El aspartamo podría ser cancerígeno, pero no por beberte una lata de Coca Cola: qué significa la nueva declaración de la OMS

La Agencia Internacional de Investigaciones sobre el Cáncer (IARC por sus siglas en inglés) y el Comité Mixto de Expertos en Aditivos Alimentarios (JECFA) de la FAO y la OMS han publicado sus respectivas evaluaciones sobre las repercusiones del edulcorante aspartamo en la salud. 

Se trata de 2 paneles de expertos separados de la OMS, mientras que el primero de ellos señala si existe evidencia de que una sustancia es un peligro potencial, el segundo evalúa cuánto riesgo real representa esa sustancia.

Así, basándose en "evidencia limitada", la IARC ha clasificado al aspartamo como "posiblemente cancerígeno para los humanos (Grupo 2B)". Por su parte el JECFA no ha encontrado evidencia para variar la ingesta diaria admisible de este edulcorante, fijada en 40 mg/kg de peso corporal. 

El aspartamo es uno de los edulcorantes más usados del mundo. Refrescos dietéticos, yogures o chicles son algunos de los productos que suelen contenerlo. Puede aparecer en la etiqueta también como edulcorante E -951.

"Las evaluaciones del aspartamo han revelado que, si bien la inocuidad no preocupa de forma destacada en las dosis de consumo habitual de este producto, se han descrito posibles efectos que deben investigarse en más estudios y de mejor calidad", señala el doctor Francesco Branca, Director del Departamento de Nutrición e Inocuidad de los Alimentos de la OMS.

Según los límites marcados como seguros por el JECFA, con una lata de refresco dietético que contenga 200 o 300 mg de aspartamo, un adulto de 70 kg necesitaría consumir más de 9-14 latas cada día para superar la ingesta diaria admisible —suponiendo que no se produzca otra ingesta de otras fuentes alimentarias—.  

"Nuestros resultados no indican que el consumo ocasional pueda representar un riesgo para la mayoría de los consumidores", añade Branca. No obstante el médico anima a decantarse por opciones más saludables para aquellos con dudas sobre qué consumir.

"Si los consumidores se enfrentan a la decisión de tomar refrescos de cola con edulcorantes o uno con azúcar, creo que debería considerarse una tercera opción, que es beber agua en su lugar".

"Evidencia limitada" para el cáncer en los seres humanos 

La clasificación de la IARC se ha tomado a partir de evidencia limitada para el cáncer en los seres humanos. En concreto el panel del expertos señaló haber tomado su decisión basada en 3 estudios en humanos en los Estados Unidos y Europa que indicaron un vínculo entre el carcinoma hepatocelular, una forma de cáncer de hígado, y el consumo de edulcorantes.

Asimismo se observó evidencia limitada para el cáncer en animales de experimentación y relacionada con los posibles mecanismos que provocan cáncer.

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"Desde nuestro punto de vista, esto es realmente más un llamado a la comunidad de investigación para tratar de aclarar y comprender mejor el riesgo cancerígeno que puede o no representar el consumo de aspartame", matizó Mary Schubauer-Berigan del programa de monografías de la IARC.

Por su parte el JECFA también examinó la evidencia sobre el riesgo de cáncer en estudios realizados en animales y seres humanos. Concluyó que la evidencia de vínculo entre el consumo de aspartamo y el cáncer en los seres humanos "no es convincente".

Por ello, con los datos evaluados, indican que no hay ninguna razón suficiente para cambiar la ingesta diaria admisible (IDA). Desde 1981 este límite seguro está marcado en un máximo de 40 mg/kg de peso corporal para el aspartamo. El Comité reafirmó que el consumo de una cantidad diaria que esté dentro de este límite es seguro.