Cómo saber si te están estafando en una videollamada: pide a tu interlocutor que gire la cabeza

Cada vez es más común encontrarse con estafas a través de una videollamada. Alguien que se hace pasar por otra persona para tratar de engañarte de algún modo gracias a una tecnología que logra imitar el rostro de cualquiera para hacerse pasar por ella (deepfake). 

Por suerte, existe un modo muy sencillo de evitar que te estafen a través de este método: pedirle que gire la cabeza. 

DeepFaceLive es una versión en vivo del popular software DeepFaceLab, que es capaz de generar un rostro alternativo en tiempo real y, desde un punto de vista frontal, la mayoría de las recreaciones son bastante efectivas y convincentes. 

Eso sí, todo cambia cuando el ángulo facial alcanza los 90º. 

En una sesión organizada por Metaphysicpusieron a Bob Doyle a realizar algunas pruebas usando DeepFaceLive para cambiar su apariencia por la de una serie de celebridades populares. 

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Durante el experimento, comprobaron como los rasgos reales de Doyle se mantenían durante el proceso, ya que la inteligencia artificial (IA) no tenía suficientes datos para completar la cara de la persona simulada. 

¿El motivo? El software no funciona en ángulos agudos. De hecho, la mayoría de los algoritmos dealineamiento facial basados en 2D asignan solo el 50% o 60% de puntos de referencia de una vista frontal de la cara a una vista de perfil.

Los paquetes de alineación 2D típicos consideran que una vista de perfil está oculta en un 50%, lo que dificulta el reconocimiento, así como el entrenamiento preciso y la síntesis facial posterior.

Por esta razón, las tomas de perfil son menos consistentes y por eso la mayoría de los deepfakes virales tienden a evitar el uso de clips que requieren ponerse de perfil. 

Como podrás imaginar, es posible mejorar todo esto en una extensa labor de postproducción, pero el proceso es laborioso y realmente largo y además es necesario contar con una alta disponibilidad de datos del perfil de esa persona para lograr un efecto más o menos real. 

Ahora bien, esto ocurre con personas que están expuestas constantemente a las cámaras. Para la mayoría, hacerse una foto de perfil es bastante poco frecuente y, por eso, es muy complicado que alguien pueda usurpar tu identidad.