Ansiedad y comida, ¿cómo controlar el hambre compulsiva?

Una pareja come hamburguesas y patatas fritas.

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¿Cuál es la relación entre ansiedad y comida?, ¿cómo se debe controlar el hambre compulsiva?, ¿conoces los principales síntomas de que estás comiendo compulsivamente? 

El sexólogo y psicólogo José Martín del Pliego, delegado de la Escuela Oficial de Hipnosis de Castilla y León, contesta a esta y otras preguntas para Business Insider España

¿Cuál es la relación entre la comida y la ansiedad?

La ansiedad por la comida, apunta el profesional, es, en realidad, la ansiedad por otra cosa. Puede ser hambre por tener un descanso, por necesidad de compañía, por una necesidad no cubierta, "hambre por sentirme bien o para tapar una emoción más profunda e incómoda".

La comida, los azúcares refinados y productos que se añaden artificialmente a la comida funcionan como una especia de droga que produce un corto alivio en el sistema nervioso. El objetivo de la alimentación es la nutrición, indica, "no es aliviar nuestra ansiedad".

Por eso es importante distinguir el hambre física que busca la nutrición, del hambre emocional que trata de tapar esa ansiedad, con la que debería conectar, para saber de dónde viene y qué es lo que quiere.

Síntomas de que estás comiendo compulsivamente

Aquí manda el hambre emocional, explica el psicólogo, "no hay una necesidad física. Entramos en falta de control. La compulsión por comer es tan grande que, una vez iniciada, es difícil pararla. Azúcar, hidratos de carbono o alimentos procesados son los preferidos".

Una de las claves que conecta comida y ansiedad, señala Martín del Pliego, es que se come muy rápido y, cuando la persona se da cuenta, se siente tremendamente llena y asqueada con ella misma y llena de culpa y vergüenza, con lo que se prefiere comer sola para no ser observada por nadie.

Incide, además, en que hay intentos repetidos de dejarlo que resultan imposibles, es un continuo intento de restricción y vuelta a la recaída.

¿Por qué se llega a comer de manera compulsiva?

Para entender la relación entre ansiedad y comida compulsiva, anota el experto, hay que tener en cuenta que "en nuestro sótano emocional todos tenemos partes con dolor que se activan por alguna circunstancia vital". 

Pueden estar latentes, concreta, sin hacer ruido, pero algo interno o externo lo activa y, como suele ser antiguo, infantil o adolescente, cuando llega lo hace con mucha fuerza y de manera muy desproporcionada. 

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La persona, en algunas ocasiones, ni siquiera sabe qué es lo que le hace sentir mal, pero nota que hay algo que le desborda y que necesita regular de forma urgente. 

Ahí entra, como se ha explicado, la comida, que sirve, aunque sea solo por unos instantes, como una mala herramienta de alivio a corto plazo de aquello que me hace sentir mal. "Por eso devoramos compulsivamente la comida, necesitamos de inmediato su efecto", apunta.

Ansiedad y comida: 7  consejos para controlar el hambre compulsiva

Recuerda que el hambre compulsiva o emocional está tratando de aliviar la ansiedad, destaca el psicólogo. 

Para controlar el hambre compulsiva, si quieres trabajar tú solo, señala, estas son sus recomendaciones: 

  1. Bebe bastante agua a sorbos y pasa al punto 3. Puedes compaginarlo con el punto 4.
  2. Muévete, no te quedes parado con el hambre, estira un rato, date un paseo, sal de la cocina, haz unas flexiones.
  3. El deseo por comer dura entre 5 y 10 minutos. "Cuando hablamos de hambre emocional se habrá pasado en este tiempo o cuando estés haciendo otras cosas".
  4. Concéntrate en hacer respiraciones lentas durante un par de minutos. Las mejores para eso son las de coger el aire en 5 segundos y soltarlo en otros 5.
  5. Tu trabajo es manejar ese rato, que no es tan largo ni tan horrible, para evitar comer si no toca; pero, si al final vas a comer algo, que sea saludable. Ten cosas preparadas, nada de azúcar ni procesados.
  6. Si tienes preparada alguna actividad entretenida que dure unos minutos como alternativa a comer, te resultará más fácil actuar rápido.
  7. No te machaques si al final no puedes controlarte y vuelve a intentarlo usando otras herramientas.

En su consulta, cuando trata con pacientes que sufren problemas de ansiedad y comida, explica el doctor, "nuestro trabajo sería el de conectar con esa respuesta emocional, liberarla y procesarla con el objeto de sanarla y que no forme parte de la vida de la persona". 

En su caso, utiliza técnicas que trabajan con el inconsciente como hipnosis o Brainspotting, "que funcionan muy bien es estos casos", asevera.

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