La base de cotización de los jóvenes en España ha aumentado en más de 300 euros desde 2018, aunque la brecha salarial de género sigue presente

Que el mercado laboral español está teniendo un comportamiento objetivamente bueno —y más teniendo en cuenta la incertidumbre y la inestabilidad geopolítica— es ya una obviedad de difícil discusión. Una buena muestra es cómo ha variado la base de cotización en general, y la de los jóvenes en particular. 

También es poco rebatible, el hecho de que, aunque esté mejorando, en este país hay un enorme problema con el paro juvenil.

El sueldo medio entre los jóvenes creció un 27%

Las sucesivas subidas del Salario Mínimo Interprofesional, así como los efectos de la reforma laboral, son 2 de las razones que explican la mejora en las condiciones laborales de los más jóvenes en España. 

Algo que se comprueba analizando los datos que publica la Seguridad Social, acerca de las bases de cotización medias, es decir, la remuneración mensual bruta que recibe un trabajador, incluyendo las pagas extras, las horas extraordinarias y las vacaciones retribuidas y no disfrutadas. 

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Según las estadísticas oficiales, la base de cotización media entre los jóvenes menores de 24 años pasó de 888,3 euros en enero de 2018 a los 1.135,83 euros de diciembre de 2022. Es decir, un aumento de 247,53 euros (+27,87%). 

En el caso de los trabajadores y trabajadoras entre 25 y 29 años, la base de cotización media se elevó de 1.363,57 euros a 1.734,36. Lo que supone un incremento de 370,79 euros (+27,19%). 

Por tanto, de media, la remuneración bruta entre los jóvenes menores de 30 años en España creció en 309,16 euros (+27,53%).

Esto implica una subida superior a la general, ya que la base de cotización media entre todas las edades pasó de 1.772,53 a 2.047,46 euros: 274,93 euros, un 15,51%.

Ellos cobran 145 euros más que ellas

Como el paro juvenil, la brecha salarial entre hombres y mujeres es otra carencia histórica del mercado de trabajo español. Entre los jóvenes —aunque muy lentamente se vaya corrigiendo— el desfase también se da. 

De media, en enero de 2018, la base de cotización de los menores de 30 años era de 1.190,15 euros (951,51 para los menores de 24 y 1.428,79 entre 25 y 29 años). En el caso de las mujeres era de 1.057,52 euros (817,9 entre las más jóvenes y 1.297,15 después de los 25).

En diciembre de 2022, la remuneración bruta de ellos ha subido a 1.503,41 euros (+26,32%) y el de ellas asciende a 1.358,55 (+28,46%).