China ocultó la auténtica magnitud del coronavirus al falsificar el número de muertos y contagiados, según informes de la inteligencia de Estados Unidos
- Un informe de los servicios secretos estadounidenses asegura que China habría falseado los datos sobre el impacto del COVID-19 en sus fronteras.
- La información, adelantada por Bloomberg, ha aparecido después de que EEUU haya duplicado el número de infectados de China.
- Recientemente el país asiático ha revisado su metodología para contar casos y sólo el martes agregó más de 1.500 infectados asintomáticos a su total, lo que ha aumentado las sospechas de que los datos anteriores estén viciados.
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Los servicios de Inteligencia estadounidenses creen que China puede estar ocultando el alcance del brote de coronavirus en sus fronteras, falseando datos y reduciendo su impacto en la sociedad. Así lo asegura un informe clasificado de la Casa Blanca validado por tres funcionarios del cuerpo.
Este documento, que detalla muchas más actuaciones todavía desconocidas, alude a los informes públicos compartidos por el Gobierno chino sobre casos de muerte y contagio por coronavirus y asegura que las cifras están viciadas. Concluye, según ha adelantado Bloomberg, que toda la información de la pandemia que llega sobre China es falsa.
El brote comenzó en la provincia china de Hubei a finales de 2019, pero el país ha reportado públicamente solo unos 82.000 casos de contagio y 3.300 muertes, datos muy positivos teniendo en cuenta el alcance de la infección y el volumen poblacional del país. Recientemente, el país asiático ha revisado su metodología para contar casos y sólo el martes agregó más de 1.500 infectados asintomáticos a su total.
Al calor de estas cifras, bien es cierto que el susodicho informe ha aparecido precisamente a la vez que las comparaciones de China con Estados Unidos, con 200.000 casos de COVID-19 y más de 4.000 fallecidos. Actualmente, EEUU es el país del mundo con el brote más grande, pero algunos de sus expertos echan parte de la culpa a la organización china.
Es el caso de Deborah Birx, inmunóloga del Departamento de Estado que asesora a la Casa Blanca sobre la respuesta al brote. La doctora asegura que parte de las respuestas equivocadas de la comunidad internacional para hacer frente al virus parten de subestimar el impacto del COVID-19 en China.
Las urnas funerarias y cremaciones en Wuhan también cuestionan los datos
La semana pasada Wuhan abrió las puertas de 8 funerarias para que los ciudadanos pudieran ir a recoger las cenizas de sus familiares, tal y como explica Bloomberg. El hecho ha sacado a la luz las interminables filas y montones de urnas funerarias presentes en la ciudad, lo que suscita nuevas sospechas sobre la magnitud de la pandemia.
Solo en el exterior de una de las funerarias de Wuhan se ha podido fotografiar a un camión transportando unas 2.500 urnas funerarias el pasado miércoles y otras tantas al día siguiente, según ha publicado la revista Caixin, uno de los medios privados de mayor renombre en China.
Ese mismo medio ha publicado otra imagen en la que se puede ver, en teoría, otras 3.500 urnas funerarias esperando dentro del recinto, aunque no está claro si estaban vacías o ya estaban esperando a que fueran recogidas por sus familiares. Las cifras oficiales del Gobierno, en cambio, hablan de sólo 2.547 muertes en Wuhan y desde el inicio de la pandemia.
La provincia de Henan: otra excepción a las cifras positivas
Los datos de urnas y cremaciones no son los únicos indicios de que algo no marcha bien con los datos oficiales. Existen también casos de confinamientos extremos como el de la provincia de Henan, en el centro de China, recientemente relegada a un bloqueo total.
Así lo ha decretado el Gobierno de Xi Jinping, quien ordenó a las autoridades atrincherar la zona, de unos 600.000 habitantes, por miedo a una segunda ola de coronavirus.
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