones y los costes. La empresa tiene previsto licenciar el software a otros arquitectos para que puedan ampliarlo. 

011h aprovecha por otra parte tecnologías como el reconocimiento de imágenes e incluso los códigos QR para saber exactamente cuándo han salido los componentes de una fábrica y cuándo se han montado. 

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La startup ha completado un solo proyecto hasta ahora. Este tiene que estar ocupado durante un año durante cada estación antes de que la empresa pueda extraer datos fiables sobre su sostenibilidad operativa, comenta Carné. Pero, de momento, el edificio tiene la máxima calificación energética. 011h se comprometió a reducir en un 81% el carbono incorporado en todo el ciclo de vida (derivado de los materiales, la construcción y el final de la vida útil) en comparación con las construcciones convencionales, pero esa cifra dependerá de si los ingenieros reutilizan los materiales. 

Los constructores deben abordar la sostenibilidad en las nuevas construcciones para elevar el listón del sector, pero ellos son solo una pequeña fracción del parque de viviendas, recuerda Becky Lane, cofundadora y directora ejecutiva de la empresa de retroadaptación Furbnow.

"La rehabilitación de viviendas existentes es la mayor oportunidad para centrarse en la reducción del CO2 incorporado en los materiales utilizados: encontrar materiales adecuados que se adapten al edificio existente puede significar a menudo que se utilicen materiales menos sostenibles", afirma. 

Reducir las casas ecológicas subvencionadas 

La empresa se enfrenta a un reto importante: el coste. 

En la actualidad, 011h subvenciona sus construcciones, cubriendo la diferencia de coste entre una construcción convencional y una sostenible. Esta prima ecológica es síntoma de un sector incipiente, comenta Carné. La empresa ha recaudado 32,5 millones de euros en capital riesgo, según PitchBook. Entre sus patrocinadores figuran las empresas europeas Blossom Capital, Breega, Seaya y A/O PropTech. 

"Cada vez que hagamos grifos prefabricados, cerramientos prefabricados, tableros prefabricados, kits de cocina prefabricados, este sector se desarrollará, crecerá, tendrá más capacidad, más automatización y el precio bajará", reflexiona Carné, que opina que la normativa también desempeñará un papel importante a medida que los países avancen hacia el objetivo de "red cero". 

Para Brennan, el coste sigue siendo un gran pero, aunque los edificios sostenibles sean una obviedad. "En su mayor parte, el mercado de la vivienda, sobre todo en el Reino Unido, no se basa en el rendimiento, sino en el coste".

El eslabón perdido es cómo pueden los promotores vender a los compradores edificios con bajas emisiones de carbono. 

Carné también sueña con materiales totalmente circulares en los que los edificios se vean como un "banco": una vez que un edificio llega al final de su vida útil, los trabajadores podrían desmontarlo para utilizar sus materiales en otro lugar. 011h está trabajando en un proyecto en Rotterdam (Países Bajos) para demostrarlo. Alrededor del 35% de los residuos mundiales proceden de la construcción. 

Ikea atribuye a los muebles prefabricados la posibilidad de ofrecer precios bajos. 011h también se centra no solo en cerrar la brecha verde-premium, sino en abaratar la construcción ecológica.

"La sostenibilidad tiene que ver con el medio ambiente, lo social y lo económico. Tiene que ser asequible. Si no es asequible, si la gente no puede pagarlo, no es sostenible", reflexiona Carné.