Las telecos afrontan un 2021 marcado por la fuerte inversión que demanda el 5G mientras buscan nuevas vías de ingresos para poder ser viables en un mercado hipercompetitivo
Reuters
- Las operadoras se enfrentan a desafíos como la llegada del 5G o una posible oleada de fusiones que llegan después del año de la pandemia donde el COVID-19 ha puesto a prueba sus infraestructuras.
- Entre los desafíos de 2021 está el de conseguir mejorar sus cuentas para conseguir aumentar sus ingresos las empresas buscan nuevos negocios.
- Descubre más historias en Business Insider España.
La llegada masiva del 5G, las posibles fusiones entre operadoras, la entrada de las telecos en nuevos negocios...
Los expertos desgranan un listado de hitos que marcarán el mercado de las operadoras en 2021. Unos desafíos que llegan después del año de la pandemia donde el COVID-19 ha sido la causa de una crisis sanitaria, pero también de una económica con un cambio de hábitos que ha marcado al sector de las telecomunicaciones.
El teletrabajo y el confinamiento pusieron a prueba las redes de las operadoras para convertir nuestros salones en oficinas y centros de ocio. Las infraestructuras pasaron la prueba.
2021 puede ser el año del 5G. La subasta de la banda de los 700 Mhz, que servirá de impulso para su implantación comercial masiva, está prevista para el primer trimestre de este año. La pandemia retrasó el calendario donde estaba recogido que el segundo dividendo digital fuera en 2020, se cambiaran las frecuencias de los canales, volviéramos a resintonizar nuestros televisores y las operadoras pujaran por ese espectro.
Mucho ruido y pocas nueces (por ahora): la verdadera situación del 5G en España
Así, se postergó la llegada masiva del tan ansiado 5G con su ultravelocidad y su baja latencia, un término técnico que se traduce en que la respuesta entre un extremo de la red y el otro sea prácticamente inmediata, algo que sirve tanto para matar a tu enemigo en un videojuego online, como para mover a distancia un vehículo cargado de material sanitario. Aunque es cierto que las operadoras han ido lanzando proyectos comerciales en algunas ciudades, sobre todo, las más grandes.
En un momento convulso económicamente, 2020 también fue el año de la expansión de Euskaltel que se hizo con la marca Virgin para alcanzar el resto del mercado nacional saliendo de sus territorios tradicionales del norte. De esta forma, el ejercicio se termina con un mercado de 5 jugadores, que lleva a una situación complicada comercialmente, según apuntan los expertos, por la elevada competencia de precios que existe.
"Es un mercado demasiado fragmentado, demasiado atomizados, el regulador y los gobiernos se han preocupado por fomentar la competencia en los últimos 10 años, lo que ha llevado una destrucción de valor impresionante", apuntaba Carlos Winzer, Senior Vice President, Moody’s Investors Service en un encuentro con la prensa sobre las perspectivas para el sector de las telecomunicaciones.
"El regulador se ha enfocado en que bajaran los precios y esto es una presión sobre el sector, lo que hace que sea difícil ver cuál será el catalizador sobre los ingresos. Hace unos años 5G se veía como posible catalizador, pero nosotros no lo vemos, si vemos que un proceso de fusiones y adquisiciones podría provocar un cambio en tendencia", añadía.
Las redes y su actividad, grandes pilares de 2020
España tiene una red de fibra desplegada más grande que en Alemania, Francia, Reino Unido e Italia juntos. Esta es una idea que repite siempre que puede el presidente de Telefónica, José María Álvarez-Pallete. Una imagen muy ilustrativa del punto en el que está la conectividad en España y también de las grandes inversiones que han tenido que hacer estos años las empresas de telecomunicaciones.
En 2020, la infraestructura de las telecomunicaciones se puso a prueba durante la pandemia con un confinamiento estricto donde las redes vieron cómo se incrementaba de forma importante la cantidad de datos que soportaban estas infraestructuras para hacer posible el teletrabajo, la educación a distancia o el entretenimiento a través de plataformas como Netflix.
"Las empresas del sector salen muy fortalecidas del 2020. Creo que es unánime la opinión positiva de los clientes y usuarios, que han visto cómo en este 2020, en el que tantas cosas han fallado, las infraestructuras de telecomunicación han sostenido la actividad económica en muchos frentes. Como académico, puedo dar fe de ello en el sector educativo, pero, ni mucho menos, es el único", explica David Santos, catedrático de Teoría de la Señal y Comunicaciones de la Universidad CEU San Pablo a Business Insider España.
