Telefónica llega a un preacuerdo con Digi para que siga utilizando su red móvil pese a los remedies de MasOrange

Telefónica no se da descanso ni siquiera en plena resaca de la celebración de su centenario y ha vuelto a la carga para anunciar un preacuerdo con la teleco de origen rumano Digi para que esta siga utilizando su red móvil después de 2026, cuando acababa su contrato actual.

El operador que dirige José María Álvarez-Pallete ha presentado este jueves los resultados económicos del primer trimestre de 2024, como recoge la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), y el protagonismo no se lo han llevado tanto sus cuentas como su contrato mayorista con Digi.

Telefónica asegura haber llegado a un "memorándum de entendimiento no vinculante", es decir, un preacuerdo con Digi de cara a un nuevo contrato mayorista para el uso de la red móvil del operador azul.

Digi ya utiliza la red de móvil de Telefónica en España, con la que da servicio a sus clientes de tarifas de móvil, pero el contrato actual entre ambas compañía finalizaba en 2026 y no estaba claro si el operador rumano volvería a renovar, pese a que es de gran importancia para Telefónica porque es su mayor cliente en la actualidad.

La cosa se complicó aún más cuando se aprobaron los remedies de la fusión de MásMóvil y Orange en España, ya constituida como MasOrange. La Comisión Europea no solo concedió frecuencias redundantes a Digi sino que le dio la posibilidad de llegar a un acuerdo preferente con MasOrange para utilizar su red móvil en España.

Cuando Telefónica presentó sus resultados anuales de 2023, la compañía ya había adelantado que pese a esta medida europea, Digi no tenía obligación de pactar con MasOrange y confirmó que se estaba negociando para ampliar el acuerdo mayorista del operador rumano más allá de 2026.

De momento, el contrato entre Digi y Telefónica para que la primera use la red móvil de la segunda está en fase preliminar, por lo que tendrá que confirmarse definitivamente y aún es susceptible de revocarse, aunque la compañía detalla que espera cerrarlo en las próximas semanas. 

Con todo, supone un golpe sobre la mesa para el equipo directivo de José María Álvarez-Pallete en su guerra contra MasOrange, nuevo líder en clientes desde la fusión pero aún con poco más de un mes de rodaje.

Resultados de Telefónica en el primer trimestre

En lo económico, Telefónica celebra un periodo positivo entre enero y marzo de 2024 tanto en su negocio internacional como en España.

Telefónica facturó en todo el mundo 10.140 millones de euros en el primer trimestre, un 0,9% más que en el mismo periodo del año pasado. Tuvo un beneficio neto de 532 millones de euros en los tres primeros meses del año, un 79% más que en 2023.

España sigue siendo su principal mercado en ingresos, con 3.118 millones de euros en ingresos, un 1% más que hace un año, en línea con los objetivos de la compañía anunciados en su último día del inversor a finales de 2023.

En nuestro país, Telefónica relaciona el aumento de ingresos con las subidas de precios de las tarifas, que han alcanzado cerca de un 3% entre los clientes de su principal marca, Movistar.

Estos son los datos más destacados de los resultados de Telefónica en el primer trimestre de 2024:

• Ingresos mundiales: 10.140 millones de euros (+0,9%)
• Ingresos España: 3.118 millones (+1%)
• Beneficio neto: 532 millones (+79%).
• Ingresos Brasil: 2.520 millones (+10,4%).

Latinoamérica pone la nota agridulce en los resultados de Telefónica gracias al fuerte crecimiento de su negocio en Brasil que queda opacado por la caída en el resto de países incluidos dentro de su unidad Telefónica Hispam.

Brasil es la joya de su catálogo gracias a unos ingresos de 2.520 millones de euros solo en los tres primeros meses de año, lo que la afianzan como la segunda geografía en importancia con un crecimiento del 10,4% interanual.

Por contra, Telefónica Hispam ingresó un 8,2% menos en el primer trimestre, hasta los 2.054 millones de euros, afectada tanto por la devaluación del peso argentino y la depreciación del peso chileno como por la menos venta de terminales y un desplome del 20% en los ingresos de Chile, pese a que Colombia y México crecen.