Cada vez hay más pruebas de que no es necesario caminar 10.000 pasos al día para mejorar la salud. Un estudio apoya la idea de que unos paseos más cortos podrían ser la clave para mejorar la calidad de vida. 

Según un estudio publicado el 8 de agosto en la revista European Journal of Preventive Cardiology, basta con dar un total de 4.000 pasos a lo largo del día para reducir el riesgo de muerte prematura. Estos pasos implican entre 30 y 45 minutos de actividad física de muy baja intensidad. 

El estudio muestra que incluso un total de 2.300 pasos al día, entre 15 y 20 minutos, reducen el riesgo de morir por enfermedad cardiovascular. Los accidentes cardiovasculares son una de las principales causas de muerte en el mundo y la primera en EEUU. 

Los investigadores de la Universidad Médica de Lodz y la Universidad Johns Hopkins analizaron los datos de más de 200.000 personas. Las instituciones llevaron a cabo un largo análisis durante siete años a través de 17 estudios diferentes en todo el mundo. 

¿El resultado? Caminar a diario está estrechamente relacionado con mayores probabilidades de llevar una vida saludable y una mayor longevidad. Según Maciej Banach, investigador principal del estudio, caminar más conlleva aún más beneficios para la salud. Además, estas ventajas son independientes de la edad, el sexo o la procedencia.  

Según los investigadores, dar 1.000 pasos más al día está relacionado con un 15% menos de riesgo de morir prematuramente por cualquier causa. Por otro lado, dar 500 pasos más al día supone un 7% menos de riesgo de sufrir una cardiopatía mortal. 

Los beneficios para la salud siguen aumentando hasta los 20.000 pasos diarios, la cifra más alta incluida en el estudio. Las ventajas pueden ir más allá, ya que los investigadores han señalado para Business Insider que aún no han encontrado un límite superior.  

Este estudio ha demostrado que las sesiones cortas de ejercicio son una forma científicamente probada de mejorar la salud y el estado de ánimo. Las investigaciones demuestran que caminar ayuda a reducir el estrés y la ansiedad, mejora la salud del corazón y aumenta la energía. 

El reciente estudio evidencia también que el típico objetivo de 10.000 pasos al día es un poco arbitrario y que está basado más en una campaña de marketing que en la ciencia. Tan solo 4.000 pasos al día ya tienen un impacto positivo en la salud.

Otros estudios sugieren que caminar a paso ligero tiene beneficios incluso en menos pasos, ayudando a prevenir enfermedades como el cáncer con 2.000 a 3.800 pasos al día. Se ha observado también que los ejercicios de aceleración cardiaca como subir escaleras o correr para coger el autobús reducen el riesgo de muerte prematura.