Esta coach laboral consiguió aumentar su sueldo en 171.000 euros: estos son los 7 pasos que te recomienda seguir para negociar el tuyo

¿Te sientes completamente satisfecho con el sueldo actual en tu trabajo? Tu salario representa tu valor en tu empresa, y es perfectamente razonable creer que te mereces más si cumples con creces con tus objetivos o notas que tus habilidades están por encima de la media.

Existen 2 formas de conseguir una nómina más jugosa: pedir un aumento de sueldo en tu trabajo actual o bien negociar una buena cifra durante un proceso de selección.

Mandi Woodruff-Santos se ha convertido en una experta en negociar buenos salarios durante entrevistas de trabajo. 

"Mi primer trabajo serio fue en 2010, cuando tenía 22 años", explica para CNBC Make It. "Desde entonces, he dejado mi trabajo 6 veces, y he aumentado mi salario en 171.000 euros. Básicamente aumentaba mi sueldo en un 39% cada vez que dejaba un puesto para encontrar otra oportunidad".

Woodruff-Santos entró en el mundo laboral cobrando unos 27.500 euros al año en 2010 y en 2020 ya ganaba casi 200.000 euros. Ahora, con 34 años, se ha impuesto como meta ser millonaria a los 40. Y su objetivo va viendo en popa.

Debido a su facilidad para negociar en el ámbito empresarial, Woodruff-Santos ahora es coach financiera y laboral. Y estos son sus trucos para negociar un mejor salario, aquel que te mereces.

1. No dejes tu trabajo solo porque quieres un mejor salario

Una nómina más jugosa y un nuevo título profesional más prominente pueden parecer 2 buenas razones para dejar tu trabajo actual y enrolarte a otra empresa. No obstante, Woodruff-Santos recomienda que pienses en tu situación personal antes de tomar la decisión.

"Siempre me he centrado en encontrar las buenas oportunidades, aquellas que sabía que me ayudarían a ampliar mis habilidades y expandir mi experiencia. De hecho, uno de mis cambios laborales fue una mudanza lateral que me dio acceso a una mejor tutoría y más oportunidades de aprendizaje".

2. Nunca seas el primero en dar una cifra

Inevitablemente, en algún momento de una entrevista de trabajo, el reclutador o bien te preguntará por su sueldo actual o por tus expectativas salarias. Su objetivo es ver si te encuentras dentro del presupuesto para la contratación. Responder demasiado abiertamente a este tipo de cuestiones puede ponerte en una situación de desventaja.

Esto es lo que Woodruff-Santos respondió en una ocasión que se le preguntó por su rango salarial:

"Me gustaría saber más sobre el puesto de trabajo y las expectativas antes de hablar de la compensación. ¿Podemos volver a este punto una vez haya hablado con el equipo para determinar si encajaré bien dentro?".

Y esto es lo que te recomienda que respondas si se te pregunta por su sueldo actual:

"Preferiría no aclarar este tema en este punto del proceso, ya que me gustaría tener una conversación más exhaustiva sobre mi salario según mis habilidades, lo que puedo ofrecer al equipo y cómo beneficiaría a la compañía. ¿Podrías indicarme si tenéis algún presupuesto en mente?".

3. Practica las artes de negociación en situaciones menos estresantes

Negociar tu salario es una situación estresante, y precisamente esa tensión puede provocar que no comuniques bien tus necesidades o te dejes convencer. La clave, por lo tanto, es practicar en numerosas ocasiones en donde tengas poco que perder.

Por ejemplo, si vas a un restaurante y resulta que se han equivocado con tu pedido, practica un poco o bien pidiendo que te den lo que querías, o que como compensación te rebajen la cuenta. "Estas pequeñas peticiones me ayudaron a ganar en confianza y a romper mis tendencias a complacer a los demás".

Aplica este regla en el trabajo. Si notas que se te están dando más responsabilidades de lo normal, atrévete a pedir un aumento de acuerdo con tus nuevas tareas. "Así fue cómo gané 100 dólares más cada semana".

4. La primera oferta nunca es la última oferta

Cuando recibas la oferta para empezar a trabajar, respira hondo y no respondas inmediatamente. Que te hayan dado una propuesta significa que estás bien arriba en la lista de candidatos. Puedes usar tu posición para negociar y conseguir lo que quieres. 

"Piensa que no existe reclutador o gerente que quiera invertir más horas revisando CV, gestionando múltiples entrevistas y comprobando referencias".

Cuando recibas la primera oferta, da las gracias inmediatamente y di que volverás con una respuesta en menos de 24 horas. Luego, pide otra reunión para renegociar y pedir una cifra mayor. Cuando hayas soltado tu contraoferta, "diles educadamente que pueden tomarse todo el tiempo que quieran en considerarla".

5. Negocia por teléfono, nunca por email

Siempre debes intentar negociar en persona, cara a cara. En caso de que no sea posible, es mejor usar el teléfono que el email. "Demostrarás que eres capaz de gestionar conversaciones difíciles y que no te da miedo luchar por lo que quieres".

Woodruff-Santos explica que con una simple llamada logró doblar la cifra que le había ofrecido un antiguo jefe. Así es cómo inició la conversación:

"Gracias por tu oferta. Me emociona esta oportunidad. Por desgracia, no creo que esta compensación refleje todo lo que puedo ofrecer. Según mis habilidades y las responsabilidades que se me piden, creo que esta X cantidad tiene más sentido".

6. El salario base no lo es todo

Woodruff-Santos confiesa que sus negociaciones salariales no siempre salieron como esperaba, especialmente al principio. En una ocasión, pidió una mejor cifra por teléfono, y el reclutador, un poco a regañadientes, prometió que llamaría de nuevo con una respuesta de los mandamases.

Al cabo de una semana, obtuvo su respuesta: no iban a alterar su salario base, pero sí que subirían su bonificación por firmar para que al menos equivaliera a lo que ella pedía.

"Tu paquete de compensación es más que tu salario base. Puedes negociar otros factores como el bonus de la firma, la bonificación anual o beneficios como el seguro de salud, días de vacaciones, horario flexible...".

7. Consulta la oferta final con gente de confianza

Finalmente, antes de dar el "Sí" final, no temas recurrir a profesionales veteranos de confianza.

"En una ocasión acudí a 2 mentores para que me aconsejaran sobre el rango salarial adecuado, qué beneficios debería pedir, y que me dieran cifras para saber qué ofertas realmente iban a ser razonables".

No desdeñes el apartado netwoking. Busca a contactos con más experiencia que tú en el sector y pide educadamente que te echen una mano en todas las fases del proceso. ¡No olvides que les debes una".