Un valor de capitalización por los suelos
En los últimos años, las operadoras han perdido gran parte de su valor en bolsa. Por un lado, las fuertes inversiones que han tenido que hacer en infraestructuras les han penalizado en sus cuentas mientras que por el retrovisor veían como los grandes OTT, las siglas en inglés para denominar a los operadores over the top como Netflix o Facebook, utilizaban sus redes para hacerles la competencia con servicios de comunicaciones o relacionados con ellos.
Rubén Blanco, responsable de Telecom y Media de Everis en Europa, explica a Business Insider España que el valor de las grandes empresas de telecomunicaciones ha caído en los últimos diez años y que la foto más incómoda aparece en el mercado europeo al analizar el ebitda (beneficio antes de impuestos y amortizaciones). Si hace diez años el ebitda de las grandes operadoras europeas alcanzaba los 73.000 millones de euros, ahora se sitúa en poco más de 45.000 millones. Un 40% menos.
Las operadoras han tenido que hacer fuertes inversiones en infraestructuras, pero no han visto esto reflejado en los precios que cobran por los servicios. Algo en lo que destaca España donde el mercado cada vez tiende más hacia una fuerte competencia por precios.
Algo que también se ha notado en su capitalización bursátil, ya que, las grandes operadoras europeas han visto caer el precio de su acción. En el caso de Vodafone, sus títulos cayeron un 10% en los últimos diez años; mientras que Orange vio cómo se replegaban un 38% y Telefónica vio caer sus acciones un 82%. Todo esto en un mercado digital donde los grandes jugadores como Google o Apple han visto volar el precio de su acción.
Posibles fusiones y nuevos negocios a la vista
Hacia dónde se dirigirán los pasos de las telecos en 2021, los expertos de Moody's consideran que el mercado español puede albergar fusiones entre compañías aunque no se casan con ninguna opción. Sin embargo, no creen que se vayan a eliminar marcas del gran abanico con el que cuentan las operadoras.
"Esto parte de la segmentación del mercado. Los operadores se han dado cuenta de Telefónica tenía una oferta muy interesante en el high end (la parte más cara), pero que el low end lo tenía un poco desatendido", apunta Winzer al hablar de la gran cantidad de marcas que existen en el mercado. "La estrategia multimarca tiene sentido, es una manera muy eficaz de posicionarte en cada segmento", añade.
Blanco también ve como un desafío para 2021 que se realice algún movimiento para ganar eficiencia en las operaciones así como que las compañías busquen una estructura diferente sacando, por ejemplo, una firma específica de torres o de infraestructuras, como el movimiento ya anunciado por Telefónica.
Otro de los grandes desafíos está, según Blanco, en la parte de Media, así cada operadora está tomando un camino diferente ya sea en producir contenidos como el caso de Telefónica con Movistar o buscar colaboraciones con los over the top como han hecho Vodafone u Orange para ofrecer sus contenidos en sus plataformas.
A la hora de buscar ingresos, los expertos también señalan que las operadoras buscarán nuevos negocios donde poder aprovechar la ventaja de su marca y su base de clientes para aumentar los ingresos.
Mientras que el 5G será una "pieza más del puzzle", señala el experto de Everis, que permite "transformar la oferta de servicios, habilita la segmentación de redes y permite dar otros servicios".
Empresas digitales con clientes que cada vez consumen más
Los clientes cada vez son más digitales y las operadoras tendrán que adaptarse en 2021 a esa mayor demanda de datos para su día a día. Algo que parece que pueden asumir teniendo en cuenta la inversión en redes ya realizadas.
Por otro lado, las operadoras tienen que hacer frente a la digitalización de sus propios procesos y adaptarse para así poder ahorrar costes y tener una infraestructura de costes más baja que les permita competir en este mercado tan competitivo en precio.
"Las operadoras son entes plenamente digitales. Diría que siempre han estado a la vanguardia de los procesos de digitalización, quizás por la naturaleza de sus servicios. La pandemia solo ha evidenciado hasta qué punto es así. Y no solo por el incremento del teletrabajo, sino por otros dos teles que se han apoyado muy significativamente en las infraestructuras de las operadoras: la tele-educación (a todos los niveles), y el tele-ocio (consumo de contenidos digitales con fines de entretenimiento)", apunta Santos.
Otros artículos interesantes:
Descubre más sobre Marta Garijo, autor/a de este artículo.
Conoce cómo trabajamos en Business Insider.